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Una bolsita de cocaína termina dentro del ‘hot dog’ de una clienta en Nuevo México y el cocinero es arrestado

El pedido de Celine Gonzales en un establecimiento Sonic agitó al resto de los comensales: "Si esto le hubiera pasado a un niño, pudiera haber sido algo malo o letal", dijo una clienta.

Es común que los empleados de cualquier establecimiento de venta de perros calientes les pregunten a los clientes si quieren su hot dog "cargado o completo", en otras palabras, con los acompañantes más habituales: mostaza, salsa de tomaté, mayonesa, y dependiendo su gusto, hasta chile.

Pero en el caso de Celine Gonzales, una mujer hispana que compró un perro caliente el pasado martes en un restaurante Sonic, en Española, Nuevo México, parece que la deliciosa comida rápida vino "cargada" con una sorpresa indeseada.

Según documentos de corte, Gonzales reportó a las autoridades que tras darle una mordida al hot dog encontró una bolsa con un polvo blanco en su interior.

Jeffrey David Salazar, de 54 años, empleado de un establecimiento Sonic, en Española, Nuevo México,
Jeffrey David Salazar, de 54 años, empleado de un establecimiento Sonic, en Española, Nuevo México,Departamento de Policía de Española

Especialistas de la policía indicaron que, tras examinar el contenido de la bolsa, llegaron a la conclusión que se trataba de un gramo de cocaína.

Las autoridades dijeron que Gonzales escupió la bolsa, pero no precisaron si la mujer había tragado parte de su contenido.

Tras el incidente, Jeffrey David Salazar, de 54 años, un empleado del establecimiento, fue arrestado. Según las autoridades, Salazar dejó caer sin percatarse la bolsa con cocaína dentro de la orden de Gonzales.

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De acuerdo con un documento presentado en corte, videos de seguridad del local revelaron imágenes de Salazar "buscando con prisa algo que había perdido", tras entregar el pedido de Gonzales.

Salazar, quien confesó a la policía que la bolsa con la droga era suya y que la había comprado a alguien en el parqueo del restaurante de comida rápida, fue acusado de posesión de cocaína, un delito grave en Nuevo México.

Un medio local que visitó el establecimiento Sonic entrevistó a varios comensales el pasado jueves.

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Una mujer comentó que "el hecho asustaba. Compramos comida aquí para nuestras familias. Si esto le hubiera pasado a un niño pudiera haber sido algo malo o letal".

Un hombre también presente reaccionó al hallazgo con un tono jocoso: "Esto es de locos", dijo. "Me acabo de comprar un helado. Espero que esté bien".

Con información de KOB4 y FOX News