El senador demócrata Raphael Warnock se impuso con el 50.8% este martes en la segunda vuelta electoral del escaño en el Senado por Georgia, tras una contienda extremadamente reñida contra el candidato republicano Herschel Walker, que logró 49.2% según las proyecciones de nuestra cadena hermana NBC News.
El resultado de la elección otorga a los demócratas una mayoría absoluta de 51 a 49 en el Senado sobre los republicanos, ampliando por un escaño la ventaja que consiguieron el año pasado cuando Warnock también ganó en segunda vuelta en Georgia.
El senador, que se convirtió en el primer hombre negro en ocupar el cargo en 2021, ahora hará historia como la primera persona negra en ganar un mandato completo de seis años para el escaño al Senado por Georgia.
En los comicios de medio término del 8 de noviembre, Warnock sumó 37,000 votos más que Walker de los casi cuatro millones emitidos, pero se quedó a las puertas de la mayoría, forzando una segunda vuelta.
Alrededor de 1.9 millones de personas votaron de manera anticipada en la segunda vuelta, favoreciendo a Warnock. Mientras que este martes más de 1.3 millones acudieron a las urnas para votar en persona, lo que constituyó una participación récord para una segunda vuelta, según el secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger.
Los dos candidatos intercambiaron la delantera en el conteo de votos varias veces a lo largo de la noche, llegando a estar virtualmente empatados en algunos momentos de lo que fue una contienda de infarto. Hubo menos de 50,000 votos de diferencia entre los dos, con el 98% de los votos contados.
En los cuarteles de campaña de Warnock se respiraba un espíritu triunfalista a pesar del vaivén del conteo. "¡Vamos a ganar esta noche!", afirmaba en un tono musical el maestro de ceremonia en una reunión mientras esperaban por los resultados electorales, según NBC News.
Los partidarios del senador demócrata estallaron en júbilo cuando los principales medios de comunicación comenzaron a proyectarlo como ganador.
Personalidades de la industria del cine como Spike Lee también acudieron al evento para mostrar su apoyo al reverendo, lo que se convirtió en una auténtica fiesta esta noche.
El senador demócrata por Nueva York Chuck Schumer felicitó a Warnock por su victoria en la red social Twitter y aseguró que se trataba de un triunfo de Georgia sobre las “políticas extremistas del movimiento republicano MAGA”.
La sede de la campaña de Walker en cambio pasó del júbilo al nerviosismo mientras avanzaba la noche y su candidato intercambiaba lugar en la delantera con el senador demócrata.
Alrededor de las 11:00 pm Walker pareció conceder la derrota en un discurso en el que agradeció a todos los que lo apoyaron. "No voy a poner ninguna excusa porque dimos una gran pelea", dijo. Y agregó que haberse postulado al Senado fue "lo mejor que he hecho en toda mi vida", por encima de los trofeos Heisman y todos los reconocimientos deportivos y empresariales que ha recibido.
“Quiero que continúen creyendo en este país, crean en nuestros funcionarios electos y, sobre todo, permanezcan juntos”, dijo. “No dejen que nadie los separe. No dejen que nadie les diga que no podemos, porque estoy aquí para decirles que podemos”.
La campaña se convirtió en una amarga pelea entre dos hombres negros en un estado importante del sur: Warnock, quien también es el principal ministro de la iglesia de Atlanta donde predicó Martin Luther King Jr., y Walker, una exestrella de fútbol de la Universidad de Georgia y novato político respaldado por el expresidente Donald Trump.
La derrota de Walker marca otro fiasco para un candidato respaldado por Trump en las elecciones intermedias y pone en cuestionamiento su capacidad para liderar el Partido Republicano de cara a 2024, luego de que anunciara que planea contender para la elección presidencial.
Aunque los votantes de Georgia prefirieron a los candidatos republicanos en las otras contiendas en juego en el estado, incluida la de gobernador (que ganó Brian Kemp contra la demócrata Stacey Abrams en primera vuelta), la victoria de Warnock consolida al estado como uno de los campos de batalla clave que podría llevarse cualquiera de los dos partidos en las presidenciales de 2024.
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Varios escándalos mermaron la campaña de Walker, quien fue acusado de pagar los abortos de dos exnovias cuando él mismo se promovió como un candidato antiaborto. Él ha negado las acusaciones.
Pero algunos consideran que también jugó en su contra el hecho de que Trump hizo campaña a su favor. Mientras que en noviembre el expresidente se presentó en el estado para pedir el voto a favor de la exestrella de fútbol, Trump brilló por su ausencia en la segunda vuelta, una señal de que el equipo político de Walker lo consideró más un lastre que un apoyo.
La derrota en el escaño del Senado por Georgia significa que los candidatos respaldados por Trump en las elecciones intermedias no solo fallaron en otorgarle la mayoría a los republicanos en esa cámara, sino que les restaron un asiento, complicando aun más su posición de cara a 2024.
Para el votante republicano Tom Callaway, quien habló con la agencia de noticias The Associated Press, Walker no tenía lo que se necesitaba para ser un buen senador.
“No creo que haya dicho algo en lo que realmente crea ni que su campaña haya tenido algún sentido”, afirmó Callaway horas antes de que se conociera el resultado.
Duane Cochenour, un abogado de 61 años que votó por Walker en su distrito del centro de Atlanta, explicó a NBC News que lo había hecho con cierta reticencia y que no estaba "loco por él".
“No soy fanático de Donald Trump en absoluto. Realmente desearía que se fuera. Ese es mi mayor aspecto negativo al votar por Walker: no quería que me percibieran como un voto a favor de un candidato de Trump”, dijo Cochenour, reflejando un estado de ánimo que ha ayudado a los demócratas a ganar terreno en Georgia. “Pero sentí que la importancia de recuperar el Senado superaba eso”.