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"Hay que votar por nuestras vidas": la comunidad hispana LGBTQ explica qué le motiva a participar en esta elección

En lo que va de 2022 las legislaturas estatales están analizando unas 300 leyes que los expertos califican como anti-LGBTQ. Se estima que las personas gays no están completamente protegidas de la discriminación en 29 estados del país.

Leslie Rodriguez se sintió nerviosa cuando vio la papeleta en blanco. Pero dice que una amiga ya le había explicado lo que tenía que hacer, así que llenó cuidadosamente todos los espacios y votó de manera anticipada en Orlando, Florida. Fue su primera vez.

"Soy la primera persona que vota en mi familia porque mis papás son inmigrantes y mi hermana tiene DACA, por lo que no puede votar. Me sentí muy orgullosa porque también voté por ellos, y mi voto cuenta por todos los que no pueden hacerlo", explica con emoción.

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Rodriguez acaba de cumplir 18 años y sueña con cursar estudios para ser técnica en electrocardiograma, pero afirma que al ser una persona gay y vivir en Florida, la política suele estar presente en su vida.

"Es importante salir a votar porque a veces siento que nos quieren quitar derechos y nuestra única herramienta es participar. En las elecciones puedes sacar a las personas radicales que no deben estar en los cargos políticos", explica con vehemencia.

En marzo, Ron DeSantis, el gobernador de Florida que tiene grandes posibilidades de competir por la nominación presidencial del Partido Republicano en 2024, firmó el polémico proyecto de ley conocido como "No digas gay" que impide que los maestros hablen sobre la orientación sexual o la identidad de género en las escuelas públicas.

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En octubre, los republicanos presentaron un proyecto de ley que busca restringir el desarrollo o financiamiento de programas en los que se abordan temas de orientación sexual para niños menores de 10 años, una propuesta muy parecida a la ley aprobada por DeSantis.

Además, el 4 de noviembre los funcionarios médicos estatales, a instancias del gobernador republicano, aprobaron una regla según la cual a los niños transgénero en Florida se les prohibirá recibir hormonas o someterse a cirugías para tratar la disforia de género.

Para Mayra Salazar Hidalgo, uno de los hilos que unen a la comunidad LGBTQ y la comunidad latina es la discriminación. Nacida en Costa Rica, Salazar emigró muy joven a Estados Unidos y vivió más de 20 años como una persona indocumentada.

"Lo que está pasando a nivel político nos demuestra que los avances que hemos hecho no están garantizados. Ya vimos lo que la Corte Suprema hizo contra el acceso al aborto, y quieren volver a revisar el matrimonio igualitario. En este país todavía es legal discriminar a las personas gays en ciertos estados y eso puede empeorar con esta ola de leyes anti-LGBTQ. Por eso estamos comprometidos a fortalecer el voto LGBTQ que es un bloque que ya ha demostrado su poder electoral", explica Salazar Hidalgo, quien es una de las directivas de National LGBTQ Task Force, una organización que lucha por la libertad, justicia e igualdad de la comunidad LGBTQ. 

En este país todavía es legal discriminar a las personas gays en ciertos estados y con esta ola de leyes anti-LGBTQ eso puede empeorar"

Mayra Salazar Hidalgo, National LGBTQ Task Force

Las estadísticas coinciden con la opinión de Salazar Hidalgo. En 2019, la Oficina del Censo de EE.UU. estimó que había 543,000 hogares de parejas casadas del mismo sexo y 469,000 hogares con parejas no casadas del mismo sexo que vivían juntas. Ese mismo año, una investigación del Instituto Williams de la Universidad de California, en Los Angeles (UCLA), precisaba que había 9 millones de adultos LGBTQ registrados para votar, y un 22% eran latinos.

Y un estudio publicado este año por Human Rights Campaign y Bowling Green State University concluye que los votantes LGBTQ se convertirán en uno de los bloques de más rápido crecimiento en el país. Según los investigadores, para 2030, aproximadamente 1 de cada 7 votantes será LGBTQ y se espera que, para 2040, esa participación crezca a casi 1 de cada 5.

Antes de las elecciones de medio periodo, el 11% de la población elegible para votar se identifica como LGBTQ.

