Por Julia Ainsley - NBC News
WASHINGTON — A pesar de comentarios recientes del presidente, Joe Biden, y del secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, en los que condenan la detención de familias migrantes y de que la Administración se ha comprometido en documentos judiciales a detener la práctica, después de todo, un funcionario del Servicio de Inmigración y Aduanas ha dicho que la agencia seguirá reteniendo a las familias.
"ICE sí mantiene y continúa con un sistema de detención familiar", afirmó el funcionario, quien habló bajo la condición del anonimato. "No vamos a poner fin a la detención familiar. No vamos a cerrar los centros de detención familiar", añadió.
El funcionario confirmó que todavía hay más de 100 familias en el Centro Residencial Familiar del Condado de Karnes, cerca de San Antonio, Texas, y más de 350 en el Centro Residencial Familiar del Sur, en Dilley.
Los abogados de la Administración Biden dijeron en documentos judiciales presentados el viernes por la noche que las instalaciones donde albergan a las familias migrantes estaban "en proceso de transición a un centro familiar de menos de 72 horas [de retención]".
Pero el funcionario de ICE afirmó que la agencia no impondrá ese límite de 72 a la detención de familias y que, en cambio, las continuará reteniendo hasta el límite legal de 20 días que ordenó la corte.
En una entrevista exclusiva el jueves con nuestra cadena hermana NBC News, se le preguntó a Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional, si estaba de acuerdo con un tuit que hizo Biden durante su campaña, en el que decía: "Los niños deben ser liberados de la detención de ICE junto a sus padres de inmediato" y si podría comprometerse a poner fin a la detención familiar.
Mayorkas no abordó las preguntas directamente, sino que ofreció una respuesta de una frase: "Un centro de detención no es el lugar al que pertenece una familia".
En lugar de poner fin a la detención familiar, dijo el alto funcionario de ICE, la agencia liberará a algunas familias más rápidamente y ampliará la cantidad de camas para la detención familiar, para que las familias pasen por su custodia más rápidamente, incluso para ser deportados.
"Es parte de una estrategia más amplia donde la expulsión es lo que pretendemos hacer con la mayor parte del flujo", dijo el funcionario.
"Todo es para cumplir este objetivo de dejar muy claro que la frontera no está abierta, no estamos invitando a la gente a venir, no deberían venir en este momento. Vamos a expulsar a la gente como podamos siempre que sea legal", agregó el funcionario.
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"La Administración Biden prometió detener la detención de familias por parte de compañías carcelarias privadas", dijo Shalyn Fluharty, directora del grupo legal Proyecto Dilley, que brinda servicios legales gratuitos a familias inmigrantes detenidas. "Esta no es la respuesta justa y humana que merecen estas familias vulnerables".
Defensores de los derechos de los migrantes aplaudieron la decisión del viernes, asegurando que el cierre de un centro de detención familiar en el condado de Berks, Pennsylvania, había sido el fruto de su arduo trabajo en defensa de los derechos de los migrantes.
El funcionario dijo que Berks probablemente se convertirá en un albergue para las mujeres adultas que viajan sin niños.