El atasco de casos retrasados que esperan una decisión en las cortes de inmigración sobrepasó los dos millones en 2022, con tiempos de espera de cuatro años de promedio, y el número de casos de asilo pendientes supera ya los 800,000, según informó el centro de investigación Transactional Records Access Clearinghouse (TRAC), de la Universidad neoyorquina de Syracuse.
A 31 de diciembre de 2022, la cifra de casos pendientes en las cortes migratorias llegó a 2,056,328, lo que marca un retraso histórico. El mayor atasco lo registran las cortes de Florida, con 326,895 en total y, de ellos, 198,717 en Miami. Le sigue Texas con 304,634 casos, de los cuales 105,193 corresponden a Dallas. California ocupa el tercer puesto con 230,493 casos: de ellos, más del 40% en San Francisco (100,072), y otro 20% en Los Ángeles (43,866).
Cuando Joe Biden llegó a la Casa Blanca hace dos años, el número de casos acumulados era de 1.2 millones, casi la mitad que ahora.
El informe de TRAC, publicado el pasado miércoles, revela una caída significativa en el número de venezolanos que solicitan asilo, en particular después de que el Departamento de Seguridad Nacional incluyera en octubre a estos inmigrantes en un programa humanitario que otorga estatus legal por dos años a quienes lleguen por avión con patrocinador y expulsa de forma exprés a México a los que lo intenten por la frontera debido a la vigencia del Título 42.
El Gobierno anunció a principios de enero la ampliación de este programa a inmigrantes de Cuba, Haití y Nicaragua.
El número de migrantes procesados por las autoridades federales en la frontera con México alcanzó una cifra récord en diciembre, según datos revelados el viernes por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés), debido fundamentalmente a los llegado de Cuba y Nicaragua. Los agentes procesaron a 251,487 migrantes, un aumento del 7% respecto a noviembre; de ellos, el 14% ya lo habían intentado antes en los últimos 12 meses, según la CBP.
Desde la llegada de Joe Biden a la Casa Blanca en enero de 2021 han llegado al país más de un millón de migrantes, que ahora esperan la resolución de sus casos en las cortes migratorias, según datos conocidos el pasado mes de septiembre.
Según las cifras suministradas por TRAC entonces, cuando había 1.8 millones de expedientes pendientes de resolución, alrededor de un cuarto de los casos retrasados ni siquiera había recibido aún su primera cita. Debido a que muchos expedientes no se resuelven en esa primera cita, más de 100,000 solicitantes de asilo llevan esperando más de seis años a saber si podrán quedarse en el país.
Hay dos tipos de solicitudes de asilo: las de inmigrantes que son interceptados en la frontera (conocidas como afirmativas) y las de quienes ya estaban dentro del país y las presentaron al enfrentarse con la posibilidad de ser deportados (conocidas como reactivas).
En general, el tiempo de espera para una audiencia es menor en los casos afirmativos, con una media de cuatro años, frente a los cuatro años y medio de promedio en los casos reactivos. Pero las listas de espera se han multiplicado en la última década para unos y otros: por dos en los afirmativo, y por 14 en los reactivos.
El Gobierno implementó cambios en el sistema de asilo a fines de mayo para acortar los tiempos de espera entre que un inmigrante cruza la frontera y un juez decide si debe ser deportado o puede permanecer en el país.
El cambio permitirá que los oficiales de asilo, y no sólo los jueces de inmigración, procesen solicitudes, y dará prioridad además a la revisión de los expedientes de aquellos que acaban de llegar. Pero, mientras siga vigente el Título 42 su impacto puede ser limitado.