Por David K. Li – NBC News
El estado de Connecticut informó este lunes de que ofrecerá 1,000 dólares a aquellas personas que renuncien al subsidio por desempleo y vuelvan a trabajar.
Ese mismo día, el gobernador de Oklahoma, Kevin Stitt, anunció que su estado eliminarás las ayudas federales extraordinarias por desempleo de 300 dólares semanales, sumandose a más de un veintena de estados republicanos que han tomado esta decisión para estimular la renta recuperación del mercado laboral.
Son dos ejemplos de las estrategias de palo y zanahoria que están empleando los Gobiernos estatales y locales con la esperanza de volver a poner en marcha la economía del país, golpeada por más de un año de crisis por la pandemia del coronavirus.
A pesar de que los contagios y muertes por COVID-19 han disminuido, los empleadores aseguran que sus anuncios de búsqueda de personal han estado acumulando polvo porque los trabajadores potenciales se quedan en casa.
"Es una gigantesca pesadilla conseguir que alguien trabaje. Estamos operando con un equipo mínimo. Nos falta mucho personal en la cocina y en el comedor", explica Joe Buccheri, propietario del restaurante Joey B's en Berlín, Connecticut.
[Las 5 claves para recibir los pagos de ayuda por hijos aprobados por Biden]
Con la llegada de un clima más cálido, y dado que algunos clientes todavía dudan en cenar dentro por el riesgo de transmisión del coronavirus, Buccheri asegura que querría ofrecer una opción al aire libre si llegara a tener los trabajadores para hacerlo.
"Cada día hay un par de personas que llaman para una entrevista pero nadie se presenta. Nadie se presenta, así que es muy difícil encontrar ayuda", dice Buccheri.
El gobernador de Connecticut, el demócrata Ned Lamont, anunció así su programa Back to Work CT, cuyo objetivo es conceder una prima de 1,000 dólares a 10,000 residentes del estado que decidan volver a trabajar.
Los beneficiarios deben haber presentado una solicitud de subsidio de desempleo antes del 30 de mayo y, a continuación, deben obtener y mantener un empleo a tiempo completo durante ocho semanas seguidas.
"Estoy recibiendo muchos comentarios positivos de los restaurantes, del sector de los servicios, del comercio minorista, de gente que dice que nos está costando más reincorporar a la gente a la fuerza de trabajo", dijo el viernes Lamont a MSNBC.
El anuncio se produjo el mismo día en que Stitt, en Oklahoma, citó a Ronald Reagan para poner fin el próximo mes al subsidio por desempleo de 300 dólares semanales. Su estado ofrecerá además un pago de 1,200 dólares a los primeros 20,000 trabajadores logren un empleo de al menos 32 horas semanales.
"Como dijo una vez Ronald Reagan, el mejor programa social es un puesto de trabajo", dijo Stitt en una empresa de camiones de Oklahoma City, "estas empresas de Oklahoma están abiertas al negocio y listas para crecer".
Alabama, Arkansas, Georgia, Idaho, Iowa, Mississippi, Missouri, Montana, Dakota del Norte, Ohio, Carolina del Sur, Tennessee, Texas y Wyoming son algunos de los estados que han anunciado la eliminación del subsidio federal de 300 dólares semanales.
[Biden se compromete a compartir con el mundo 80 millones de dosis de vacunas contra el COVID-19]
A principios de esta semana, el gobernador republicano de New Hampshire, Chris Sununu, dijo que su estado iba a poner fin a esta prestación y a introducir una bonificación de entre 500 y 1,000 dólares para los desempleados que encuentren un trabajo estable.
"Tenemos muchos puestos de trabajo y queremos que la gente vuelva a salir", dijo Sununu el martes.
Pero el atractivo del subsidio por desempleo es sólo uno de los factores que mantiene a algunas personas en casa en lugar de estar trabajando. Los problemas de cuidado de los niños con muchas escuelas aún cerradas y la amenaza latente de la pandemia, especialmente para los trabajadores que estarían en estrecho contacto con un elevado número de clientes, complican aún más el panorama laboral.
"Todo eso puede hacer que la gente, sobre todo en puestos mal pagados, sea reacia a aceptar un trabajo y quizá reduzca la capacidad de su familia para pagar sus facturas", dijo Gary Burtless, economista de Brookings Institution.
[Cómo funcionará el crédito mensual por hijo que otorgará Biden y qué significa para su familia]
"¿Por qué deberían hacer sacrificios financieros en nombre de una industria que históricamente no les ha pagado muy buenos salarios y no les ha ofrecido muy buenos beneficios?", concluye.