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Una sobreviviente del camión de Texas cuenta cómo salvó a una amiga y denuncia que el conductor oyó sus gritos de auxilio

“La gente gritaba, algunos lloraban. Las mujeres pedían que se detuviera y abrieran las puertas porque el camión estaba caliente y no podían respirar”, denuncia. Una semana después de la tragedia, las autoridades de Texas han identificado a las 53 víctimas mortales.

Por Sonia Pérez - The Associated Press

Los 53 migrantes que murieron asfixiados por el calor en el camión hallado hace una semana abandonado en una carretera de San Antonio ya han sido identificados, según informaron este lunes las autoridades forenses del condado texano de Bexar.

Otros 16 ocupantes del camión, inmigrantes indocumentados que estaban siendo trasladados por coyotes a través de la frontera, pudieron sobrevivir. Entre ellos está Yénifer Yulisa Cardona Tomás, una guatemalteca que salvó la vida al sentarse cerca de la puerta.

Recordando el consejo de una amiga sobre quedarse cerca de la puerta porque haría más fresco, Cardona, de 20 años, lo compartió con otra amiga que había hecho durante el viaje.

"Le dije a una amiga que no nos metiéramos hasta el fondo y nos quedamos al principio, en el mismo lugar, sin movernos", explicó. La joven recuerda que poco a poco se fue recostando en alguien dentro del remolque del trailer y perdió el conocimiento.

"Luego desperté en el hospital", contó Cardona por teléfono a la agencia de información The Associated Press desde el Hospital Metodista Metropolitano, en San Antonio, en el que fue ingresada.

Al entrar al tráiler, los coyotes requisaron los teléfonos celulares a los migrantes y rociaron el piso del furgón con especias —ella cree que era consomé de pollo— para que los perros de vigilancia de la Patrulla Fronteriza no los detectaran, según explicó la joven.

"Eso picaba mucho en el cuerpo", aseguró Cardona a la agencia.

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La joven afirmó que había unas 70 personas en el camión y que, a medida que iba aumentando el calor, se iban aglomerando a la salida del tráiler, justo donde ella estaba.

El tráiler hizo varias paradas adicionales para recoger a migrantes.

"La gente gritaba, algunos lloraban. Sobre todo las mujeres pedían que se detuviera y abrieran las puertas porque el camión estaba caliente y no podían respirar", recordó.

Según Cardona, alguien que asume era el conductor les respondió que pronto llegarían. “Quedan 20 minutos, seis minutos", explicó la mujer, citando lo que les dijo. "La gente pedía agua. A algunos se les terminó. Otros sí cargaban", precisó la joven, quien estuvo internada ocho días y esperaba que este lunes le dieran el alta.

El conductor, identificado como Homero Zamorano Jr., de 45 años, y otras tres personas fueron arrestadas y acusadas por la tragedia.

El Gobierno guatemalteco indicó que 20 de los migrantes muertos son ciudadanos de ese país; de ellos, 16 ya han sido identificados.

Cardona le había contado a su familia que quería irse a trabajar a Estados Unidos tras graduarse de secretaria, pero estaba sin empleo, según recuerda su padre, Mynor Cordón.

El hombre pagó 4,000 dólares a un coyote para que su hija llegara a su destino en Carolina del Norte. Salió de Guatemala el 30 de mayo y viajó en autos y camiones antes antes de subirse al camión.

"No sabía que viajaría en el tráiler. Ella nos dijo que iría a pie, parece que fue en el último momento que los traficantes decidieron subirla, junto a dos amigas más, que sobrevivieron. Una de ellas aún está en estado crítico", afirmó.

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Cardona cruzó el Río Bravo pocos días antes de la tragedia y estuvo encerrada en una bodega dentro de territorio estadounidense. El último mensaje que envió a sus padres fue el lunes 27 de junio las 11:28 la mañana de Texas. “En una hora vamos a salir”, escribió.

Los padres se enteraron de la tragedia a las 9 de la noche de ese día, pero no supieron nada de su hija hasta dos días después, cuando familiares en Estados Unidos supieron que estaba en un hospital.

"Lloramos tanto, incluso yo estaba pensando ya donde la íbamos a velar y a enterrar. Ella es un milagro", celebró su padre.