Mientras el presidente, Joe Biden, emite órdenes ejecutivas que cancelan políticas de la Administración anterior, y promete impulsar una amplia reforma migratoria, el flujo de personas que intentan cruzar la frontera mexicana va en aumento.
A ello se suma la confusión y desesperación que reina entre los inmigrantes que buscan llegar a Estados Unidos debido a la crisis económica generada por la pandemia del coronavirus, así como los desastres naturales que han azotado Centroamérica en fechas recientes. Esta desesperación está siendo aprovechada por los traficantes de personas para engañarles.
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En enero, las autoridades realizaron casi 78,000 arrestos y detenciones en la frontera con México, el número más alto registrado en dicho mes durante la última década. Las estadísticas muestran que los arrestos se han incrementado en 6% desde que Biden se convirtió en presidente, pese a que enero suele ser una temporada con bajo número de aprehensiones.
En Washington, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, advirtió que la “vasta mayoría” de los inmigrantes continúan siendo rechazados en la frontera, y les indicó que “no es el momento de venir” a Estados Unidos dado que la implementación de una política migratoria más humana llevará tiempo.
Dichas advertencias han servido de poco para detener el éxodo: en 10 días, la Patrulla Fronteriza promedia 3,000 aprehensiones diarias, así como más de un millar de casos adicionales en que los agentes no lograron detener a la persona que cruzó la frontera.
Desbordado el sur de Texas
A partir de que México prohibió detener a niños y familias en centros de detención migratoria, los agentes fronterizos en el sur de Texas ya no pueden regresar a familias ni menores de 12 años al país vecino. Dado que los centros de detención ya están llenos, eso ha obligado a liberar a las personas en Estados Unidos mientras se resuelven sus procesos de solicitud de asilo.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) prepara tiendas al aire libre en Donna y Laredo, ciudades al sur de Texas, para albergar a niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados que, anticipan, llegarán a la frontera en próximas semanas, de acuerdo con la web informativa Border Report.
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El uso de tiendas no se había visto desde 2019, cuando la Administración de Donald Trump gastó 40 millones de dólares para albergar al alto número de menores de edad que cruzaban por la frontera.
“Desde abril, la CBP ha visto un aumento constante de inmigrantes menores de edad no acompañados debido al empeoramiento de las condiciones económicas provocadas por la pandemia de COVID-19. Así, está construyendo instalaciones temporales en Donna”, dice el comunicado de la CBP enviado a Border Report.
Las características tiendas de color blanco, que estarán preparadas en 30 días, son una medida temporal mientras acaba la renovación de una instalación permanente, según el diario The Washington Examiner. Los lineamientos de CBP indican que ninguna persona podrá permanecer más de 72 horas en esas tiendas, pues deberán ser trasladadas a un centro de detención, liberadas en Estados Unidos o regresadas a México.
Los traficantes aprovechan la confusión
Traficantes de personas están engañando a personas migrantes en ciudades del norte de México, diciéndoles que serán admitidos en Estados Unidos a través de cualquier puerto de entrada, alertaron abogados de migración a la cadena CNN.
Los rumores, compartidos de boca en boca o a través de la aplicación WhatsApp, también aseguran que las personas solicitantes de asilo bajo el protocolo Quédate en México, quienes esperan en dicho país a que se resuelvan sus peticiones de la condición de refugiados, serán bienvenidos a Estados Unidos en una fecha determinada. Hoy se ha conocido que Biden prepara una iniciativa en este sentido, pero con baremos estrictos.
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"La desinformación de los contrabandistas es un problema", dijo John Sandweg, un ex alto funcionario de Seguridad Nacional bajo la Administración de Barack Obama. "Cuanto más tiempo estén sentadas esas personas en este purgatorio, más probable es que los coyotes las atraigan", añadió.
Esta desinformación ha tomado fuerza en la frontera, donde las personas esperan la oportunidad de solicitar asilo en Estados Unidos y lograr la entrada al país. En tanto se aclara la política migratoria de la nueva administración, los traficantes aprovecharán el vacío en la información, añadieron los abogados.
“No se dejen engañar”, advierte México
En su conferencia de prensa diaria, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, advirtió que las deportaciones continúan en Estados Unidos debido a la dificultad de modificar la política migratoria de un día para otro.
Sobre las personas inmigrantes originarias de Centroamérica, aseguró que piensan que Estados Unidos ahora tiene una política de puertas abiertas para regularizar a todos los inmigrantes. Sin embargo, dijo, Biden le afirmó que llevará tiempo definir la política migratoria: “Entonces no es que ya todos pueden ir a Estados Unidos y van a ser regularizados”.
López Obrador urgió a las personas inmigrantes a no creer a los traficantes que les dicen que podrán obtener un estatus migratorio legal tan pronto lleguen a Estados Unidos.
Con información de Border Report, Washington Examiner, CNN.