Al ser una migrante latinoamericana, y una persona abiertamente queer, Salazar Hidalgo dice que sabe cómo se siente el miedo y la ausencia de derechos porque muchas veces entró a lugares donde las personas dejaban de hablar cuando la escuchaban conversando en español y la miraban fijamente. “Todos sabemos cómo se siente esa mirada en este país”, dice con firmeza.

Me muero de ganas por votar. Sin embargo, hay muchos caminos para participar"

MAYRA SALAZAR HIDALGO

"Soy residente y estoy en el proceso de mi ciudadanía, pero me muero de ganas por votar. Sin embargo, hay muchos caminos para participar en nuestra democracia y trabajo para que otros puedan votar y ayudar a garantizar los derechos de las personas LGBTQ que son marginalizadas en este país y que son las más impactadas por los resultados de estas elecciones", asevera Salazar Hidalgo, en una entrevista con Noticias Telemundo.

La normalización del contenido de odio

El Gobierno de la Florida no está solo en la estrategia de promulgar leyes relacionadas con las personas LGBTQ. Según investigaciones del Center for American Progress, en 2021 se introdujeron casi 400 proyectos de ley centrados en la comunidad LGBTQ en todo el país y, en lo que va de 2022, las legislaturas estatales están analizando unas 300 propuestas legislativas que los expertos califican como anti-LGBTQ.

Los expertos calculan que las personas gays no están completamente protegidas de la discriminación en 29 estados del país. Los proyectos de ley van desde la prohibición de que los jóvenes trans participen en eventos deportivos, pasando por las restricciones en atención médica y acceso a los sanitarios hasta problemas con los procesos de identificación legal, entre otros temas.

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Además, funcionarios educativos de diversos estados de todo el país han prohibido libros sobre las experiencias gay y trans, también han removido carteles y banderas de temas LGBTQ y ordenaron la disolución de clubes de alianzas gay-heterosexuales. 

Académicos han advertido sobre la relación entre las propuestas de ley, la proliferación del discurso de odio en las redes y los ataques violentos contra minorías como la comunidad LGBTQ. Un estudio de Human Rights Campaign detectó que, al mes siguiente de la aprobación de la ley "No digas gay", la cantidad promedio de tuits por día que usan insultos como "peluquero" y "pedófilo" en relación con las personas LGBTQ aumentó en un 406 %.

"Existe una relación muy clara entre normalizar este contenido de odio y que los grupos extremistas intenten movilizarse para ejecutar acciones de odio”, dijo Sophie Bjork-James, profesora de Antropología en la Universidad de Vanderbilt University, en una entrevista con The Associated Press. "Podemos ver una relación directa entre el espectro de la retórica anti-LGBT de los parlamentos estatales y estos grupos extremistas", advirtió.

En junio, el Departamento de Seguridad Nacional advirtió que los nacionalistas y supremacistas blancos están utilizando plataformas de redes sociales como Instagram, Telegram y TikTok para presentar un marco sesgado de temas divisivos como el aborto, las armas y los derechos LGBTQ, lo que podría ocasionar que los extremistas ataquen lugares públicos en EE.UU.

Este año, las autoridades arrestaron a 31 miembros de un grupo neonazi en Idaho que planeaban realizar disturbios durante un evento del Orgullo Gay. En Baltimore, se incendiaron dos casas vecinas que estaban decoradas con símbolos de la comunidad gay, hiriendo a tres personas. En un suburbio de Dallas, los partidarios LGBTQ tuvieron que formar un "escudo humano" contra los Proud Boys que intentaban asaltar un evento.

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Victor Madrigal-Borloz, experto independiente sobre la protección contra la violencia y la discriminación por orientación sexual e identidad de género de la ONU, visitó Estados Unidos durante 10 días en agosto y luego emitió un comunicado en el que expresaba su alarma.

"La evidencia muestra que, sin excepción, estas acciones se basan en opiniones prejuiciosas y estigmatizantes de las personas LGBT, en particular de los niños y jóvenes transgénero, y buscan aprovechar sus vidas para el beneficio político", dijo el experto.

