Por Doha Madani y Diana Dasrath - NBC News
El padre de Britney Spears presentó el martes una petición para poner fin a la tutela de su hija, una importante victoria para la cantante después de que su padre llevara las riendas de su patrimonio durante más de 13 años.
La petición de James Jamie Spears al Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles, vista por NBC News, cadena hermana de Noticias Telemuno, alega que su hija "tiene derecho a que este Tribunal considere seriamente si esta tutela ya no es necesaria".
El documento continúa diciendo que las circunstancias de Britney Spears han cambiado "hasta tal punto que los motivos para el establecimiento de una tutela pueden ya no existir".
Su petición también argumenta que el código testamentario no requiere que Britney Spears se someta a una nueva evaluación psicológica para poner fin a la tutela, algo que ella dijo al tribunal que se niega a hacer.
"La tutela ha ayudado a Spears a superar una importante crisis vital, a rehabilitar y avanzar en su carrera, y a poner en orden sus finanzas y sus asuntos. Pero recientemente, las cosas han cambiado", apunta el documento.
"Spears es ahora franca en su frustración con el nivel de control impuesto por una tutela, y ha suplicado a este Tribunal que 'le permita recuperar su vida", concluye.
Britney Spears, de 39 años, ha intentado apartar a su padre en dos ocasiones en los últimos dos años, y el pasado mes de julio llegó a decir que no actuaría más mientras él conservara la tutleta en cualquier término. Durante su testimonio del 23 de junio, declaró a la jueza del Tribunal Superior Brenda Penny que su padre había arruinado su vida y que le "encantaba" oírla sufrir mientras ejercía su poder sobre ella.
Alegó que su tutela era "abusiva" y que le dijeron que no podría ver a sus hijos si no cumplía con las exigencias de su padre.
Su nuevo abogado, Mathew Rosengart, presentó el mes pasado una petición para destituir a Jamie Spears y pidió al tribunal que lo sustituyera por un contable profesional. Rosengart argumentó que Jamie Spears no estaba actuando en el mejor interés de su hija e indicó que podría haber hecho un mal uso de sus finanzas.
La petición de poner fin a la tutela fue una gran victoria legal y una "reivindicación", explicó Rosengart en un comunicado el martes.
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"Parece que el señor Spears cree que puede intentar evitar la responsabilidad y la justicia, incluyendo sentarse para una declaración jurada y responder a otras revelaciones bajo juramento, pero mientras evaluamos su presentación -que fue enviada inapropiadamente a los medios de comunicación antes de ser notificada al abogado- nuestra investigación continuará", señaló Rosengart.
Se espera que Penny se pronuncie sobre la petición en una audiencia el 29 de septiembre.
La petición de Jamie Spears es una gran victoria para los fans del movimiento #FreeBritney (Liberad a Britney) que han pasado años protestando por la tutela. Muchos de los integrantes de esa comunidad son fans de la artista que expresaron su temor de que su padre la estuviera explotando en su propio beneficio.
Jamie Spears ha negado repetidamente todas las acusaciones de abuso, tanto en las presentaciones legales como en los comentarios públicos.
En una respuesta a la petición de destitución, Jamie Spears indicó que estaría "dispuesto a dimitir cuando llegue el momento, pero la transición debe ser ordenada e incluir una resolución de los asuntos". Pero aún así impugnó su destitución, argumentando que no había una necesidad urgente de su destitución, e instó al tribunal a no tomar una decisión basada en "acusaciones falsas".
En concreto, se refirió a las alegaciones de su exesposa Lynne Spears, que también aportó una declaración en la que afirmaba que no creía que él estuviera actuando en el mejor interés de su hija. Dijo que el "control absolutamente microscópico" de Jamie Spears a través de amenazas y coacciones había reducido su relación con su hija a nada más que "miedo y odio".
Lynne Spears afirmó que se involucró en el caso durante un "tiempo de crisis" que comenzó en 2018 y continuó hasta el año siguiente. En ese período, Britney Spears estaba siendo tratada por un médico de "mejora deportiva", contratado por Jamie Spears, que estaba "recetando lo que yo y muchos otros pensamos que es un medicamento totalmente inapropiado para mi hija, que no quería tomar ese fármaco".
Jamie Spears refutó la acusación, diciendo que Lynne Spears "no ha aceptado todo el alcance" del nivel de atención y tratamiento que su hija necesitaba para su salud mental. El documento argumenta que el médico era un psiquiatra formado en Harvard que Britney Spears aprobó tras una entrevista.
También negó haber coaccionado a su hija para "hacer cualquier cosa", incluyendo someterse a un tratamiento forzado en un centro hospitalario.
"Si el público conociera todos los hechos de la vida personal de Spears, no solo sus altos sino también sus bajos, todos los problemas de adicción y salud mental con los que ha luchado, y todos los desafíos de la tutela, alabarían al señor Spears por el trabajo que ha hecho, no lo vilipendiarían", señala el documento.
"Pero la opinión pública no conoce todos los hechos, y no tiene derecho a conocerlos, por lo que no habrá redención pública para el señor Spears", añade.
Rosengart exigió a Jamie Spears que dimitiera inmediatamente el mes pasado, acusándole en documentos judiciales de intentar extorsionar al patrimonio de su hija antes de dimitir.
"El señor Spears y su abogado están ahora sobre aviso: el statu quo ya no es tolerable, y Britney Spears no será extorsionada", escribió Rosengart. "El descarado intento del señor Spears de negociar la suspensión y la destitución a cambio de aproximadamente dos millones de dólares en pagos, además de los millones ya cosechados de la herencia de la señora Spears por el señor Spears y sus asociados, no es un comienzo".