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El rebrote de casos de COVID-19 obliga a estados como Utah y Oregon a suspender la reapertura

Tras un repunte en el número de personas infectadas, los gobernadores de Oregon y Utah decidieron hacer una pausa en la reapertura de sus estados.

Tras un repunte en los casos de coronavirus, los gobernadores de Oregon y Utah decidieron hacer una pausa en la reapertura de sus estados.

Oregon reportó 177 nuevos casos de COVID-19 el jueves, un máximo histórico para el estado, mientras que Utah confirmó 325 nuevos casos este sábado. Ambos estados estaban en el proceso de reabrir por etapas pero no avanzarán mientras investigan el aumento en los casos.

"La pausa de una semana en la reapertura adicional en todo el estado es el resultado de un aumento de los casos de COVID-19 tanto en las zonas urbanas como en las rurales de Oregón. Esta pausa dará tiempo a los expertos en salud pública para evaluar la propagación del virus y determinar si necesitamos ajustar nuestro enfoque", tuiteó el jueves la gobernadora de Oregon, la demócrata Kate Brown.

Oregon ha confirmado 5,377 casos de COVID-19 desde que comenzó la pandemia, y 173 muertes. La mayoría de los condados del estado procedieron a la fase uno o dos de levantamiento de las restricciones, lo que ha permitido la reapertura limitada de restaurantes, bares, servicios personales, gimnasios y centros comerciales.

El condado de Multnomah, que alberga la ciudad más poblada del estado, Portland, es el único condado que no había pasado a la fase uno, y no podrá hacerlo durante este período de "pausa".

En Utah, el gobernador, el republicano Gary Herbert, aseguró que la mayor parte del estado permanecerá por el momento en la fase "amarilla" del plan de reapertura, que permite que todos los negocios abran, incluso para los servicios de comedor al aire libre.

Herbet señaló que Utah necesita hacer una pausa en los esfuerzos de reapertura mientras investiga el aumento de nuevos casos. La mayor parte del estado ya ha superado las fases roja y naranja de las reaperturas, que tenían medidas más restrictivas. El estado ha confirmado 13,577 casos desde que comenzó la pandemia, incluidas 137 muertes.

"No quiero avanzar y luego dar un paso atrás", dijo Herbert en una conferencia de prensa el jueves.

Uno por uno, los estados están sopesando los riesgos a la salud que implica el coronavirus frente a los daños económicos derivados de las medidas de confinamiento por las que millones de personas se quedaron sin trabajo en los últimos tres meses.

Muchos gobernadores se están inclinando por los empleos, a pesar de que las infecciones están aumentando en más de un tercio de los estados, una tendencia que los expertos atribuyen en parte a la reapertura gradual de negocios en las últimas semanas.

Las infecciones por coronavirus en Texas alcanzaron un récord el viernes por tercera vez en cuatro días. Los funcionarios de salud del estado dijeron que 2,166 pacientes estaban en hospitales de Texas con COVID-19, 13 más que el récord alcanzado el miércoles

Florida, Texas y Arizona acumulan tres semanas de sostenida alza, lo que ha coincidido con la reactivación de esos tres estados y la libertad de movimiento que han tenido los ciudadanos especialmente a partir del fin de semana de Memorial Day.

“Al margen de lo que veamos la semana entrante, tomamos la decisión correcta de seguir adelante y levantar algunas de las restricciones para que no causemos más perjuicios a la vida de las personas ni a su sustento”, aseguró el gobernador de Arkansas, el republicano Asa Hutchison.

Arkansas, donde los casos activos y las hospitalizaciones han aumentado en más del doble desde el Memorial Day, está permitiendo que los restaurantes incrementen el número de clientes sentados a partir del lunes.

Arizona se ha convertido en uno de los lugares más aquejados por el coronavirus en Estados Unidos luego de que las infecciones aumentaron a más de 1,000 diarias, en comparación con las poco más de 400 antes de que la orden de quedarse en casa expirara a mediados de mayo.

Asimismo, Alabama, que comenzó su reapertura a principios de mayo, ha registrado en las últimas dos semanas más de una cuarta parte de los 23,000 casos del estado, donde la gobernadora republicana Kay Ivey ha puesto énfasis en la responsabilidad personal.

Con información de The Associated Press, The Hill y NBC News.

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