Por Maria Ramirez Uribe - Politifact
Mientras se acercan las elecciones de medio término en noviembre, políticos y anuncios televisivos repiten afirmaciones inexactas y engañosas sobre inmigración. Una encuesta de la National Public Radio (NPR) y la consultora Ipsos reveló que un número significativo de estadounidenses cree esas mentiras.
Unos 1,000 adultos fueron consultados sobre la veracidad de algunas noticias, entre ellas las que dicen que hay una “invasión” en la frontera sur y que la mayor parte del fentanilo que entra al país llega contrabandeado por migrantes que cruzan la frontera de forma irregular. Ninguna de las afirmaciones es cierta.
“Que el público las crea se debe principalmente a que es la información que los líderes políticos les repiten una y otra vez”, lamentó Theresa Cardinal Brown, directora de Inmigración y Política Transfronteriza del Centro de Política Bipartidista.
PolitiFact revisó los argumentos que los encuestados consideraron verdaderos. La mayoría contradice la realidad.
La frontera sur no está abierta
Algunos funcionarios electos, medios de comunicación conservadores y usuarios en redes sociales aseguran que la frontera sur está abierta. Un 42% de los estadounidenses consultados cree que eso es total o parcialmente cierto, según la encuesta de NPR.
“Decir que la frontera está abierta es insinuar que no hay nadie que la vigile ni que impida que la gente cruce y eso no es cierto”, aclaró Brown.
Una combinación de barreras físicas como cercas o vallas, tecnología de vigilancia como drones y unos 20,000 agentes de la Patrulla Fronteriza limitan qué y quién entra a Estados Unidos.
En el contexto de la pandemia de COVID-19, las personas que son halladas por la Patrulla Fronteriza tratando de cruzar la frontera de forma irregular son devueltas a su país de origen (o a México, su último lugar de tránsito) o se les permite entrar para presentar su caso bajo la ley de inmigración de Estados Unidos.
Algunas llegan sin ser detectadas: eso ha ocurrido en múltiples Administraciones, entre ellas la de Joe Biden y Donald Trump. Pero eso no se debe a políticas de "frontera abierta", decir eso negaría el trabajo de los agentes de la Patrulla Fronteriza y los miles de millones de dólares invertidos durante décadas para controlar los movimientos en la frontera suroeste.
No hay una “invasión” en la frontera
Los anuncios políticos enfocados en las elecciones de medio término tildan la migración irregular en la frontera sur como una “invasión”. Más de la mitad de los estadounidenses encuestados por NPR/Ipsos cree que eso es completa o parcialmente cierto.
Pero muchas personas que cruzan la frontera irregularmente se entregan a los agentes de la Patrulla Fronteriza para pedir asilo, aclaró Brown.
Decir que la frontera está abierta es insinuar que no hay nadie que la vigile ni que impida que la gente cruce y eso no es cierto”
Theresa Brown Centro de Política Bipartidista
“Ese no es un comportamiento que se pueda atribuir a un ‘invasor’”, sostuvo Brown. El término “invasión”, aclaró, usualmente se utiliza para describir el esfuerzo organizado de un país para entrar por la fuerza y apoderarse de otro.
Esa narrativa ha sido impulsada por funcionarios locales de Texas. Varios condados han adoptado declaraciones de desastre calificando de “invasión” el número de migrantes cruzando la frontera.
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Greg Abbott, gobernador republicano de Texas que busca la reelección este año, está siendo alentado por funcionarios locales a declarar una “invasión” en el estado. Esto, dicen, les permitiría desviar recursos estatales hacia la expulsión de migrantes.
La candidata republicana a gobernadora de Arizona, Kari Lake, ha prometido declarar una “invasión” si es elegida.
La mayor parte del fentanilo que entra a Estados Unidos no es traído por migrantes
Las muertes por sobredosis, principalmente por fentanilo, han aumentado en Estados Unidos desde 2013. México es la principal fuente del fentanilo ilegal que llega al país, según un informe de RAND Corp, un laboratorio de ideas de política global.
Un 50% de los estadounidenses encuestados cree que es parcial o completamente cierto que “los migrantes que traen fentanilo y otras drogas ilegales a través de la frontera sur son responsables del aumento de las sobredosis y las muertes por drogas en Estados Unidos”.
