IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

México cedió ante la política migratoria de Trump. ¿Qué hará ahora López Obrador ante los planes de Biden?

El Gobierno mexicano ha celebrado algunas de las primeras acciones de Biden a favor de migrantes, prometiendo colaborar pero sin aclarar cómo lo hará ni qué asistencia dará. Mientras, miles de personas están en un limbo en la frontera.
/ Source: Telemundo

México no pagó por el muro prometido por Donald Trump, pero en los cuatro años en que fue presidente sí permitió que su Gobierno implementara partes de su restrictiva agenda migratoria, apoyándole, por ejemplo, con el despliegue de la Guardia Nacional mexicana para frenar caravanas migrantes centroamericanas, o su aceptación del programa Quédate en México, con el que decenas de miles de solicitantes de asilo en Estados Unidos tuvieron que realizar sus trámites desde territorio mexicano, donde han estado expuestos a secuestros y extorsión.

Ahora que la Administración entrante de Joe Biden ha comenzado a implementar cambios que dan esperanza a personas migrantes, México ha prometido colaboración y trabajo conjunto.

Sin embargo, a pesar de la importancia que la política migratoria tiene para ambos países y de la cantidad de personas migrantes que se encuentran en un limbo, el Gobierno mexicano de Andrés Manuel López Obrador ha ofrecido muy pocos detalles sobre cuáles son sus prioridades, intenciones o planes para esta nueva etapa.

[La situación de miles de migrantes en la frontera de México empeora a diario]

“México celebra las medidas en beneficio de la comunidad mexicana en Estados Unidos, particularmente el robustecimiento del programa DACA […] y el fin de la construcción del muro fronterizo”, señaló a Noticias Telemundo en una nota Roberto Velasco, director para América del Norte de la Cancillería mexicana.

Agregó que se le dará “seguimiento” a la posible reforma migratoria, y que se ampliará la atención en los consulados mexicanos, que constituyen la mayor red de cualquier nación en todo el mundo.

Respecto a los temas tratados en las llamadas entre López Obrador y Biden, dijo de manera muy general que “destacan la protección de las personas mexicanas en Estados Unidos, así como una avenida de cooperación hacia un programa de desarrollo económico para el norte de Centroamérica”.

Pese a varias preguntas expresas de Noticias Telemundo, Velasco no ahondó ni especificó qué se hará desde el lado mexicano o detalles de ese posible programa de cooperación para atender las causas de la emigración por pobreza y violencia.

Centroamericanos migrantes intentan huir de un integrante de la Guardia Nacional mexicana en Ciudad Juárez, México, para cruzar el río Bravo e intentar pedir asilo del lado estadounidense, el 25 de enero de 2021.
Centroamericanos migrantes intentan huir de un integrante de la Guardia Nacional mexicana en Ciudad Juárez, México, para cruzar el río Bravo e intentar pedir asilo del lado estadounidense, el 25 de enero de 2021.Reuters /

[López Obrador asegura que la fase crítica de su contagio de COVID-19 ya está pasando]

Tampoco habló sobre cómo se trabajará para que las personas que migran huyendo de violencia no terminen siendo expuestas a tragedias, como sucedió a finales de enero a personas guatemaltecas que fueron calcinadas en Tamaulipas posiblemente por el narco.

“Si bien es cierto que los cambios que han tenido el impacto más grave a la población refugiada y migrante durante los años de Trump tenían origen en Estados Unidos, muchas de estas políticas dependen de la colaboración del Estado mexicano, y por eso hay una responsabilidad particular hacia las víctimas”, señaló Daniel Berlin, subdirector en México del grupo de defensoría Asylum Access.

Hay miles de personas en espera de información o alivio, expuestas no solo a la violencia sino a los contagios de COVID-19. Esto es lo que se espera:

Dudas en torno al fin de Quédate en México

La Administración Biden ha anunciado protecciones para los dreamers beneficiados por el programa DACA y este martes develará un equipo dedicado a reunificar a las familias que siguen separadas por la política de tolerancia cero.

[Una aldea de Guatemala está de luto por la muerte de migrantes en México, donde ha habido al menos cinco masacres similares en una década]

Suspendió además Quédate en México, un programa que ha forzado a casi 70,000 personas que huyeron de violencia, en países sobre todo centroamericanos, a tramitar su posible asilo a Estados Unidos teniendo que esperar desde una parte del territorio mexicano, donde varios sufrieron secuestros, extorsión y más violencia.

Personas migrantes en un albergue de Matamoros, en el norte de México. Hay pocas medidas sanitarias en este tipo de lugares.
Personas migrantes en un albergue de Matamoros, en el norte de México, en noviembre. Hay pocas medidas sanitarias en este tipo de lugares.AP

El Gobierno de Biden asimismo buscó aplazar las deportaciones, aunque un tribunal frenó temporalmente esa iniciativa en lo que se resuelve una demanda de Texas.

Desde antes de que se estableciera Quédate en México como parte de los así llamados Protocolos de Protección de Migrantes (MPP, en inglés), en territorio mexicano ya había más de 12,000 casos pendientes o irresueltos de menores y adultos que habían pedido refugio desde hace varios años.