“Están en contra de nuestros valores”

En muchos casos se esgrime el argumento de que los temas LGBTQ son muy políticos, por lo que no deben discutirse en las escuelas. Para Jorge Gutiérrez, quien llegó a Estados Unidos a los 10 años y puede trabajar gracias al programa DACA, la discusión sobre los derechos de las personas LGBTQ es una tarea fundamental.

"Somos millones de personas que nos sentimos amenazadas cuando algunos políticos hablan de que hay que acabar el DACA, pero paradójicamente no ofrecen una solución. Vivimos con esa incertidumbre, y es muy preocupante", explica Gutiérrez que forma parte de Familia: Movimiento para la Liberación Trans y Queer, una organización que se enfoca en proteger los derechos de las personas hispanas LGBTQ.

Gutiérrez hace trabajo organizativo en todo el país, por lo que tiene el pulso de las inquietudes y miedos que experimentan las personas gays en diversas partes de Estados Unidos. En su experiencia, los ataques contra la comunidad se han recrudecido con los años y por eso insiste en la importancia de la organización y el trabajo político.

"Ahora vemos los ataques más claros de la derecha, de personas que no nos quieren aquí, ni a los latinos ni a los inmigrantes ni a las personas negras, ni muchos menos a la comunidad LGBTQ. Cada día son más radicales y explícitos, por eso yo digo que es muy importante que nuestra gente salga a votar para que nos escuchen", asevera Gutiérrez, que nació en Nayarit, México, pero vive en Los Ángeles desde que era niño.

Ahora vemos los ataques más claros de la derecha, de personas que no nos quieren aquí, ni a los latinos ni a los inmigrantes ni a las personas negras, ni muchos menos a la comunidad LGBTQ"

Jorge Gutiérrez, activista lgbtq

Durante la campaña para estas elecciones de medio periodo, las mentiras y teorías de conspiración en español han circulado ampliamente en redes sociales. Media Matters, una organización sin fines de lucro que analiza el discurso informativo en Estados Unidos, publicó recientemente un informe que alerta sobre diversas publicaciones en español que circulan en Facebook con información falsa sobre las elecciones. 

La desinformación es vasta y parte desde los señalamientos falsos sobre el supuesto fraude electoral de 2020 pasando por las acusaciones, sin pruebas, de fallas en las máquinas de votación hasta los ataques contra la comunidad LGBTQ.

Según NBC News, cadena hermana de Noticias Telemundo, algunas comunidades latinas están recibiendo mensajes falsos en español —mediante volantes entregados en sus casas y mensajes de radio— con ataques a las personas gay y acusaciones sin fundamento de que la Administración Biden realiza “experimentos de género radicales e irreversibles en niños”.

"En estas elecciones muchos han tratado de dividir a la comunidad hispana y ponerla en contra de las personas LGBTQ. Hemos visto que en algunos estados transmiten anuncios por radio, en español, que son antitrans. La realidad es que están en contra de nuestros valores familiares porque no nos aceptan, no les gusta nuestra manera de amar ni nuestra identidad", explica José Muñoz, Director Adjunto de Comunicaciones en United We Dream, una organización sin fines de lucro que se enfoca en la defensa de los derechos de las personas migrantes.

Una encuesta exclusiva de Ipsos para Axios y Noticias Telemundo, realizada a principios de este año, reveló que la mayoría de los latinos en Estados Unidos apoyan temas como que las personas tengan el derecho a autodeterminar su identidad de género y que en las escuelas no se prohíba la enseñanza relacionada a la orientación sexual.

En el sondeo, el 62% dijo que se siente a gusto conviviendo con personas abiertamente LGBTQ. Esa cifra aumenta a 70% entre latinos de segunda generación (de padres inmigrantes) y a 75% entre los latinos de tercera generación (cuyos padres nacieron en EE.UU.).

Algunos políticos gastan el tiempo atacando a las personas de nuestras comunidades"

José Muñoz United We Dream

"Por desgracia, muchos no conocen a los hispanos y siembran odio. Algunos políticos gastan el tiempo atacando a las personas de nuestras comunidades que son nuestras familias, nuestros amigos, nuestros vecinos y nuestros hermanos. Atacan a la comunidad trans, por ejemplo, en vez de enfocarse en darnos lo que merecemos y lo que necesitamos", asevera Muñoz.

