Por Jessica Dickler - CNBC
Netflix también puede ser una necesidad.
Aunque los estadounidenses recortan gastos ante el aumento de los precios y el miedo a una recesión, son pocos los que quieren renunciar a sus suscripciones de streaming, especialmente cuando se trata de servicios de televisión, películas y música como Amazon Prime, Netflix y Spotify.
Aproximadamente dos tercios de los consumidores afirmaron que deben reducir sus gastos debido a la inflación. Sin embargo, solo una cuarta parte tiene previsto cancelar esas suscripciones en los próximos meses, de acuerdo con una encuenta del National Research Group.
La mayoría de la gente reconoció que era más probable que redujera sus gastos en restaurantes, comestibles y ropa.
Los consumidores son los menos propensos a cancelar Amazon Prime, servicios de streaming de televisión y películas, y sistemas de seguridad del hogar, según el reporte, incluso por encima de los alimentos y la gasolina.
“Está claro que la gente valora sus suscripciones de streaming más que nunca”, señaló Kerri Norton, vicepresidente ejecutivo de contenido y estrategia del National Research Group.
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Algo más de la mitad, el 51%, dijo también que las suscripciones representan ahora una parte “significativa” de su gasto mensual.
De media, los consumidores estadounidenses estiman que gastan 135 dólares al mes y el 17.8% de su presupuesto mensual en suscripciones, según el National Research Group. Más de 2,500 personas participaron en el sondeo realizado en agosto.
De hecho, Netflix puede ser más caro de lo que cree. Como las suscripciones suelen cargarse automáticamente en una tarjeta de débito o crédito, es más fácil que los usuarios pierdan la cuenta del costo mensual.
“Es rara encontrar una persona que no tiene al menos un cargo furtivo del que se ha olvidado”, contó recientemente a CNBC Kathryn Hauer, planificadora financiera certificada de Wilson David Investment Advisors en Aiken, Carolina del Sur.
La mayoría de los consumidores subestiman lo que gastan en servicios de suscripción cada mes en al menos 100 dólares, según una encuesta independiente encargada por la empresa de investigación de mercados C+R Research.
Además, las familias tienen menos holgura en sus presupuestos que antes, y reducir esos gastos mensuales recurrentes es una gran manera de ahorrar.