IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Legisladores que apoyaron la dura ley migratoria de DeSantis ahora piden a los inmigrantes que no abandonen Florida

"Esta es una ley con fines políticos, más que una nueva política pública", dijo el representante Rick Roth este lunes a líderes religiosos congregados en Hialeah. Sus comentarios parecen restar importancia a la severidad de la ley, considerada por algunos la más dura del país contra los inmigrantes.

Por Lourdes Hurtado

Legisladores republicanos de Florida que apoyaron la dura ley migratoria del gobernador, Ron DeSantis, han pedido a los trabajadores inmigrantes que no abandonen el estado, en medio del miedo a que un éxodo laboral golpee la economía local y de múltiples manifestaciones contra la nueva medida.

En un encuentro este lunes con líderes religiosos en la ciudad de Hialeah, en el condado Miami-Dade, organizado por la Asociación de Ministros Hispanos, los legisladores trataron de aplacar los temores de los inmigrantes, empleadores, organizaciones religiosas y grupos que defienden los derechos de esta comunidad, previo a la entrada en vigor de la ley, el venidero 1 de julio.

Alrededor de 160 personas asistieron al encuentro, en su mayoría ministros, pastores y organizaciones comunitarias que buscaban información sobre cómo la nueva ley migratoria —descrita por algunos como la más dura del país— impactará la forma en que sirven a sus congregaciones, muchos de cuyos miembros son inmigrantes indocumentados.

La ley firmada por DeSantis no entra en vigor hasta el 1 de julio, pero sus efectos ya se sienten en los campos de Florida.
La ley firmada por DeSantis no entra en vigor hasta el 1 de julio, pero sus efectos ya se sienten en los campos de Florida. Getty Images

"Esta es una ley con fines políticos, más que una nueva política pública, afirmó Rick Roth, representante republicano por el distrito 85 en la Cámara estatal, durante la reunión con los líderes religiosos, quienes se han mostrado preocupados por la medida SB1718, que fue convertida en ley por DeSantis tras firmarla el pasado 10 de mayo.

Los agricultores están enojados porque están perdiendo sus trabajadores, aseguró Roth a los presentes.

Muchos trabajadores indocumentados de los sectores de la agricultura, la construcción y el turismo han abandonado el estado en previsión de la entrada en vigor de la ley.

Berta, una trabajadora agrícola del estado, declaró a Noticias Telemundo que "pensamos irnos a Carolina del Sur porque nos humillaron, nos dieron una bofetada para que saliéramos de aquí".

El congresista Roth le pidió a los líderes religiosos asistentes al encuentro,que le pidieran a los inmigrantes en sus congregaciones no abandonar el estado. Roth y la representante Alina García, republicana por el distrito 115 y también presente en la reunión, votaron a favor de la ley.

"Este proyecto de ley es para meterle miedo a las personas [inmigrantes indocumentados] que no vengan al estado de la Florida y creo que ha hecho su trabajo [cumplido su objetivo]. Este proyecto de ley no tiene dientes", comentó García durante el encuentro.

Una activista que grabó los videos con las declaraciones de ambos legisladores durante el evento en Hialeah afirmó que quedó impactada.

María Bilbao, de la Campaña American Friends Service Committee, dijo que "es como decirle a la gente: 'Les vamos a hacer la vida una miseria psicológicamente, con el miedo, no los vamos a defender [...], pero quédense porque los necesitamos'".

Bilbao comentó que la medida, además, alienta a que los inmigrantes indocumentados sean delatados ante las autoridades de inmigración.

Roth no respondió a solicitudes de entrevista para recabar sus comentarios.

La legisladora Alina García afirmó en una entrevista con Noticias Telemundo el martes que el propósito de la reunión con los líderes religiosos era "para que las personas no sigan con el miedo, porque se ha creado [una atmósfera] de mala información".

La representante dijo, al hablar sobre el acápite de la ley que incluye sanciones para las personas que transporten inmigrantes indocumentados, que ello no es aplicable, por ejemplo, a las iglesias. "Esto es para las personas que están traficando con seres humanos, entrándolos a la Florida".

Según García, esta ley no ha cambiado en nada el tema de la inmigración, e insistió en que "es una ley para que la gente sepa que el estado de la Florida no es un estado santuario. No lo somos. Si son indocumentados, nosotros en la Florida no podemos más [recibirlos]. No queremos que sigan viniendo más personas ilegales al estado de la Florida".

Por su parte, el representante estatal Juan Alfonso Fernández-Barquín, republicano por el distrito 119, criticó a sus colegas republicanos por desestimar la ley como una “táctica de miedo”.

"De ninguna manera comparto su opinión", dijo Fernández-Barquín a NBC News en un comunicado, y agregó que la ley de inmigración de DeSantis "se centra en la ley y el orden y en asegurar que nuestro estado llene el espacio en que el Gobierno federal no ha actuado".

"Voté a favor de este proyecto de ley, apoyo este proyecto de ley y aplaudo a nuestro gobernador por hacer de esto una prioridad", dijo Fernández-Barquín.

La ley promulgada por DeSantis proporciona 12 millones de dólares a la iniciativa de reubicación de migrantes en otros estados, que él mismo ha impulsado, y que el año pasado se materializó con el envío de un grupo de migrantes que llegaron a Texas a Martha’s Vineyard, en Massachusetts, una acción dirigida a protestar contra la política migratoria del Gobierno federal.

También prohíbe a los gobiernos locales otorgar fondos a organizaciones que emitan documentos de identidad a personas que se encuentran de manera irregular en el país e invalida las licencias de conducir emitidas en otros estados en posesión de inmigrantes no autorizados.

Por otro lado, obliga a los hospitales que acepten a pacientes inscritos en el programa Medicaid a incluir una pregunta de ciudadanía en los formularios de ingreso, algo que, según los críticos de la nueva ley, pretende disuadir a los inmigrantes irregulares a buscar atención médica.

Además, el mismo gobernador describió el texto como una contrapropuesta a la política fronteriza de Biden: “Seguiremos tomando medidas para proteger a los residentes de Florida de las imprudentes políticas federales de fronteras abiertas”, dijo hace unas semanas.

El pasado 24 de mayo, tras meses de expectación, DeSantis anunció oficialmente que se sumaba oficialmente a la contienda presidencial, y luego hacer un anuncio oficial por la red social Twitter, que estuvo plagado de problemas técnicos.