A sus 32 años, Muñoz también es un dreamer que vive en Estados Unidos desde los tres meses de edad, cuando sus padres emigraron de México. Creció en un hogar trabajador en el que sus tres hermanos menores, nacidos en territorio estadounidense, sí pueden votar.

"Sé que algún día yo también podré votar. Soy optimista porque, aunque nos ataquen por todos lados, la comunidad migrante y nuestra comunidad LGBTQ siempre hemos salido adelante. Y vamos a seguir estando aquí", asevera con emoción.

"Volvimos a la época de la Inquisición"

En muchas ocasiones, Andrea Montanez estuvo rodeada de muerte. Durante el oscuro reinado de Pablo Escobar en la Medellín de los años ochenta y noventa, vio cómo sus compañeros caían acribillados por las balas y las bombas del narco.

"No entiendo cómo la gente puede idolatrar a Escobar. Yo lo odio porque por culpa de su guerra vi morir a mucha gente, tuve que recoger los cadáveres de compañeros míos. Fue una cosa muy dura", dice con un rictus de amargura.

A Montanez, una mujer transgénero colombiana-estadounidense, se le ensombrece el semblante cuando habla de su otra vida, cuando fue agente encubierto de la policía y se infiltró en las filas de los cárteles de Medellín y de Cali.

"En esa época yo todavía estaba intentando definirme, pero era difícil porque el acoso contra las personas trans era muy duro en Colombia. Recuerdo que conocí a una muchacha trans que trabajaba como prostituta y ella fue la primera persona con la que pude hablar de mi verdadera identidad. Fue muy triste porque el cártel la mato cuando se enteraron de que era nuestra informante", rememora.

Años después, Montanez decidió asilarse en Estados Unidos, harta de la corrupción y las constantes amenazas de muerte. El cambio de país le permitió asumir su identidad como mujer trans y ahora trabaja en Hope Community Center, una organización de Florida Central que se enfoca en el empoderamiento de las comunidades de inmigrantes. Aunque no es una mujer fácil de impresionar, admite que los recientes cambios políticos de EE.UU. la inquietan.

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"Uno siente que volvimos a la época de la Inquisición, es como si quisieran ponernos en las hogueras y quemarnos", dice con frustración.

Uno siente que volvimos a la época de la Inquisición, es como si quisieran ponernos en las hogueras y quemarnos"

Andrea Montanez, activista lgbtq

Tanto activistas como académicos y miembros de las comunidad LGBTQ coinciden en que las personas trans han sido objeto de múltiples medidas que atentan contra sus derechos en los últimos años.

Según un informe reciente del Instituto Williams de la UCLA, se calcula que hay 878,300 adultos trans con derecho a voto en EE.UU., y unos 414,000 de ellos viven en 31 estados que celebran sus elecciones principalmente en persona en las urnas y también tienen leyes que exigen o solicitan que los votantes muestren algún tipo de identificación.

Casi la mitad de los votantes trans elegibles en esos 31 estados, unos 203,700, no tienen documentos de identidad que reflejen sus identidades de género y los nombres que utilizan, y 64,800 de ellos viven en los estados con las leyes de identificación de votantes más estrictas, donde se exige una identificación con fotografía con pocas o ninguna alternativa disponible, según el instituto.

Luego de cada elección surgen denuncias de maltrato y acoso contra las personas trans que acuden a votar de manera presencial. En 2016, Henry Seaton, un hombre transgénero que en ese entonces tenía 18 años, se presentó en su centro de votación local en un suburbio de Nashville, Tennessee, para votar por primera vez.

Y cuando mostró su identificación estatal, los funcionarios lo obligaron a identificarse como una persona trans en público, a pesar de que ya había cambiado legalmente su nombre pero el marcador de género en su identificación todavía decía "femenino".

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Eso "puede ser brutalmente peligroso, especialmente donde yo vivía, que es un suburbio conservador", explicó en una entrevista con NBC News.

