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Un restaurante de Nueva Jersey prohibirá la entrada de niños menores de 10 años y no todo el mundo se opone a la decisión

“Nos encantan los niños. De verdad", pero "entre los niveles de ruido, la falta de espacio para las tronas, la limpieza de desastres locos y la responsabilidad de los niños corriendo por el restaurante, hemos decidido que es hora de tomar el control de la situación”, anunció.

Por Liz Calvario - TODAY vía NBC News

Un restaurante de Nueva Jersey planea próximamente prohibir la entrada a niños menores de 10 años, una iniciativa que está recibiendo tanto apoyo como críticas en las redes sociales.

El establecimiento Nettie’s House of Spaghetti, situado en la localidad de Tinton Falls, anunció el 9 de febrero en sus redes sociales que “ya no permitirá que los niños menores de 10 años cenen en el restaurante” a partir del próximo mes.

Sus responsables explicaron que tomaron la decisión porque “ha sido extremadamente difícil acomodar a los niños” en el local.

“Nos encantan los niños. De verdad, de verdad”, comenzaba el mensaje de Nettie publicado en las redes sociales. "Entre los niveles de ruido, la falta de espacio para las tronas, la limpieza de desastres locos y la responsabilidad de los niños corriendo por el restaurante, hemos decidido que es hora de tomar el control de la situación", señalaba el post.

Nettie’s señaló que la decisión fue tomada a la ligera, “pero algunos acontecimientos recientes nos han empujado a aplicar esta nueva política”.

La medida entrará en vigor el 8 de marzo.

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“Sabemos que esto va a disgustar mucho a algunos de vosotros, especialmente a los que tenéis niños muy bien educados, pero creemos que es la decisión correcta para nuestro negocio de cara al futuro”, concluía el comunicado. “Gracias por vuestra comprensión”.

La sección de comentarios de las publicaciones de Nettie en Instagram y Facebook se llenó de reacciones encontradas de clientes y seguidores.

“Me encanta esta decisión. Nada me frustra más como madre soltera trabajadora que cuando tengo la rara oportunidad de salir (con adultos y no con niños y no a un Applebees o a un restaurante apto para niños) y hay niños no solo portándose mal sino padres completamente ajenos a ello y que ni siquiera intentan disciplinar a sus hijos”, comentó el usuario de Instagram ssevinsky. “¡Aplaudo esta decisión y estoy deseando ir a cenar allí!”.

Por su parte, Linen_guy escribió: “No puedo evitar sentir que esto va a salir mal. (No, no tengo hijos menores de 10 años). ¿Los mejores restaurantes de Nueva York pueden acoger a niños pero Netties no? Parece que el problema son sus clientes, no los niños”.

La usuaria thismomslife sacó a relucir la cuestión de cómo algunos padres tendrían que pagar ahora una niñera para ir al establecimiento.

“¿Te das cuenta de que todos los padres que cenaron contigo ahora tienen que gastar dinero adicional para una niñera?”, escribió. “Eres dueño de un restaurante, deberías esperar que los niños cenen allí. ¿Comprobará los certificados de nacimiento en la puerta? Mi hijo de 8 años tiene el tamaño de uno de 11”, planteó.

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En Facebook, Laura Jones comentó: “Es muy triste oír esto... Tenía muchas ganas de probar vuestro local pero con un niño de 9 años que se porta bien no soy bienvenida... triste”.

Por su parte, Jill Sorrentino-Wilson lo calificó de “idea fantástica” y escribió que, como alguien que trabajaba en el sector de la restauración, podía empatizar. “Los niños están fuera de control y la mayoría de los padres son inconscientes”, dijo.

Nettie’s respondió a Sorrentino-Wilson agradeciéndole el apoyo. “Se ha convertido en una responsabilidad para nosotros: los niños corriendo en círculos por el restaurante cuando intentamos llevar bandejas de comida y bebida ha hecho que hacer nuestro trabajo sea extremadamente difícil", argumentó el restaurante.

Esta no es una política totalmente inaudita. En 2021, el restaurante Red Rooster Burgers & Brew de Garden Valley, California, prohibió a los clientes menores de 18 años cenar sin un adulto alegando el mal comportamiento de adolescentes que habían causado daños.

En 2018, Old Fisherman’s Grotto, en Monterey, también en California, llamó igualmente la atención por su política de no permitir “niños llorando” o niños haciendo “ruidos fuertes”. Desde 2009 tampoco admite las sillitas de paseo para garantizar "la seguridad de nuestro personal y huéspedes".