IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Conozca el nuevo bombardero nuclear 'invisible' con el que EE.UU. planta cara a China: "Lo oirán pero realmente no lo verán"

El B-21 ‘Raider’ es el primer bombardero desarrollado por el Pentágono en más de 30 años y moderniza el tridente nuclear contra los rusos y chinos.
/ Source: The Associated Press

El Pentágono presentó este viernes un nuevo bombardero nuclear casi invisible para el enemigo tras años de desarrollo en secreto y como parte de su respuesta ante el poder militar de China y Rusia.

El B-21 Raider es el primer bombardero desarrollado por Estados Unidos en más de 30 años. Casi todos los aspectos del programa son confidenciales, pero el avión fue presentado el viernes cuando caía tarde en la Planta 42 de la Fuerza Aérea en Palmdale (California) en una ceremonia muy controlada que comenzó con un sobrevuelo de los tres bombarderos en servicio: el B-52 Stratofortress, el B-1 Lancer y el B-2 Spirit. A continuación, las puertas del hangar se abrieron lentamente y el B-21 fue remolcado parcialmente fuera del edificio.

El B-21 durante el acto del 2 de diciembre.
El B-21 durante el acto del 2 de diciembre.Marcio Jose Sanchez / AP

El bombardero forma parte de la estrategia del Pentágono para modernizar su tridente nuclear (que incluye además los misiles balísticos lanzados desde silos y las ojivas en submarinos) en su giro de la lucha antiterrorista que centró las últimas décadas a plantar cara a la rápida modernización militar de China y a la amenaza rusa.

[EE.UU. no tiene planes de castigar a Arabia Saudí por el recorte de producción de petróleo pese a la promesa de Biden]

China aspira a tener 1,500 armas nucleares para 2035, y sus logros en armas hipersónicas, guerra cibernética y capacidades espaciales presentan “el desafío sistémico más importante para la seguridad nacional de Estados Unidos”, informó esta semana el Pentágono.

“Necesitamos un bombardero para el siglo XXI que nos permita afrontar amenazas mucho más complicadas, como las que tememos algún día de China o Rusia”, dijo Deborah Lee James, secretaria de la Fuerza Aérea cuando el contrato del Raider se anunció en 2015.

Aunque el Raider puede parecerse por fuera al B-2, por dentro es muy distinto, según Kathy Warden, directora de la compañía que lo fabrica, Northrop Grumman. "La forma en que opera internamente es extremadamente avanzada en comparación con el B-2, porque la tecnología ha evolucionado mucho en términos de la capacidad informática que ahora podemos incorporar en el software", añadió.

Otros cambios son los materiales utilizados en los revestimientos para que sea más difícil de detectar, indicó el secretario de Defensa, Lloyd Austin. “En este avión se han invertido 50 años de avances en tecnología”, afirmó, “incluso los sistemas de defensa aérea más sofisticados tendrán dificultades para detectar un B-21 en el cielo”.

Otros avances probablemente incluyan nuevas formas de controlar las emisiones electrónicas, para que el bombardero pueda burlar los radares adversarios y disfrazarse de otro objeto, y el uso de nuevas tecnologías de propulsión, dijeron varios analistas de defensa.

“Es increíblemente difícil de ver ”, dijo Warden, “lo oirán pero realmente no lo verán”.

Hay seis bombarderos Raiders ya en producción, y la Fuerza Aérea planea construir 100 que puedan desplegar armas nucleares o bombas convencionales y ser utilizados con o sin tripulación.

El costo de los bombarderos no se conoce. La Fuerza Aérea había cifrado el precio en un promedio de 550 millones de dólares cada uno en 2010 —aproximadamente 753 millones de dólares en la actualidad—, pero no está claro cuánto se está gastando realmente. El total dependerá de cuántos bombarderos compre el Pentágono.