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El desplome de unas graderías en una plaza de toros en Colombia deja al menos 4 muertos y cientos de heridos

El colapso ocurrió durante una corrida en el municipio El Espinal, departamento del Tolima (centro del país). Entre los muertos se cuentan tres adultos y un menor de edad. El toro se salió del complejo y anduvo suelto en las calles hasta que fue atrapado.

Al menos cuatro personas murieron y cientos resultaron heridas este domingo en Colombia tras el desplome de un palco (o gradería) en una plaza de toros mientras se realizaba una corrida, informaron autoridades locales.

El desplome ocurrió en una plaza de toros del municipio El Espinal, en el departamento de Tolima (centro de Colombia), al oeste de la capital, Bogotá. Entre los muertos contabilizados hasta el momento se encuentran tres adultos y un menor de edad. No se conocen sus identidades.

Un total de 322 personas llegaron a los distintos servicios de urgencias hospitalarios privados y públicos del departamento, según las autoridades regionales.

El gobernador de Tolima, Ricardo Orozco, dijo que el balance es todavía preliminar.

Videos del derrumbe difundidos en redes sociales mostraron escenas de pánico entre la gran masa de asistentes en medio de los escombros del palco que se vino abajo y que aparentemente estaba hecho de madera.

Socorristas fueron movilizados al lugar para asistir a los heridos y trasladarlos a hospitales cercanos, dijo el alcalde de El Espinal, Juan Carlos Tamayo.

“Lamentando profundamente lo sucedido en nuestra plaza de toros Gilberto Charry, quiero pedirle a la ciudadanía que esta en la plaza de toros por favor evacuar, ya los organismos de control están atendiendo la emergencia y ya se evacuaron los heridos a los hospitales”, dijo.

Según el diario colombiano El Tiempo, se teme que los centros de atención médica del municipio El Espinal no den abasto para atender al gran número de heridos.

“Necesitamos apoyo de ambulancias y hospitales vecinos, mucha gente todavía sin atender”, dijo a ese periódico el concejal Iván Ferney Rojas. "Colapsó nuestro Hospital".

La tradicional corrida o corraleja, como se le conoce en Colombia, es un evento donde el público tiene permitido subir al ruedo para interactuar con los toros. Medios locales reportaron que un animal se salió del ruedo en medio del caos y aterrorizó a los residentes del municipio antes de ser capturado.

Gustavo Petro, el recién electo presidente de Colombia, tuiteó inmediatamente sobre el colapso pidiendo a las alcaldías "no autorizar más espectáculos con la muerte de personas o animales".

"Espero que todas las personas afectadas por el derrumbe de la plaza de El Espinal puedan salir airosas de sus heridas", escribió Petro. "Esto ya había sucedido antes en Sincelejo (capital del departamento caribeño de Sucre)".

También en Twitter, el presidente saliente Iván Duque lamentó lo sucedido y dijo que se pedirá una investigación de los hechos.

"Falleció en mis manos"

Henry Medina, un residente de El Espinal, dijo a la emisora Blu Radio, de Bogotá, que se encontraba en la plaza de toros cuando se desplomó el graderío y que socorrió a varias víctimas.

"Sentimos que (el graderío) estaba temblando, pero nada, todo se fue abajo", contó Medina.

Según su testimonio, entre los heridos se encontraban niños y ancianos a los que asistentes como él trataron de ayudar en medio de las escenas de pánico.

"Ayudé a sacar a tres niños y una niña de 3 añitos que desafortunadamente falleció", dijo. "También le dimos auxilio a un señor de edad, pero no pudimos con él. Le dimos respiración boca a boca, pero falleció en mis manos".

La corrida de toros de este domingo forma parte de los festejos por las populares celebraciones de San Pedro.

Accidentes similares en plazas de toros han ocurrido en otras locaciones de Colombia en el pasado. Trescientas personas murieron en 1980 al derrumbarse los palcos de la plaza de toros Hermógenes Cumplido, en la ciudad de Sincelejo, y otras quinientas resultaron heridas.

El derrumbe ocurrió cuando los aficionados se dedicaban a torear 40 animales lanzados al ruedo en las ya tradicionales fiestas de La Corraleja. El accidente llevó a las autoridades a suspender los festejos ese año y generó encendidos debates sobre el trato a los animales.