La Policía de Houston descubrió este viernes a más 90 personas, presuntamente inmigrantes, encerradas en una vivienda de esa ciudad texana, en un aparente caso de tráfico humano. Algunas de las víctimas halladas en la casa de dos pisos presentaban síntomas de COVID-19, según informaron las autoridades.
La policía recibió una llamada de alerta por un supuesto secuestro en la noche del jueves y estuvo trabajando durante toda la madrugada hasta localizar la vivienda unifamiliar, según explicó en conferencia de prensa Daryn Edwards, jefe adjunto de la policía local.
"Cuando llegamos a la casa nos dimos cuenta de que había más de 90 personas adentro", agregó. Eran casi todos hombres (menos cinco mujeres), y el más joven tenía poco más de 20 años.
El oficial indicó que se están llevando a cabo exámenes de COVID-19, y entre tanto permanecen dentro de la vivienda para evitar el riesgo de contagios. No se han detectado casos graves, según la policía, aunque algunos presentan síntomas de coronavirus como fiebre, pérdida de olfato y sentido del gusto.
No se han producido arrestos en relación con esta supuesta operación de tráfico de personas. Tampoco se ha informado sobre la nacionalidad de las personas halladas en la vivienda.
"Fue una gran sorpresa cuando entramos en la casa y vimos lo que vimos", dijo Edwards. La vivienda estaba mayormente sin muebles, y había colchones apoyados contra las paredes. Las personas retenidas estaban sentadas unas junto a otras y "no habían comido en un buen tiempo", agregó el oficial.
El Departamento de Seguridad Nacional se hará cargo de la investigación.