Datos de The Trevor Project, una organización sin fines de lucro que se enfoca en la prevención del suicidio entre los jóvenes de la comunidad LGBTQ, muestran que el 66 % de los jóvenes, incluido el 85 % de los jóvenes transgénero y/o no binarios, reportan que los debates recientes sobre las leyes estatales para restringir los derechos de las personas transgénero han afectado negativamente su salud mental.

En 2020, una mujer transgénero de 28 años demandó a los funcionarios electorales del condado de Mecklenburg en Carolina del Norte porque, aunque el estado no requiere identificación para votar, le pidieron que presentara sus documentos. Cuando preguntó por qué debía hacerlo, el juez de distrito le dijo: "Porque su rostro no coincide con su nombre". La mujer estuvo discutiendo más de una hora, hasta que la dejaron votar.

Montanez cree que la educación puede ser una herramienta vital para ayudar a que la población LGBTQ participe de manera más activa en los procesos electorales. Su organización, y otros grupos, trabajaron en un entrenamiento con los funcionarios electorales del Condado de Orange en Florida que ha dado buenos resultados.

Deben respetar nuestra identidad, más allá de la foto o el nombre que aparece en el documento"

andrea montanez

"A pesar de las leyes se pueden proponer algunas soluciones. Nosotros logramos enseñarles a los oficiales que uno puede llegar a la casilla de votación con una identificación que tiene el nombre que ya no uso, porque no lo he podido cambiar, pero ellos deben respetar nuestra identidad, más allá de la foto o el nombre que aparece en el documento. Tienen que mirar los rasgos físicos y respetar tu identidad de género", explica con vehemencia.

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Un informe reciente de la Oficina de Estadísticas de Justicia muestra que la tasa de victimización violenta de las personas transgénero es 2.5 veces mayor que la tasa entre las personas cisgénero. Y, para mujeres trans como Anandrea Molina, mucho de esa situación responde al clima de polarización que impera en el país.

"Vivo en el estado de Texas y aquí estamos en un ataque constante contra la comunidad LGBTQ y contra los migrantes. Honestamente, no creo mucho en la política porque siento que solo nos utilizan en las elecciones", explica Molina, quien migró desde México hace más de 20 años y ahora es miembro de la Organización Latina Trans en Texas.

Desde hace varios años, las personas trans en Texas han visto cómo los derechos sobre sus cuerpos, la educación y los tratamientos médicos están bajo escrutinio político.

La última medida sucedió en febrero cuando el gobernador Greg Abbott ordenó al Departamento de Servicios Familiares y de Protección que iniciara investigaciones de abuso infantil contra los padres que brindan atención de afirmación de género a sus hijos trans. A pesar del impulso político, esta orden ha sido desafiada por múltiples organizaciones en las cortes estatales.

"Sea quien sea que esté en el poder, creo que lo importante es que nuestra comunidad va a seguir trabajando para organizarnos y protegernos porque, al final del día, las agendas políticas no siempre nos incluyen", asevera Molina.

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Muchas personas conocen las fechas clave en la lucha por el sufragio en Estados Unidos como cuando los hombres negros obtuvieron el derecho al voto en 1869, y las mujeres blancas en 1920, sin embargo, la historia del voto trans es más compleja.

En muchas ciudades y jurisdicciones, las leyes contra el travestismo dificultaron que las personas trans simplemente existieran de manera pública antes de la década de 1960. Y aunque fueron derogadas posteriormente son la inspiración para muchas leyes actuales que permiten que, por ejemplo, la policía detenga a las mujeres trans bajo la sospecha de que son trabajadoras sexuales.

Montanez dice que no deja de sorprenderse por los retrocesos que ve con el surgimiento de leyes que erosionan los derechos de su comunidad. Con amargura dice que la vida le ha alcanzado para ver lo que jamás se imaginó: países como México y su natal Colombia ahora parecen ser más progresistas que Estados Unidos.

"Todos los días vemos retrocesos, por eso hay que luchar contra cada medida. Hay que votar por nuestras vidas en todas las elecciones", advierte.

