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Pete Arredondo, el jefe de la policía escolar de Uvalde, renuncia al Concejo Municipal de la ciudad

El alcalde y secretario de la ciudad recibieron por email la carta de renuncia de Arredondo, quien ha enfrentado fuertes críticas por su respuesta al tiroteo en la primario Robb donde murieron 19 estudiantes y dos maestras.
/ Source: The Associated Press

El jefe de policía del distrito escolar de Uvalde, Pete Arredondo, renunció a su cargo en el Concejo Municipal de la ciudad este viernes, apenas unas semanas después de jurar su cargo tras las acusaciones de que se equivocó en su respuesta al tiroteo en la Escuela Primaria Robb que dejó 19 estudiantes y dos maestras muertas.

Arredondo le dijo al periódico Uvalde Leader-News el viernes que ha decidido renunciar por el bien de la Administración de la ciudad. Fue elegido para el puesto de concejal del Distrito 3 el 7 de mayo y juró su cargo, en una ceremonia a puerta cerrada, el 31 de mayo, justo una semana después de la masacre.

Sin embargo, el senador estatal de Texas, Roland Gutierrez aseguró a la cadena NBC News que Arredondo no ha comunicado oficialmente sus planes de dimitir. Lo mismo dijo la ciudad de Uvalde en un comunicado.

El jefe de policía de Uvalde, Pete Arredondo, en una conferencia de prensa luego del tiroteo en la Escuela Primaria Robb el martes.
El jefe de policía de Uvalde, Pete Arredondo, en una conferencia de prensa luego del tiroteo en la Escuela Primaria Robb el martes.Mikala Compton / USA Today Network vía NBC News

"Aunque es lo correcto, nadie de la ciudad ha visto una carta o cualquier otra documentación de sus renuncia, o hablado con él", dice el documento.  "Cuando la ciudad reciba la confirmación de la dimisión del concejal Arredondo, el Concejo abordará la vacante de la plaza de concejal", añade.

“Después de considerarlo mucho, lamento informar a quienes me votaron que he decidido renunciar como miembro del concejo de la ciudad por el Distrito 3. El alcalde, el Concejo Municipal y el personal de la ciudad deben seguir avanzando sin distracciones. Creo que esta es la mejor decisión para Uvalde”, dijo Arredondo.

Arredondo, que está de baja administrativa en el distrito escolar desde el 22 de junio, ha rechazado repetidas peticiones de comentarios de The Associated Press. Su abogado, George Hyde, no respondió inmediatamente a las solicitudes de comentarios enviadas por correo electrónico el sábado.

El coronel Steven McCraw, director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, dijo en una audiencia del Senado estatal el mes pasado que Arredondo tomó “decisiones terribles” mientras se desarrollaba la masacre el 24 de mayo , y que la respuesta policial fue un “fracaso abyecto”.

Tres minutos después de que Salvador Ramos, de 18 años, entrara en la escuela, había suficientes fuerzas de seguridad armadas en el lugar para detener al pistolero, testificó McCraw. Sin embargo, los agentes de policía armados con rifles se quedaron esperando en un pasillo de la escuela durante más de una hora mientras Ramos llevaba a cabo la masacre. La puerta del aula no se podía cerrar desde dentro, pero no hay indicios de que los agentes intentaran abrir la puerta mientras el atacante estaba dentro, dijo McCraw.

El coronel ha dicho que los padres rogaron a la policía que entrara y los estudiantes que estaban dentro del aula suplicaron repetidamente a los operadores del 911 que les ayudaran mientras más de una docena de oficiales esperaban en un pasillo. Agentes de otros organismos instaron a Arredondo a que les dejara entrar porque los niños estaban en peligro.

“Lo único que impidió que un pasillo de agentes dedicados entrara en las habitaciones 111 y 112 fue el comandante en el lugar de los hechos, que decidió anteponer la vida de los agentes a la de los niños”, condenó McCraw.

Desde que la policía entró en el edificio hasta que el pistolero fue abatido pasó una hora, 14 minutos y 8 segundos, según McCraw.

Arredondo ha tratado de defender sus acciones: dijo al periódico Texas Tribune que no se consideraba el comandante a cargo de las operaciones y que asumió que otra persona había tomado el control de la respuesta de las fuerzas del orden. Y añadió que no tenía las radios de la policía y del campus, pero que utilizó su celular para pedir equipo táctico, un francotirador y las llaves del aula.

Todavía no está claro por qué la policía tardó tanto en entrar en el aula, cómo se comunicaron entre sí durante el ataque y qué muestran sus cámaras corporales.

Las autoridades se han negado a dar más detalles, citando la investigación.

Arredondo, de 50 años, creció en Uvalde y pasó gran parte de sus casi 30 años de carrera en las fuerzas del orden en la ciudad.