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Ordenan el arresto de la oficial de prisiones que desapareció junto a presunto asesino

"No creo que haya ninguna duda de que ella le ayudó, pero hacerlo voluntariamente sería algo tan fuera de lugar para la agente que todos conocemos", dijo el sheriff en Alabama.

Las autoridades han emitido una orden de captura contra la guardia de prisiones que desapareció el viernes pasado junto a un recluso acusado de homicidio en Alabama, cuando lo llevaba a una supuesta cita de evaluación mental, y han ofrecido además una recompensa de $10,000 por datos que permitan la captura de ambos. 

El preso Casey White, de 38 años, y la guardia de prisiones Vicki White, de 56 (que comparten apellido por casualidad y no tienen relación familiar), fueron vistos por última vez cuando ella lo sacó de la cárcel en el noroeste de Alabama donde esperaba su juicio por asesinato para llevarlo a una supuesta cita de evaluación mental en el juzgado del condado. 

La mujer facilitó la fuga del preso, sospechan los investigadores, no sólo porque mintió diciendo que lo llevaba a una cita que no existía, sino que no cumplió el protocolo de hacerlo junto a otro agente y no sola. De todas formas, el Servicio de Alguaciles ha dicho que se la considera “desaparecida y en peligro”.

White está acusado de dos cargos de asesinato por matar a puñaladas a una mujer de 58 años. Confesó el crimen cuando ya estaba en la cárcel cumpliendo otra condena de 75 años por varios delitos, incluido allanamiento de morada y robo de automóvil.

Conociendo al recluso, creo que ella está en peligro, sean cuales sean las circunstancias”, dijo el sheriff del condado de Lauderdale, Rick Singleton.

Vicki White, empleada de la oficina del alguacil del condado de Lauderdale y subdirectora de correccionales, desapareció el viernes 30 de abril cuando trasladaba a un preso en Alabama.
Vicki White, en una imagen oficial. Oficina del Sheriff del Condado de Lauderdale

Un familiar de White defendió su inocencia y la describió como “una persona dulce” que no escaparía con un prisionero por su propia voluntad. Los oficiales también han remarcado que la mujer era una "empleada extraordinaria".

“Obviamente, ella podría haber participado voluntariamente. Pero también nos preocupa que tal vez, de alguna manera, alguien la coaccionó o la amenazó, la obligó a ayudar en este escape”, dijo el lunes a CNN el alguacil del condado de Lauderdale, Rick Singleton.

Con respecto a la posibilidad de que el preso y la guardia tuvieran una relación personal o romántica, el alguacil dijo que no había evidencia de algo por estilo, aunque no deja de ser "una posibilidad".

Una cita médica que no estaba programada 

La agente de prisiones recogió al recluso de la cárcel del condado de Lauderdale a las 9:41 de la mañana del viernes; iba armada con una pistola de 9 milímetros, según los registros oficiales. La agente dijo a un oficial del registro que llevaba al reo a la corte del condado para una evaluación de salud mental, pero esa visita no estaba prevista para ese día. También dijo que iba a una cita médica para ella; eso fue confirmado por el centro médico, ella no se presentó.

Una hora y media después desaparecieron: las autoridades hallaron en un centro comercial el auto de patrulla en el que se viajaban.

Todo indica que White estuvo involucrada y participó en la fuga”, afirmó en un primer momento el sheriff de Lauderdale a la estación local WBRC. Pero luego dijo que se desconocía los motivos por los que ella podría haber ayudado al preso, de ser ése el caso.

“Estamos tratando de determinar si eso se hizo deliberadamente, o de alguna manera fue coaccionada o amenazada para que participara”, agregó.

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La agente trasladó en solitario al preso, pese a que la norma obliga a que sean dos oficiales dados los cargos a que afrontaba el acusado.

La foto más reciente de Casey White en la cárcel, dada a conocer por la Oficina del Sheriff del Condado de Lauderdale, en Alabama.
Casey White. Oficina del Sheriff de Lauderdale

El hombre iba esposado y es difícil imaginar cómo podría haberse liberado sin ayuda, agregó el sheriff. “No creo que haya ninguna duda de que ella ayudó, pero hacerlo voluntariamente sería algo tan fuera de lugar para la Vicki White que todos conocemos”, concluyó. 

Su familia coincide: su exsuegra, Frances White, le dijo al diario Daily Mail el domingo que las acusaciones contra la agente no coinciden con la “persona terriblemente buena” que ella dice conocer. 

“No puedo entender que se fuera con un tipo que sabía que era un asesino”, dijo la mujer, de 88 años, quien dijo que habló con ella por última vez hace aproximadamente un mes. 

La guardia se divorció del hijo de Frances White, Tommy Smith, hace 16 años, tras años de matrimonio, pero la mujer dice que han seguido en contacto: “Eramos muy buenas amigas, era muy dulce”.

Un récord intachable

La agente llevaba 25 años trabajando para el Departamento del Sheriff y había presentado sus papeles para pedir la jubilación el día antes de desaparecer, según dio a conocer la web Law and Crime.

White es conocida en el condado por tener un récord intachable. “Todos sus compañeros de trabajo, todos los empleados de la oficina del alguacil, los jueces, todos tienen el mayor respeto por ella”, dijo Singleton en una entrevista con CNN.

Vicky White “tenía contacto con todos los reclusos en un momento u otro”, dijo el alguacil, “pero en cuanto a una relación romántica o algo así, no tenemos evidencia o prueba de que ese fuera el caso, aunque es una posibilidad”.

El alguacil federal Marty Keely afirmó por parte que se cree que el prisionero es “una seria amenaza para la agente y la población”.