IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Trump ultima su orden para extender la ayuda de desempleo y la moratoria a desahucios y aplazar el impuesto a nóminas

Trump no especificó si se mantendrán los $600 semanales por desempleo, o si serán $200, como quieren los republicanos. El alcance de su autoridad para tomar estas medidas no está claro. “Probablemente me demandarán. Pero ya veremos”, dijo.

Luego de que este viernes las conversaciones entre los demócratas del Congreso y la Casa Blanca terminaran sin un acuerdo sobre el segundo paquete de alivio económico por el COVID-19, el presidente, Donald Trump, dijo que si no se alcanza un pacto, tomará acción ejecutiva para extender  hasta finales de año los beneficios de desempleo a millones de estadounidenses afectados por la pandemia.

En una conferencia de prensa desde uno de sus campos de golf en Bedminister, Nueva Jersey, el mandatario detalló que la acción ejecutiva también incluiría la suspensión del impuesto sobre el salario hasta el final de este año, la extensión de la moratoria de desalojos por impago de renta y la suspensión del pago de préstamos estudiantiles de manera indefinida.

Al hablar de los beneficios por desempleo, uno de los puntos más disputados con los demócratas, Trump no especificó cuánto sería este beneficio extra, que anteriormente fue de 600 dólares semanales. Los demócratas quieren mantener esta misma cantidad, pero los republicanos se han opuesto y han sugerido reducirlo a 200 por semana.

[Estados Unidos suma 1.8 millones de empleos en julio, pero sigue con la tasa más alta de la que se tenga registro]

El alcance de la autoridad de Trump para tomar estas medidas no está claro. Sus órdenes ejecutivas serían vulnerables a los desafíos legales, ya que es el Congreso, no el ejecutivo, el responsable de asignar estos fondos.

El presidente Donald Trump
El presidente Donald Trump durante una rueda de prensa en el Trump National Golf Club Bedminste, en Bedminster, Nueva Jersey, este viernes 7 de agosto. AP

“Probablemente me demandarán. Pero ya veremos”, dijo al ser cuestionado por un reportero.

Las negociaciones en el Capitolio entre los demócratas del Congreso y la Casa Blanca sobre el nuevo paquete de rescate económico para paliar la crisis financiera del COVID-19 terminaron sin acuerdo este viernes. 

La presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, afirmó que el Gobierno no aceptó una propuesta de última hora de los demócratas de reducir el paquete de ayuda de 3.4 billones de dólares a 2.4 billones. La propuesta republicana es de 1 billón de dólares.

[Se acaba el tiempo para pactar el nuevo plan de ayuda por la pandemia. Y Trump tiene casi lista una orden ejecutiva]

"Nosotros nos bajamos 1 billón si es que ustedes agregan 1 billón. Y ellos respondieron con un no absoluto", dijo Pelosi en una rueda de prensa antes de conocerse el resultado de las conversaciones, acompañada por el líder de la minoría en el Senado, Chuck Schumer.

 

 

El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, declaró: "Desafortunadamente, hoy no hicimos ningún progreso".

Con el colapso de las conversaciones, dijo que ahora es probable que el presidente, Donald Trump, tome acción ejecutiva para atajar los desalojos de viviendas y la deuda de préstamos estudiantiles.

El Jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, dijo: “Esta no es una respuesta perfecta, seremos los primeros en decir eso, pero es todo lo que podemos hacer, y todo lo que el presidente puede hacer dentro de los límites de su poder Ejecutivo".

Mnuchin, quien representa al Gobierno en la negociación, dijo más temprano que la propuesta demócrata de añadir 1 billón de dólares al paquete "ni siquiera está en discusión".

Nancy Pelosi y Chuck Schumer.
Nancy Pelosi y Chuck Schumer. AP

El encuentro de este viernes fue la última oportunidad para extender los beneficios y ayudas a desempleados y negocios afectados por el impacto económico que generó el coronavirus.

[Se termina el apoyo económico de 600 dólares semanales para los desempleados]

Las negociaciones enfrentan también el reto de finalizarse antes de las vacaciones que tiene programadas los senadores y los integrantes de la Cámara Baja, quienes no estarán durante la próxima semana. Aunque los congresistas pueden ser llamados a participar de una sesión si es necesario.

El objetivo autoimpuesto por los negociadores demócratas y del Gobierno era alcanzar un acuerdo antes del fin de esta semana, para votar la propuesta durante la próxima, debido al fin de la ayuda económica del primer paquete de ayuda, que ha dejado a 25 millones de personas que perdieron su empleo por el coronavirus sin el beneficio semanal. Este sábado además expira el programa de ayuda para los pequeños negocios.

También están en riesgo más de 100 mil millones para ayudar a reabrir las escuelas, una nueva ronda de pagos directos de 1,200 a la mayoría de las personas y cientos de miles de millones de dólares para los gobiernos estatales y locales.