Al menos cinco personas fallecieron este jueves, entre ellas un policía que se encontraba fuera de servicio, tras un tiroteo masivo en un vecindario de Raleigh, Carolina del Norte, aseguró la alcaldesa de esa ciudad, Mary-Ann Baldwin, en una rueda de prensa.
“Es un día triste y trágico en Raleigh", dijo Baldwin.
Patrullas policiales y una ambulancia acudieron al lugar del ataque alrededor de las 5:30 pm (hora local), mientras un hospital de la zona confirmó que había recibido a varios heridos.
La policía aseguró que el sospechoso, que fue descrito como un "joven blanco", fue capturado y arrestado luego de ser controlado en una residencia del área tras una intensa persecución policial de aproximadamente tres horas.

Las autoridades también confirmaron que otras dos personas fueron transportadas a hospitales cercanos, uno de ellos era un agente canino de la policía de Raleigh que no estaba de servicio.
"Esta noche el terror ha llegado a nuestra puerta", declaró el gobernador Roy Cooper a los periodistas. "La pesadilla de toda comunidad ha llegado a Raleigh. Este es un acto de violencia sin sentido, horrible y exasperante que se ha cometido", añadió.
Baldwin agregó: "Tenemos que poner fin a esta violencia sin sentido de las armas de fuego que está ocurriendo en todo nuestro país. Hay demasiadas víctimas. Tenemos que despertar".
Uno de los vecinos del barrio donde ocurrió el ataque, que se identificó solo como Robert, aseguró a WRAL, la estación de noticias local de NBC en Raleigh, que el sospechoso pasó por el patio trasero de su casa con una escopeta de largo alcance y vestido de camuflaje.
Otro testigo dijo que el hombre llevaba botas negras y “parecía un bebé", refiriéndose a lo joven que era.
Mientras la policía localizaba al sospechoso, la comunidad fue urgida a resguardarse en sus casas.
Una vecina de la zona, identificada como Brooke Medina, contó a la agencia de noticias The Associated Press que se dio cuenta de la orden de confinamiento al llegar a su hogar, donde se encontraban su marido y sus cuatro hijos. La mujer dijo que aseguraron las puertas y ventanas y se resguardaron en un corredor.