Por Phil Helsel - NBC News
El líder de una banda haitiana acusada de secuestrar a 17 misioneros ha amenazado con matarlos si no se cumplen sus exigencias, según muestra un nuevo vídeo aparentemente grabado el miércoles.
La banda 400 Mawozo, que controla la comuna de Ganthier en el suburbio de Puerto Príncipe donde los misioneros fueron secuestrados el sábado, exige un millón de dólares por rehén, según el ministro de Justicia del país.
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“Juro por el trueno que si no me dan lo que pido, meteré una bala en la cabeza de estos estadounidenses”, dijo en el video, según la agencia de noticias The Associated Press.
También amenazó al primer ministro Ariel Henry y el jefe de la policía nacional Léon Charles al hablar delante de varios ataúdes en los que al parecer yacían miembros de su pandilla recientemente abatidos.
“Ustedes me hacen llorar. Yo lloro agua. Pero voy a hacerles llorar sangre”, sostuvo.
Un funcionario del Departamento de Estado de EE.UU. confirmó que el vídeo, que ha estado circulando en las redes sociales, parece ser legítimo.
Christian Aid Ministries, una organización sin ánimo de lucro con sede en Ohio, comunicó el jueves que estaba al tanto del vídeo de Facebook que parece mostrar a miembros de la banda que secuestró a sus empleados.
“No haremos comentarios sobre las imágenes hasta que las personas directamente implicadas en la obtención de la liberación de los rehenes hayan determinado que los comentarios no pondrán en peligro la seguridad y el bienestar de nuestro personal y los miembros de su familia”, señaló la organización Christian Aid Ministries.
Las familias de los rehenes pidieron en un comunicado que se rezara por el regreso sano y salvo de los rehenes y dijeron que estaban rezando por los miembros de la banda.
Christian Aid Ministries señaló que las familias proceden de comunidades amish, menonitas y otras anabaptistas de Wisconsin, Ohio, Michigan, Tennessee, Pennsylvania, Oregón y Ontario. Los misioneros secuestrados son cinco niños de entre 8 meses y 15 años y 12 adultos, según dicho el grupo.
Haití ya era uno de los países más pobres del hemisferio occidental cuando su presidente, Jovenel Moïse, fue asesinado en julio. Un devastador terremoto de 7.2 grados de magnitud sacudió el país en agosto, matando a más de 2,000 personas y desplazando a miles más.
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Se han producido manifestaciones en Haití por las condiciones existentes, y el lunes los haitianos celebraron una huelga general en Puerto Príncipe para protestar por la violencia generalizada y la devastada economía del país.
Christian Aid Ministries comunicó que el trabajo del grupo en Haití incluye el suministro de medicamentos a las clínicas, la enseñanza a los pastores haitianos y, más recientemente, la coordinación de un proyecto de reconstrucción para los haitianos que perdieron sus hogares por el terremoto de julio.
El FBI está colaborando con el Departamento de Estado para tratar de liberar a los rehenes. Un funcionario del Departamento de estado dijo que su objetivo es su seguridad.
El Centro de Análisis e Investigación de los Derechos Humanos, un grupo haitiano sin ánimo de lucro, indicó que ha registrado al menos 628 secuestros desde enero, 29 de ellos de ciudadanos extranjeros. El número de incidentes aumentó un 300% en septiembre en comparación con julio, según el organismo.