Decenas de turistas que vacacionaban en una playa de Cancún, Quintana Roo, tuvieron que correr para ponerse a salvo el martes luego de que un comando armado disparara en la zona turísitca mexicana a plena luz del día.
Lucio Hernández Gutiérrez, secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo informó a través de Twitter que no hubo personas heridas durante el ataque.
Testigos de la balacera refirieron que entre seis y siete hombres armados a bordo de varias motos acuáticas abrieron fuego hacia la playa, disparando unas 20 ráfagas.
"Nosotros estábamos con mi familia, ahí a unos 20 metros, y en un momento veo una situación rara de unas motos de agua que se acercaban a la costa", contó a Noticias Telemundo Juan Cruz, turista argentino que estaba en la playa ubicada frente al boulevard Kukulcan, entre los hoteles Oasis Palm y Royal Cancún, cuando ocurrió el incidente.
"Y una gente que estaba acá en la playa, veo un movimiento que uno le entrega un arma a otro y ahí es cuando le digo a mi mujer que agarra a los chicos y se retire. En 10 segundos hubo sonidos de disparos que no terminaban, era una pesadilla", agregó.
Cruz afirmó que su familia piensa reubicarse a otra zona hotelera de Quintana Roo, más alejada de Cancún, pues tienen miedo de la situación de inseguridad que se vive en el área.
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Rick Lebassa, un turista estadounidense de Maine que atestiguó la balacera le dijo a The Associated Press que había visto a tres hombres disparar sus pistolas al aire, no hacia la playa.
"Había dos tipos, tal vez incluso un tercero, que llegaron en motos de agua, y lo que vi fue que estaban disparando al cielo. No vi que los disparos fueran hacia la costa", dijo Lebassa.
El turista estadounidense agregó que era la primera vez en los 31 años que llevaba visitando Cancún que veía una situación de ese tipo.
El tiroteo se produce tras una serie de incidentes violentos en una zona de la costa repleta de centros turísticos, y en la misma semana en que las autoridades mexicanas enviaron más de 1,500 policías militares de la Guardia Nacional para proteger el área.
Infantes de Marina mexicanos con chalecos antibalas, cascos y rifles de asalto ya patrullaban las playas repletas de turistas en Cancún antes del martes.
El 5 de noviembre, un comando armado irrumpió en una playa en Puerto Morelos, un centro turístico al sur de Cancún, y abrió fuego frente a hoteles de lujo, ejecutando a dos presuntos narcomenudistas de una banda rival. Los turistas huyeron despavoridos a buscar refugio en sus hoteles.
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Según las autoridades estatales, se trató de “un enfrentamiento entre grupos rivales de narcotraficantes en una playa” cerca de dos hoteles. Varios cárteles luchan por el lucrativo comercio minorista de drogas en la zona, incluido el cártel de Jalisco y una pandilla aliada del cártel del Golfo.
Si bien no hubo heridos en el incidente de este martes, en otros episodios violentos algunos turistas han sido víctimas del fuego cruzado de las bandas de delincuentes.
Dos semanas antes, un bloguero de viajes de California y una turista alemana murieron en un tiroteo similar en la ciudad costera de Tulum en octubre.