Candidatos LGBTQ en todo el país

A pesar de la polarización, las numerosas leyes restrictivas y los ataques, no todo son malas noticias para las personas gay en el país. Un informe reciente del comité de acción política LGBTQ Victory Fund reveló que, por primera vez en la historia, los estadounidenses LGBTQ estarán en la boleta electoral en los 50 estados y el Distrito de Columbia.

Un récord de 678 candidatos LGBTQ participan en las elecciones de este noviembre. El reporte revela que, de los 1,065 candidatos LGBTQ que realizaron campañas primarias, 678 de ellos, la gran mayoría de los cuales son demócratas, aparecerán en la boleta electoral en noviembre. Eso representa un aumento del 18.1% en comparación con las elecciones generales de 2020.

Robert García, alcalde de Long Beach y candidato a la Cámara de Representantes, en una entrevista con Noticias Telemundo.
Robert García, alcalde de Long Beach y candidato a la Cámara de Representantes, en una entrevista con Noticias Telemundo.Albinson Linares

"Ha sido difícil en diferentes momentos de mi vida porque soy gay y soy inmigrante, pero creo que siempre es importante sentirte orgulloso de la persona que eres", explica Robert García, actual alcalde de la ciudad californiana de Long Beach y candidato demócrata a la Cámara de Representantes.

"Ha sido difícil en diferentes momentos de mi vida porque soy gay y soy inmigrante, pero creo que siempre es importante sentirte orgulloso de la persona que eres"

robert garcía, alcalde de long beach

A sus 36 años, García forma parte de la nueva camada de líderes políticos de la comunidad gay que participa en estas elecciones de mitad de periodo. Sus padres migraron desde Perú cuando él solo tenía cinco años, y su carrera política a menudo es citada como un caso de éxito.

"Hay que luchar por la reforma migratoria. Yo no nací en este país y me dieron la oportunidad de tener la ciudadanía y es el mismo tipo de oportunidad que tenemos que darles a toda nuestra comunidad", afirma sobre las políticas migratorias que es uno de los temas que más se han discutido en esta campaña electoral.

García ya hizo historia al ser la primera persona LGBTQ y la persona latina más joven en asumir su cargo actual y dice estar preparado para convertirse en el primer migrante LGBTQ en ser elegido para el Congreso.

"Los hispanos somos una comunidad que ama a nuestras familias, y eso incluye a las personas trans y LGBTQ, pero hay que entender que si los republicanos ganan más asientos en el Congreso tendrán más poder para quitarles derechos a las mujeres y a las personas gay. Y eso no es lo que queremos para este gran país que siempre debe ir hacia adelante", asevera García, sobre la tormenta legislativa que se ha vivido este año.

Activistas como Bamby Salcedo aprecian la llegada de nuevos liderazgos políticos, aunque mantiene cierto escepticismo.

"En política, muchas veces ignoramos los procesos y solo esperamos los resultados. Luego aprendemos a sobrevivir a todo tipo de situaciones, pero creo que es muy bueno que tengamos representantes de la comunidad en el Congreso. Hay que apoyar eso", explica Salcedo, quien es la presidenta de Translatin@ Coalition, una agrupación que defiende los derechos de las personas migrantes trans en EE.UU.

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Ya todo está listo para las elecciones de medio periodo, y votantes primerizas como Leslie Rodríguez están a la expectativa de lo que sucederá con los candidatos que apoyaron.

Rodríguez dice que no puede olvidar la fea experiencia que vivió después de la victoria electoral de Donald Trump. Al día siguiente fue a la escuela y había un grupo de niños riéndose y gritando que los mexicanos tenían que irse a su país.

"Tenían como malas intenciones y eso me hizo sentir como que yo no valía nada aquí. Pero ahora me siento más empoderada y me gusta hablar en español en público. También fui a votar por eso, porque no quiero volver a sentirme mal por ser latina", dijo con firmeza.


Si usted o alguien que usted conoce está en crisis, llame al 988 para comunicarse con la Línea de Vida para el Suicidio y la Crisis.

También puede llamar a la red, antes conocida como National Suicide Prevention Lifeline, al 800-273-8255, enviar un mensaje de texto con la palabra HOME al 741741 o visitar SpeakingOfSuicide.com para obtener más recursos.