Por Lucy Bayly – NBC News
La economía estadounidense ganó apenas 266,000 trabajos en el mes de abril, pese a que los expertos esperaban un incremento récord de más de un millón de empleos, según el informe publicado este viernes por el Departamento de Trabajo.
De hecho, la tasa de desempleo subió ligeramente, una décima hasta el 6.1%, lo que el Gobierno federal achaca a que las mejoras registradas en ocio y hostelería por la reapertura económica impulsada por la vacunación se han visto canceladas por la desaparición de empleos temporales ligados a la pandemia de coronavirus.
Pero aun así, la tasa se ha reducido desde el máximo histórico del 14,8% del pasado mes de abril, el nivel más alto desde la gran depresión. El desempleo entre los latinos apenas varió, y la tasa permanece en el 7.9%.
El presidente, Joe Biden, se refirió la tarde del viernes al reporte del Departamento de Trabajo. Desde la Casa Blanca, el mandatario pidió "perspectiva" sobre las cifra de las nuevas plazas sumadas a la economía estadounidense durante el mes de abril.
Desestimó las reacciones negativas, incluidos los argumentos de los republicanos, que aseguran que el subsidio por desempleo está contribuyendo a que los trabajadores se conformen con ese ingreso y no quieran trabajar.
"Los datos muestran que hay más trabajadores que buscan empleo y muchos no lo encuentran", expresó.
Biden dijo que su plan de rescate fue creado para recuperar la economía del país en el lapso de un año, “no en tan pocos meses”.
“La subida es empinada, y tenemos un largo camino que recorrer", aseguró. "Estamos saliendo de un colapso económico que nos costó 22 millones de puestos de trabajo", dijo al tiempo en que elogió que desde que llegó a la Casa Blanca se ha logrado recuperar 1.5 millones de empleos.
“Sabíamos que esta no sería una carrera de velocidad, sino de resistencia”, dijo. “Lo que propusimos va a dar resultado, pero también requiere de compromiso y darle tiempo a la economía”.
Además, insistió en que la ayuda a los estadounidenses llegó y “seguirá llegando” y reiteró la importancia del plan de rescate propuesto para “reconstruir” y “reconquistar” el futuro.
Se esperaba que el esperado informe mensual sobre el empleo mostrara un fuerte crecimiento de las nóminas, y algunos analistas preveían incluso un aumento de los puestos de trabajo por encima de la marca de los dos millones, después de que el aumento de la administración de las vacunas contra el COVID-19 estimulara a las personas a salir a cenar, a tomar vacaciones y a aventurarse en las tiendas tras meses de medidas restrictivas.
"Este podría ser uno de los informes de empleo más decepcionantes de todos los tiempos", dijo Nick Bunker, director de investigación económica de Indeed Hiring Lab. "El mercado laboral necesita ganar 8,2 millones de puestos de trabajo para situarnos donde estábamos antes de la pandemia, sin tener en cuenta los puestos de trabajo que se habrían creado si la pandemia no hubiera ocurrido. Cada mes que no se acelera el aumento del empleo nos retrasa más".
La vacunación generalizada ha impulsado la vuelta a la normalidad, con más de 107 millones de personas totalmente vacunadas en Estados Unidos, según los datos de seguimiento de nuestra cadena hermana, NBC News. Esto ha llevado a la confianza de los consumidores que está impulsando el aumento del gasto, ya que las tiendas, bares y restaurantes aumentan su capacidad.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) afirmaron el miércoles que Estados Unidos podría haber superado lo peor de la pandemia de COVID-19 en el mes de julio, si las vacunaciones continúan a un ritmo elevado, la gente sigue usando mascarillas y se distancia físicamente cuando sea necesario.
A pesar de la decepcionante cifra, la tasa de participación laboral y el crecimiento salarial fueron mejores de lo esperado, dijo Sameer Samana, estratega senior de mercados globales del Instituto de Inversión Wells Fargo.
"El mercado laboral sigue en marcha y será más que suficiente para apuntalar la confianza de los consumidores y el consumo", dijo.
Algunos economistas y empresarios afirman que el paquete de ayuda del presidente Joe Biden, que incluía cheques de estímulo así como la ampliación de las prestaciones para los desempleados, está disuadiendo a algunos trabajadores de volver a su antiguo trabajo o de buscar un nuevo puesto, lo que provoca una escasez de trabajadores.
Las prestaciones de desempleo combinadas pueden equivaler a 600 dólares a la semana, o a unos 16 dólares por hora, más de lo que pagan muchos de los empleos de nivel inicial. Algunas empresas han recurrido incluso a ofrecer bonos en efectivo para atraer a los trabajadores.
Otros economistas afirman que las pagas extraordinarias por la pandemia han sido necesarias para mantener la comida en la mesa de los trabajadores que tienen que quedarse en casa para ayudar a sus hijos con la educación a distancia, o debido a la persistente preocupación por contraer el virus.
Unos 16 millones de personas siguen solicitando prestaciones por desempleo, y 12 millones de esos trabajadores desempleados están acogidos a los programas federales de emergencia por pandemia, que expiran en septiembre.
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"La recuperación del mercado laboral, incluida la reducción del número de desempleados y de los que buscan y reciben ayudas por desempleo, es un hilo económico tan importante como cualquier otro que se esté siguiendo en medio de la historia de la reapertura", dijo Mark Hamrick, analista económico senior de Bankrate. "Sí, hay una gran incertidumbre asociada a todo esto, pero eso debe verse dentro del contexto de la mejora en general".