Es decir, después de que Trump amenazara con imponer aranceles, México accedió a albergar a personas que planeaban pedir asilo a Estados Unidos... aunque no había resuelto aún las solicitudes a otros miles más que lo solicitaron en su territorio.

Eso significó que muchas de las estancias migratorias y albergues ya estaban por encima de su capacidad. Con la pandemia de COVID-19 en México, que se encuentra en su peor punto de contagios y muertes, muchos de los refugios migrantes han cerrado para evitar la propagación de la enfermedad.

[Hacinamiento, insalubridad y mala alimentación: así se vive en las estaciones migratorias en México]

La sociedad civil ha respondido con lo poco que puede, como el programa de convivencia y asistencia a menores llamado Sidewalk School, que busca darles zapatos, ropa y tiempos de juego a menores de edad que viven en los campamentos improvisados de Matamoros.

Todas esas personas, pese a que la nueva Administración Biden suspendió el programa migratorio, siguen en territorio mexicano, bajo las jurisdicciones mexicanas, y sin saber exactamente qué será de ellas. 

“Desafortunadamente no hay por parte de ningún nivel de Gobierno apoyo alguno”, dijo a Noticias Telemundo el director del albergue Casa del Migrante, Juan Antonio Sierra.

No se ha dicho cómo se trabajará para facilitar que miles de personas afectadas por Quédate en México sigan con sus procesos ni se ha aclarado qué sucederá con los solicitantes de asilo nuevos que pasen por territorio mexicano camino a Estados Unidos.

Hay todavía “miles de personas en un limbo legal, con deseos a solicitar asilo en Estados Unidos, pero viviendo en diversos lugares en México sin ningún apoyo estatal”, indicó Berlin, de Asylum Access.

Agregó que otras “decenas de miles de personas recibieron órdenes de deportación debido a los retos que MPP significó para presentar un caso de asilo: muchas no asistían a sus audiencias, en unos casos porque habían sido secuestrados, otras porque habían sido trasladados a puntos lejanos de la frontera”.

[Gustavo fue atacado con machete antes de ir a EE.UU. para intentar reunirse con su abuelo. Lo deportaron sin avisar a su familia]

Sobre reformas y programas de desarrollo

Otro de los asuntos pendientes claves para la cooperación entre los dos países es la posibilidad de una reforma migratoria estadounidense.

Buena parte de las 11 millones de personas indocumentadas en Estados Unidos son de origen mexicano y se beneficiarían de abrirse un camino a la ciudadanía.

La Casa Blanca ha dado a entender que podría intentar promover esa reforma por pedazos y gradualmente, dado que será muy complicado que la acepte el Congreso –donde los demócratas apenas tienen mayoría en las dos cámaras y requieren de apoyo republicano para ciertas medidas–.

Lo que sí han dicho los dos Gobiernos es que se centrarán en negociar un programa conjunto para atender las causas bases de la emigración desde Centroamérica.

El Gobierno de López Obrador había ya establecido un plan similar de fondos de ayuda; sin embargo, buena parte del dinero en realidad fue usado para repatriar a las personas migrantes y restringir su paso en vez de para el desarrollo de América Central.

Para Berlin, de Asylum Access, cualquier programa conjunto sería insuficiente si no incluye inversiones que vayan más allá de darles dinero a las autoridades de Guatemala, El Salvador, Nicaragua u Honduras.

[Fiscales de EE.UU. aseguran que el presidente de Honduras aceptó sobornos del narcotráfico]

“Es sumamente importante que los países de la región inviertan no solo en un desarrollo económico sostenible en el norte de Centroamérica, sino en las organizaciones e instituciones que pueden disminuir los niveles de violencia y persecución en estos países”, indicó el especialista, al señalar que sin ello la gente seguirá teniendo que dejar sus hogares en busca de asilo.

Aunque la pandemia ha llevado al cierre de buenas partes de los cruces por la frontera entre México y Estados Unidos, y con ello a una reducción en las detenciones fronterizas de personas migrantes, el COVID-19 no ha detenido por completo la migración.

La primera caravana migrante de 2021 a su paso desde Honduras hacia Guatemala.
La primera caravana migrante de 2021 a su paso desde Honduras hacia Guatemala.Getty Images

Muestra de ello es es que durante enero ya se organizaron dos caravanas de personas que salieron desde Honduras con la intención de emigrar por medio de México hacia territorio estadounidense, aunque vieron su camino frenado en la frontera guatemalteca.

"Cruzar una frontera para pedir protección de la persecución, tortura o muerte, implica un viaje esencial" incluso en tiempos de pandemia, recalcó Berlin. “Cuando no hay oportunidades de una vida digna ni de tener seguridad, los muros, la militarización de fronteras y políticas migratorias expresamente crueles no pueden frenar los deseos de viajar para buscar una vida mejor”, agregó.

Quedará por verse si las promesas de un nuevo enfoque por parte de Biden se vuelven realidad, y hasta qué punto México, que es país de tránsito y también país que alberga a migrantes, aclara cuáles serán sus propios planes para lidiar con el tema.