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Se disparan los robos de una parte esencial de los autos estacionados tras el aumento del precio de metales raros

“Cuando me desperté, me subí al auto, presioné el botón de inicio e inmediatamente sonó como un corredor de NASCAR”, dijo una víctima. Apagó el motor, se arrastró bajo el auto y descubrió lo sucedido.
/ Source: Telemundo

Por Paul A. Eisenstein – NBC News

Sólo tomó unos minutos, a altas horas de la noche, mientras Harvey Briggs dormía en su casa en los suburbios de Madison, Wisconsin. No tiene garaje, por lo que estacionó su Toyota Land Cruiser nuevo en el camino de entrada, junto a la ventana de su dormitorio.

“Cuando me desperté, me subí al auto, presioné el botón de inicio e inmediatamente sonó como un corredor de NASCAR”, dijo Briggs, un consultor de marketing independiente. "Lo apagué, me arrastré debajo del auto y encontré que el convertidor catalítico del lado del conductor había sido cortado" durante la noche, le dijo a NBC News, cadena hermana de Noticias Telemundo.

Los robos de convertidores catalíticos se han disparado de un promedio de 108 por mes en 2018 a 2,347 en diciembre de 2020, según la Oficina Nacional de Delitos de Seguros. Y algunos estimados sugieren que la cifra puede haberse duplicado nuevamente este año, impulsada en parte por el aumento de los precios de los metales raros utilizados en esos dispositivos de control de emisiones.

El platino tocó fondo en alrededor de 622 dólares la onza a principios de 2020, pero luego subió a casi 1,300 más adelante en el año. El paladio cayó tan bajo como 617 dólares la onza en los últimos años, pero subió a casi 3,000 en abril, un máximo histórico.

No hay muchos de estos metales en el catalizador típico (entre 3 y 7 gramos de platino), pero un ladrón experto no necesita mucho esfuerzo para llevarse uno de estos dispositivos.

"Si tiene una sierra afilada, puede atravesar un tubo de escape bastante rápido" para obtener el convertidor, dijo Lance Maze, gerente de servicio de Varsity Ford, en Ann Arbor, Michigan.

Los ladrones llevan los dispositivos a vendedores de chatarra. Buscan vehículos con metales raros en sus catalizadores, como el Toyota Prius y otros híbridos. También apuntan a camionetas y otros autos de mayor altura, ya que es más fácil arrastrarse debajo de ellos.

Para los propietarios puede ser una gran sorpresa cuando encienden su automóvil y escuchan un rugido fuerte en lugar de sonidos suaves. Lo que, al principio podría parecer un silenciador gastado resulta ser un hueco en el sistema de escape donde solía estar montado el convertidor catalítico.

El diputado Jaime Moran del Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles graba el convertidor catalítico de un vehículo con un número rastreable el 14 de julio de 2021.
El diputado Jaime Moran del Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles graba el convertidor catalítico de un vehículo con un número rastreable el 14 de julio de 2021.Frederic J. Brown / AFP - Getty Images

Eso es solo una parte del problema. Los dispositivos son una parte fundamental del sistema de control de emisiones de todos los vehículos de gasolina o diesel. Al pasar los gases de escape, esos metales raros hacen que el combustible no quemado se queme por completo, de forma lo que lo que salga del tubo de escape tenga un mínimo de óxidos de nitrógeno, monóxido de carbono y otros contaminantes. No tener convertidor equivale a emitir mucho aire sucio.

¿Qué hacer entonces?

Las autoridades están tomando medidas enérgicas contra los comerciantes de chatarra sin escrúpulos que hacen la vista gorda cuando aparecen ladrones con artefactos o materiales robados. Y eso no se limita a los convertidores catalíticos. En los últimos años, la policía ha informado de un aumento en el robo de todo tipo de objetos metálicos, como tuberías de cobre extraídas de edificios desocupados, revestimientos o canalones de aluminio.

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En Reno, Nevada, el Departamento de Policía y la División de Cumplimiento Comercial están citando a los comerciantes de chatarra que no mantienen registros de a quién compran para brindar esa información a la ciudad.

En Torrance, California, las autoridades concluyeron en junio una ofensiva de tres meses contra ladrones de convertidores catalíticos y arrestaron a 20 personas.

"Los precios de elementos como rodio o paladio están tan fuera de control en este momento", dijo el sargento Mark Ponegalek, portavoz de la policía de Torrance, al diario Los Angeles Times. "El margen de beneficio es demasiado bueno para los delincuentes", agregó.

Los expertos ofrecen varias formas de reducir el riesgo de ser un objetivo.

Estacionar en un garaje cerrado con llave es la opción más segura, especialmente de noche, o usar un garaje o lote restringido durante el día cuando esté en el trabajo o haciendo mandados.

Considere tener el número VIN de su vehículo grabado en el convertidor. Algunos propietarios están pintando los convertidores de un color brillante, utilizando pinturas de alta temperatura, que pueden indicar que fue robado.

Después de sufrir el robo en su SUV, Briggs dijo que planea instalar focos de detección de movimiento y una cámara fuera de su casa. Espera que eso disuada de un futuro robo o, al menos, ayude a identificar al ladrón.

Algunos conductores también están instalando jaulas y cubiertas antirrobo que se remachan en la parte inferior de un vehículo. Pretenden así dificultarle el acceso a los ladrones.

Pero también pueden crear problemas. Los convertidores catalíticos se calientan cuando queman los gases de escape, y podría representar un riesgo de incendio si ese calor no puede disiparse en el aire circundante. También podrían dificultar la realización de reparaciones cuando sea necesario, en el sistema de escape de un vehículo.