Por Martha G. White - NBC News
La economía estadounidense ganó 850,000 empleos en junio, pero la tasa de desempleo creció ligeramente, del 5.8% al 5.9%, un signo de que la recuperación tras lo peor de la pandemia de coronavirus sigue pendiente de las dificultades de las empresas para encontrar a trabajadores dispuestos.
Las mayores subidas se produjeron en el sector de ocio, restaurantes y hoteles; en la educación pública y privada; en las tiendas de ropa y otros servicios. La tasa de desempleo entre los latinos también subió una décima, del 7.3% al 7.4%.
Los expertos auguraban una cifra de creación de empleos menor (700,000), de forma que la estadística publicada este viernes por el Departamento de Trabajo fue recibida con optimismo, aunque también esperaban un descenso de una o dos décimas de la tasa de desempleo que no se produjo finalmente.
"Es un progreso histórico", afirmó el presidente, Joe Biden, durante una rueda de prensa para valorar los datos económicos. "Estamos exactamente donde esperábamos estar", aseguró.
"La economía está en marcha, [la pandemia del] COVID-19 está mitigando, nuestro objetivo es alcanzar el pleno empleo", recalcó el mandatario.
Los datos semanales de solicitudes de desempleo publicados el jueves mostraron que las solicitudes iniciales de desempleo cayeron a un nuevo mínimo desde el inicio de la pandemia, a 364,000, mientras que el procesador de nóminas ADP informó el miércoles de un crecimiento del empleo en el sector privado de 692,000 en junio.
Más de 330,000, o casi la mitad, de esos nuevos empleos procedieron del sector del ocio y la hostelería. El alza fue generalizada en todos los sectores excepto en los servicios de información, en donde los empleos descendieron ligeramente.
Las pequeñas empresas sumaron 215,000 de esos puestos de trabajo, a pesar de que la actividad económica en este sector -sobre todo en restaurantes, bares, tiendas y hoteles- se ha visto limitada, ya que los propietarios de negocios tiene que competir con grandes superficies y cadenas de restaurantes a la hora de ofrecer buenas condiciones a los empleados.
“Hay todo tipo de cuellos de botella y fricciones en el proceso de volver a recuperar trabajadores para industrias enteras”, explicó Julia Pollak, economista de la web de empleo ZipRecruiter, a la cadena de noticias NBC News.
Los economistas podrían haber sido demasiado optimistas, añadió, sobre la recuperación prevista, pues resulta difícil valorar la magnitud del impacto que tuvo la pandemia de coronavirus sobre el país, y cómo afectó a la carrera de millones de trabajadores.
"Las ganancias de las nóminas de junio, mejores de lo esperado, proporcionan cierta tranquilidad necesaria de que la recuperación del mercado laboral sigue estando en progreso", explicó Mark Hamrick, analista económico de Bankrate. "El dato de junio está firmemente por encima del ritmo medio mensual de este año de más de 500,000 empleos añadidos o recuperados", detalló.
En su opinión, los economistas podrían haber sido inicialmente demasiado optimistas, aunque consideró que es difícil exagerar el número de alteraciones que el COVID-19 ha provocado en la economía, y la forma en la que incidió en las trayectorias profesionales de millones de trabajadores. Todo esto se suma a una tarea crítica de la economía, que todavía no funciona con normalidad.
Los economistas no suelen dar demasiada importancia al reporte de un solo mes, ya que proporciona una imagen retrospectiva que, incluso con ajustes estacionales, puede seguir siendo volátil.
"Creo que en los próximos meses habrá bastante ruido, ya que estamos en los días de verano", señaló Cliff Hodge, director de inversiones de Cornerstone Wealth.
La línea de recuperación del mercado laboral en los próximos meses dará a los políticos -y a los inversores- una idea más ajustada de lo que depara el futuro.
"Creo que vamos a observar con bastante atención la evolución de la tasa de participación", mencionó de su lado James McCann, economista jefe adjunto de la consultora Aberdeen Standard Investments. "Los datos podrían consolidar las ideas de los inversores sobre cuándo la Reserva Federal (Fed) podría anunciar la reducción de las compras de activos", dijo.
Los responsables políticos han coincidido mayoritariamente en que los actuales focos de inflación son transitorios. Pero si el crecimiento del empleo es sólido, y tanto el desempleo como el subempleo experimentan descensos sostenidos, la preocupación por que el aumento de los salarios genere presiones inflacionistas podría persuadir al presidente de la Fed, Jerome Powell, y a los demás miembros del banco central a reconsiderar su programa de compra masiva de bonos más pronto que tarde.
"En Estados Unidos tenemos la suerte de tener amplio acceso a las vacunas, lo que ha propiciado una vuelta masiva a las empresas de propiedad local en estos sectores", dijo Eric Groves, cofundador y director general de la plataforma de redes de pequeñas empresas Alignable. "Pero con el aumento viene un desequilibrio masivo de la oferta y la demanda dentro de los mercados laborales por hora", añadió.