IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Canadá y Estados Unidos sufren escasez de mano de obra, pero uno de ellos apuesta por aumentar la inmigración legal

El Gobierno canadiense planea aceptar a 1.45 millones de migrantes, muchos de ellos trabajadores poco cualificados. En EE.UU., los republicanos bloquearon en la Cámara de Representantes una medida similar por la situación en la frontera con México.

Por Julia Ainsley, Joel Seidman y Didi Martinez - NBC News

En tan sólo una década, habrá un jubilado por cada dos trabajadores en Canadá. Para hacer frente a la inminente escasez de mano de obra, el Gobierno canadiense anunció en noviembre un nuevo objetivo: aceptar 1.45 millones de migrantes de aquí a 2025, el 60% de los cuales deberá haber recibido formación en atención sanitaria y otras cualificaciones laborales que se necesitan con urgencia. 

Mientras tanto, una ley migratoria similar en Estados Unidos ha quedado estancada porque los republicanos han bloqueado los esfuerzos demócratas para estimular la afluencia de trabajadores cualificados hasta que se tomen más medidas para garantizar la seguridad en la frontera con México. 

[Las claves del permiso temporal que EE.UU. otorgará a migrantes elegibles de Cuba, Nicaragua y Haití]

Aunque Estados Unidos tiene casi 10 veces más habitantes que Canadá, en el año fiscal 2022 recibió el mismo número —unos 275,000— de migrantes autorizados por motivos laborales que su vecino del norte tiene previsto recibir cada año, durante los próximos tres años, según datos del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) y de los redactores de la nueva política canadiense. 

En la última sesión del Congreso estadounidense, que concluyó en diciembre, los proyectos para aumentar el número de empresarios, trabajadores altamente cualificados, fabricantes de microchips y trabajadores agrícolas nacidos en el extranjero no obtuvieron los votos suficientes para convertirse en ley. La Ley de Modernización de la Mano de Obra Agrícola, la única que logró salir de la Cámara de Representantes, contó con la oposición de 30 republicanos y un demócrata. Todavía no se ha sometido a votación en el Senado. 

Rodolfo Lastimosa Jr. es un inmigrante filipino con una maestría en enfermería en su país. Llegó a Canadá en 2011 bajo el programa de inmigración calificada. También se graduó como bachiller en enfermería de la universidad de York, en Toronto.
Rodolfo Lastimosa Jr. es un inmigrante filipino con una maestría en enfermería en su país. Llegó a Canadá en 2011 bajo el programa de inmigración calificada. También se graduó como bachiller en enfermería de la universidad de York, en Toronto.Steve Russell / Getty Images

Al mismo tiempo, los dos principales partidos políticos de Canadá, los liberales del primer ministro Justin Trudeau y los conservadores de la oposición, se describen a sí mismos como favorables a la inmigración. El nuevo objetivo de Trudeau en materia migratoria, centrado no solo en abrir más vías a los refugiados y a los trabajadores poco cualificados, sino también en atraer a trabajadores altamente cualificados en sectores como la sanidad y la tecnología, goza de un amplio apoyo.

La congresista demócrata por California, Zoe Lofgren, entonces presidenta del Subcomité Judicial de Inmigración y Ciudadanía de la Cámara de Representantes, presentó dos proyectos de ley para incrementar el número de visados basados en el empleo, pero ninguno fue aprobado por la Cámara. 

[Estados Unidos endurece medidas contra inmigrantes que crucen de forma ilegal al país]

Mientras presionaba por el cambio, Lofgren hizo una comparación directa entre las políticas de Estados Unidos y las de Canadá. Durante una audiencia que tituló “¡Oh Canadá! Cómo las anticuadas políticas de inmigración estadounidenses empujan a los mejores talentos a otros países”, afirmó: “La última gran revisión de nuestro sistema de inmigración legal se produjo en 1990. Mientras tanto, otros países, como Canadá, han hecho grandes progresos en la creación de flexibilidad e incentivos a la contratación en sus sistemas para atraer a inmigrantes altamente cualificados, incluidos aquellos a los que nosotros no podemos dar cabida.”


Su homólogo republicano en el comité, el entonces miembro titular Thomas McClintock (California), se hizo eco de lo que muchos opositores republicanos han dicho en respuesta a tales propuestas: que hasta que el Gobierno de Joe Biden no haga más para abordar la migración ilegal en la frontera sur, no se debe considerar ninguna legislación para reformar incluso las vías de migración legal.

“El tema constante que oímos de la izquierda es que, a pesar de estas asombrosas cifras (fronterizas) y a pesar del impacto en las familias estadounidenses al inundarse el mercado laboral de trabajadores inmigrantes indocumentados con salarios bajos, tenemos que fomentar aún más la migración masiva”, señaló McClintock. 

[Biden anuncia permisos para cubanos, haitianos y nicaragüenses. Pero deben pedir asilo desde su país]

El ministro de Inmigración canadiense, Sean Fraser, afirmó que la necesidad de más mano de obra es tan evidente que la cuestión no es tan divisiva, y que los argumentos nativistas, como que los empleos canadienses pertenecen a los canadienses, no tienen mucha fuerza.

“Creemos que Canadá necesita más gente. Los necesitamos por razones económicas. Las necesitamos por razones demográficas. Y va a contribuir a que nuestras comunidades sean lugares más vibrantes y dinámicos para vivir”, subrayó Fraser.

En la imagen, varios inmigrantes guatemaltecos trabajan en un campo de Saint Paul, Oregon. Algunos grupos pro inmigración advierten que sin más trabajadores agrícolas, el precio de los alimentos seguirá aumentando en Estados Unidos.
En la imagen, varios inmigrantes guatemaltecos trabajan en un campo de Saint Paul, Oregon. Algunos grupos pro inmigración advierten que sin más trabajadores agrícolas, el precio de los alimentos seguirá aumentando en Estados Unidos.Nathan Howard / AP

Sin embargo, muchos puestos de trabajo siguen sin cubrirse. Brenda Perkins-Meingast, directora de estrategia de enfermería de la University Health Network de Toronto, afirma que su red de hospitales tiene entre 400 y 500 enfermeras menos de las que necesita. 

“Estamos inmersos en una crisis sanitaria y una importante escasez de personal de enfermería, así que teníamos que ser creativos e innovadores”, explicó. La University Health Network ha puesto en marcha este año un programa para contratar a más enfermeras con formación internacional y ayudarlas a obtener la formación adicional que necesitan en Canadá.

Rebecca Shi, directora del grupo de defensa de la inmigración American Immigration Business Coalition, afirma que es probable que los sectores de alta y baja cualificación del mercado laboral estadounidense se resentirán en los próximos años si no aumenta el número de trabajadores extranjeros que pueden contratar las empresas. Según ella, sin más trabajadores agrícolas, el precio de los alimentos seguirá subiendo y afectando a las familias estadounidenses. 

[USCIS contempla subir el costo de trámites de solicitud de residencia un 35%]

“En algún momento habrá consecuencias si siguen jugando a la política”, advirtió Shi. “La realidad es que pronto podríamos convertirnos en importadores de leche y eso provocaría un aumento de los precios y podría causar inseguridad alimentaria”.

El USCIS dijo en un comunicado que “está comprometido a administrar de manera justa y eficiente el sistema de inmigración legal, aumentar el acceso a los beneficios de inmigración elegibles, restaurar la fe y la confianza con las comunidades de inmigrantes y derribar las barreras en el sistema de inmigración, y la agencia continuará defendiendo la promesa de Estados Unidos como una nación de bienvenida y posibilidad con equidad, integridad y respeto para todos los que servimos.”