Por Phil Helsel — NBC News
La policía de Chicago asegura tener pistas sólidas sobre el tiroteo mortal de una niña de 8 años que fue alcanzada por los disparos dirigidos a otro hombre que salía de una tienda el sábado.
La menor, Melissa Ortega, recibió un disparo en la cabeza mientras caminaba con su madre alrededor de las 2:45 de la tarde en el barrio de La Villita, según explicó la policía.
“Es simplemente incalificable”, dijo el lunes en una conferencia de prensa el superintendente de la policía de Chicago, David O. Brown, que prometió hacer rendir cuentas a los responsables.
El tiroteo se produjo cuando “delincuentes conocidos” dispararon contra un hombre de 26 años que salía de una tienda, alcanzándole en la parte baja de la espalda, según la policía.
La niña fue alcanzada por uno de esos disparos, según la policía, pese a que ni ella ni su tutor eran el objetivo del tiroteo.
Brown, que dijo que la investigación era “muy delicada en estos momentos”, declinó verificar qué pruebas tiene la policía.
“Tenemos gente que está cooperando con nosotros en este momento, y tenemos pistas muy sólidas”, agregó.
La policía siguió pidiendo pistas y dijo que hay una recompensa de 15,000 dólares por las que conduzcan a un arresto o una condena.
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Melissa Ortega emigró con su madre a Estados Unidos desde México hace seis meses, y hace tres se mudaron juntas a Chicago para estar más cerca de la familia, según dijo la familia en un comunicado.
“Ninguna madre debería tener que perder a su hijo a plena luz del día. Ninguna madre debería tener que enterrar a su hija de 8 años”, lamentó la familia.