IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

GM llama a reparación modelos Cadillac, Pontiac

General Motors anunció el retiro de más de 60.000 vehículos en Norteamérica, en el más reciente llamado al taller que hace este año el gigante automovilístico

DETROIT (AP) — General Motors anunció el retiro de más de 60.000 vehículos en Norteamérica, en el más reciente llamado al taller que hace este año el gigante automovilístico.

La compañía detalló tres nuevos retiros el sábado, el mayor de ellos de 46.873 vehículos en Estados Unidos.

Los coches afectados son Pontiac G8 de los años 2008 y el 2009, y el Chevrolet Caprice de los modelos del 2011 al 2013 producidos en Australia.

La llave de encendido puede salirse de la posición de marcha si el conductor la toca con la rodilla, dijo GM.

La compañía dijo conoce de un choque a causa del problema, pero no heridos.

Otro retiro en Estados Unidos cubre más de 10.005 Cadillac CTS-V de los modelos del 2004 al 2007 y Cadillac STS-V de los años 2006 y 2007.

En algunos de los vehículos, la terminal eléctrica del módulo de la bomba de combustible pudiera sobrecalentarse, causando que el material de la brida se derrita, dijo GM.

Eso puede provocar un derrame de combustible, incrementando el riesgo de calado del motor e incendio, de acuerdo con la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras de Estados Unidos.

GM dijo que no conoce de ningún choque ni heridas por el problema.

La compañía además retiró 304 de los Chevrolet Sonic del 2014 en Estados Unidos, diciendo que algunos pudieran tener una conexión eléctrica floja en la columna del volante que pudiera afectar la bolsa de aire del conductor.

GM no sabe de accidentes ni lesiones relacionadas con el defecto.

En total, los nuevos retiros incluyeron 57.182 vehículos en Estados Unidos y 60.575 en Norteamérica.

Los reportes de problemas de seguridad en vehículos de GM comenzaron a inicios del año, con el llamado al taller de 2,6 millones de vehículos por defectos en la ignición.

Ese problema causó choques que provocaron al menos 23 muertes. GM ha admitido que sabía del problema por más de una década, pero no retiró los vehículos hasta febrero de este año.