Por David K. Li - NBC News
Un empleado del aeropuerto internacional John F. Kennedy de Nueva York descubrió este mes un gato vivo dentro de una maleta facturada y pudo sacarlo a salvo del equipaje, dijeron las autoridades.
El hallazgo del animal color naranja se produjo el 16 de noviembre, cuando la maleta fue facturada en ese aeropuerto para un vuelo a Florida con escala en Atlanta.
"El gato no pertenecía al individuo dueño de la maleta, sino a otra persona de su casa", dijo Lisa Farbstein, la portavoz de la Administración para la Seguridad de Transporte. “Al parecer”, el gato vio la maleta abierta y saltó dentro sin que el viajero lo notara, añadió.

El hallazgo evitó que el animal fuera despachado dentro de la maleta a la bodega presurizada de carga del avión, donde probablemente habría muerto.
"La razón de lo que pudo pasar, creo, es que las maletas son como una cama para los gatos. A los gatos les gustan los espacios con barreras a su alrededor", dijo Katherine Houpt, profesora emérita de la Universidad de Cornell y experta en comportamiento animal.
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"Es probable que (la maleta) huela como el dueño, que sientan que lo van a perder. No es necesariamente que quieran evitar que ese dueño se marche, pero quizás al menos quieran expresar que están estresados", explicó.
Aunque Houpt dijo que ninguno de sus gatos "suele meterse en las maletas", aclaró que no corre el riesgo de dejarlas abiertas en el suelo, sino que trata de empacar encima de estantes elevados.