Mientras que el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, republicano por Kentucky, abogó por un paquete de ayuda económica por el COVID-19 más reducido, el ala progresista del Partido Demócrata pidió una medida más costosa pero que incluya los esperados cheques por 1,200 dólares.
McConnell dijo este martes que estaría dispuesto a eliminar una provisión que los republicanos han buscado incluir para avanzar en las negociaciones de un segundo paquete de ayuda por el coronavirus, si los demócratas aceptaban hacer a lado una de sus principales prioridades.
A cambio de no incluir una provisión que protegería a las empresas contra las demandas por negligencia relacionadas con la pandemia de COVID-19, McConnell pidió a la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata por California Nancy Pelosi, desechar la creación de un fondo para estados y ciudades de 160,000 millones de dólares.
La oferta de McConnell coincide con la propuesta bipartidista de un grupo de senadores moderados para rescatar las negociaciones, estancadas desde hace más de medio año.
Los senadores Joe Manchin, demócrata por Virginia Occidental, y Susan Collins, republicana por Maine, han apoyado un paquete de poco más de 900,000 millones de dólares, que no incluye los esperados cheques directos de 1,200 dólares.
Esto ha provocado el rechazo tanto de demócratas del ala progresista como de la Casa Blanca.
Seis senadores liderados por Bernie Sanders, independiente por Vermont, publicaron una carta el martes pidiendo que se incluya en el paquete bipartidista otra ronda de pagos directos de 1,200 dólares.
"Únanse a nosotros para exigir que cualquier nueva propuesta de alivio por el COVID-19 incluya un pago directo de 1,200 dólares para adultos y 500 para sus hijos", se lee en la carta, firmada conjuntamente por los demócratas Elizabeth Warren y Ed Markey de Massachusetts, Ron Wyden y Jeff Merkley de Oregon y Kirsten Gillibrand de Nueva York.
"Apreciamos mucho el arduo trabajo que se ha invertido en la propuesta actual de 908,000 millones que está siendo redactada por varios senadores demócratas y republicanos. Pero, dicho simplemente, dado el alcance espantoso de la crisis actual y la desesperación que experimentan las familias trabajadoras en todo este país, esta propuesta no llega lo suficientemente lejos", dijeron.
Otro gran obstáculo
Por su parte, el presidente, Donald Trump, apoya otra ronda de pagos directos y se encuentra en negociaciones con el liderazgo republicano para que sean incluidos en el paquete bipartidista.
El otro gran obstáculo en las negociaciones es si se debe brindar protección legal a las empresas cuyos trabajadores se enferman por el coronavirus.
Los críticos con esta medida alegan que algunas compañías, como las plantas empacadoras de carne, no deberían estar protegidas si hay indicios de que no tomaron las precauciones sanitarias adecuadas. Pero muchos legisladores republicanos señalan que una medida de este tipo podría conducir a la quiebra a miles de empresas pequeñas, algunas de las cuales se hundirían si tuvieran que pagar las pruebas de COVID-19 a sus empleados.
McConnell aseguró este martes que el Congreso no levantará la sesión sin proporcionar la ayuda económica por el COVID-19.
"Salir de aquí sin un paquete de ayuda por el coronavirus no puede suceder", dijo McConnell. "¿Por qué no dejamos de lado los dos temas obviamente más polémicos? Sabemos que nos enfrentaremos a otra solicitud después del primero de este año. Viviremos para luchar por ellos otro día".
Con información de NBC News y The Associated Press.