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"Mamá, me prendieron fuego": un niño de 6 años sufre quemaduras de tercer grado tras ser acosado por otro menor

La familia de la víctima asegura que estaba jugando en el patio trasero de su casa en Connecticut cuando otro niño cubrió una pelota de tenis con gasolina, le prendió fuego y se la lanzó en la cara.

Un niño de 6 años de Connecticut sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en la cara y las piernas luego de que otro niño le prendiera fuego, según la familia de la víctima.

El pequeño de Bidgeport, Dominik Krankall, sigue vendado, dijo la hermana del menor, Kayla Deegan a NBC New York.

El niño estaba jugando en el patio trasero de su casa con otros vecinos el domingo por la tarde cuando se produjo el incidente.

“En cuanto bajó las escaleras, el acosador lo llamó por su nombre y lo atrajo hacia la esquina, y en cuestión de segundos volvió a la esquina gritando, diciendo ‘mamá, me han prendido fuego”, contó Deegan.

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De acuerdo con su relato, un vecino de 8 años se metió en un cobertizo y llamó a Krankall: tenía gasolina y encendedores.

"Echó gasolina en una pelota de tenis, agarró un encendedor, lo encendió y se lo tiró a la cara a mi hermano, y luego se alejó de él y lo vio arder”, aseguró Deegan.

La víctima fue trasladada a la unidad de quemados del Hospital de Bridgeport. La policía señaló el martes que está investigando los informes preliminares de cuatro niños que fueron vistos jugando con gasolina y prendiendo fuego a objetos.

Se espera que el niño se recupere, según funcionarios del hospital.

Según sus familiares, no es la primera vez que Kramkall termina en el hospital por culpa del niño acosador.

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“Hace dos meses, bajo la supervisión de la madre del acosador, éste fue empujado contra la pared y cayó al suelo. Y de nuevo, la madre se niega a admitir que su hijo lo hizo”, dijo Deegan.

La policía, los bomberos y los equipos estatales de investigación de incendios están investigando la causa de las lesiones del niño, así como el incidente. Hasta el martes por la tarde no se habían presentado cargos.

“Es desgarrador, es enfermizo conocer a la familia. No se está haciendo nada al respecto”, lamentó Deegan.

La familia quiere recaudar dinero para ayudar a pagar los gastos del hospital y para poder mudarse y encontrar otro lugar más seguro para vivir.