Un 39% piensa que “la mayor parte del fentanilo que entra al país es por contrabando de migrantes que cruzan la frontera de forma irregular”.
Pero la mayor parte del fentanilo y otras drogas ilegales que llegan desde México entra en grandes camiones o carros a través de puertos oficiales, según el Servicio de Investigación del Congreso, que realiza investigaciones y análisis de políticas públicas para esa entidad.
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En los puertos de entrada, funcionarios de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza realizan inspecciones para determinar si las personas, los vehículos y lo que transportan entrará legalmente en Estados Unidos.
En lo que va del año fiscal 2022, que inició en octubre de 2021, los agentes fronterizos han incautado más de 10,000 libras de fentanilo, unas 9,000 en los puertos de entrada.
Los agentes de la Patrulla Fronteriza tienen puestos de control en las principales carreteras, indicó Brown.
“La mayoría de las incautaciones de fentanilo de la Patrulla Fronteriza se producen en esos lugares”, aclaró. “No en posesión de migrantes”.
Los migrantes no tienen más probabilidades de cometer delitos que los estadounidenses
Una cuarta parte de los consultados cree incorrectamente que es cierto que los migrantes tienen más probabilidades que los estadounidenses de cometer delitos o de estar en prisión, según la encuesta de NPR/Ipsos. Pero los estudios refutan este argumento.
“Las personas nacidas en Estados Unidos tienen más del doble de probabilidades de ser detenidas por delitos violentos, 2.5 veces más por cargos de drogas y más de cuatro por ofensas contra la propiedad”, reveló un estudio de 2020 de la Universidad de Wisconsin-Madison.
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El número de cargos penales que figuran como base para la deportación de migrantes también ha disminuido en la última década.
En 2010, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas enumeró alrededor de 57,000 motivos relacionados con delitos para la deportación. Ese número se redujo a menos de 9,000 en 2021, según datos del Transactional Records Access Clearinghouse de la Universidad de Syracuse.
Las personas en estatus irregular no tienen derecho a prestaciones federales
Alrededor del 38% de los encuestados por NPR cree que es verdad que “los migrantes son más propensos que los estadounidenses a hacer uso de asistencia pública”.
Las personas que se encuentran en Estados Unidos de forma irregular no tienen derecho a la mayoría de prestaciones federales, como la Seguridad Social, el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP, por sus siglas en inglés) y Medicaid para situaciones no urgentes.
La mayoría de las prestaciones públicas que se conceden en Estados Unidos son para los estadounidenses”
THERESA BROWN Centro de Política Bipartidista
Podrían ser elegibles para ciertos programas de atención médica y de nutrición, si esos beneficios se consideran necesarios para proteger la vida o garantizar la seguridad en situaciones de emergencia. Algunos estados como Nueva York y California les permiten recibir ciertas prestaciones financiadas con fondos estatales.
En general, las investigaciones demuestran que los migrantes no las utilizan más que los nacidos en Estados Unidos.
“En general, la mayoría de las prestaciones públicas que se conceden en Estados Unidos son para los estadounidenses”, subrayó Brown.
Los migrantes no están siendo trasladados en secreto
Algunos funcionarios republicanos han afirmado que el Gobierno está trasladando en secreto, de un estado a otro, a los migrantes que se encuentran en situación irregular.
Un 35% de los estadounidenses cree que esto es total o parcialmente cierto, según NPR.
Algunas veces, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas traslada a los adultos de un centro de detención a otro utilizando los servicios aéreos de ICE.
Según la ley federal, los niños no acompañados no pueden ser retenidos por agentes fronterizos durante más de 72 horas. Por ello, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza los entrega al cuidado del Departamento de Salud y Servicios Humanos.
Esta agencia los lleva hasta sus padres, familiares adultos o refugios autorizados. Por eso, a menudo es necesario transportar a los niños en avión por todo el país.
Pero estos vuelos se realizan a cualquier hora y el Departamento de Salud y Servicios Humanos da pocos detalles para proteger la privacidad de los menores, informó el diario The Washington Post.
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