El presidente, Donald Trump, se reunió este lunes en la Casa Blanca con la jueza Amy Coney Barrett para su posible nominación para reemplazar a Ruth Bader Ginsburg, la jueza progresista de la Corte Suprema fallecida el pasado viernes.
Coney es una de las favoritas de una lista de cinco mujeres en la que también se encuentra la cubano-estadounidense Bárbara Lagoa.
Coney Barrett, de 48 años, es jueza de la corte de apelaciones del séptimo circuito, con sede en Chicago, y ya era una seria candidata para reemplazar en 2018 al fallecido Antonin Scalia, plaza conservadora que ocupó el también conservador Brett Kavanaugh.
En aquella ocasión Trump afirmó: "La estoy guardando para Ginsburg", según reveló en su día el diario digital Axios.
Coney Barrett, católica, es vista como la cara opuesta de Ginsburg, al menos en lo que se refiere al derecho al aborto, que defiende recortar en la mayoría de presupuestos.
La jueza fue secretaria de Scalia y ha sido acusada por la influyente senadora demócrata Dianne Feinstein de dogmática por la influencia que tienen sus creencias religiosas en sus determinaciones judiciales.
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En 2017, durante su vista de confirmación en el Senado para el puesto en la corte de apelaciones, los demócratas presionaron a Barrett sobre si sus creencias afectarían a sus posibles fallos sobre el aborto y otras cuestiones sociales controvertidas.
Barrett respondió que se tomaba su fe católica en serio, pero que “yo recalcaría que mi afiliación religiosa personal o mi creencia religiosa no me eximen de mis deberes como juez”.
Está casada con Jesse Barrett, un exfiscal federal que ahora es socio en una firma legal de South Bend, Indiana. La pareja tiene siete hijos, incluidos dos adoptados en Haití y uno con necesidades especiales.
El presidente aseguró que entrevistaría a otros candidatos y podría reunirse con la jueza Bárbara Lagoa cuando viaje a Florida a finales de esta semana. Las conversaciones en la Casa Blanca y en la oficina del líder de la mayoría del Senado Mitch McConnell se han centrado cada vez más en Barrett y Lagoa, según dijo a la agencia de noticias The Associated Press una persona a la que se le concedió el anonimato para discutir las deliberaciones privadas.
“Voy a tomar una decisión el viernes o el sábado. Lo anunciaré el viernes o el sábado", dijo Trump en una entrevista telefónica en la cadena Fox News.
Trump aclaró que quiere hacer el anuncio una vez que terminen los servicios fúnebres para honrar Ginsburg, quien murió el viernes a los 87 años como consecuencia de un cáncer de páncreas.
Con información de AP y Efe.