Por Julianne McShane - NBC News
Un padre de California que fue arrestado la semana pasada después de que las autoridades descubrieran más de 900 imágenes de abuso sexual infantil también fue acusado en 2018 de tener “varios cientos” de fotografías similares. El sospechoso ha evitado el juicio hasta ahora debido a un supuesto fallo informático, según un funcionario de la ley.
Ryan Rovito, de 34 años, de Redding, está acusado de un delito grave de posesión de pornografía infantil y grabación subrepticia (oculta) después de que su esposa entregara a la policía una cámara que encontró escondida en el baño de invitados de la pareja y un disco duro.
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En 2018, su anterior esposa también acudió a las autoridades y denunció que tenía fotos de “menores prepúberes” en su ordenador, declaró el sargento Rob Garnero, portavoz de la policía de Redding.
Ese caso se perdió en un nuevo sistema de software y no llegó a la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Shasta hasta noviembre, según explicó un portavoz de la oficina del fiscal.
El software “tenía algunos errores cuando se puso en marcha”, detalló Garnero, añadiendo que la división de registros del departamento de policía hizo una nota en su software interno en diciembre de que el caso anterior se había perdido.
Cuando la policía archivó el caso actual contra Rovito, encontraron el anterior — “y fue entonces cuando descubrimos que ese caso nunca había sido completamente descubierto cuando se enrutó”, explicó Garnero.
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Ryan Rovito no respondió a los múltiples intentos de pedirle que hiciera comentarios. Su abogado, Timothy Prentiss, dijo que Rovito mantiene su inocencia.
“Desde su perspectiva, está dispuesto a desafiar estas acusaciones, y preferiríamos hacerlo en el sistema legal”, declaró Prentiss.
Prentiss dijo que no estaba familiarizado con las acusaciones de 2018.
"Todo parecía perfecto"
La policía comunicó que había un estatuto de limitaciones de tres años en el caso de 2018, que había expirado cuando se descubrió el fallo. Pero la oficina del fiscal del condado de Shasta dijo el jueves que el caso cae bajo un límite de 10 años.
“Vamos a tener que hacer algunas investigaciones adicionales para revisar el caso antes de tomar cualquier decisión de presentación”, indicó un portavoz del fiscal.
La exesposa de Rovito, quien hizo el informe de 2018, no pudo ser contactada para hacer comentarios por teléfono o correo electrónico el jueves. Los registros judiciales muestran que ella solicitó el divorcio en abril de 2019.
Su actual esposa, Victoria Rovito, dijo que si los funcionarios lo hubieran procesado en 2018, la vida de su familia nunca podría haber sido “volteada de cabeza y destrozada".
“Entiendo que los errores ocurren, pero estas cosas no pueden caer en el olvido”, declaró Victoria Rovito, de 33 años, en una entrevista exclusiva esta semana. “Podría haber sido la vida de alguien. Podría haber sido la vida de varias personas”, señaló.
Dijo que no sabía nada de las acusaciones anteriores hasta que la policía se lo comunicó este mes y que desde entonces las ha compartido con la Guardia Nacional, en la que, según dijo, Rovito ha prestado servicio.
Un portavoz de la Guardia Nacional dirigió las preguntas a un portavoz del mismo departamento de California, que no respondió inmediatamente a las preguntas el jueves.
Esta situación no parecía comprensible
Cuando Victoria y Ryan Rovito se conocieron en 2021, él parecía el compañero ideal: se llevaba bien con su hijo, que ahora tiene 3 años, y “literalmente haría cualquier cosa por mí”, contó ella. Se casaron menos de un año después, en febrero de 2022, y hace siete meses tuvieron una hija.
“Todo parecía perfecto”, recordó.
Así que cuando ella encontró una cámara oculta en el baño de invitados de su casa en Redding, a unos 160 millas (257 kilómetros) al norte de Sacramento, y más tarde fue informada por las autoridades de que él presuntamente tenía cientos de imágenes de abuso sexual infantil en su disco duro, ella estaba en “shock absoluto”.
“Esta situación me parecía inimaginable”, declaró.
La policía de Redding explicó que cuando Victoria Rovito encontró la cámara por primera vez y se enfrentó a su marido, Ryan Rovito “juró quitarla y tirarla”.
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Ella descubrió que él no la había tirado como había prometido, y el 8 de marzo entregó a la policía la cámara y el disco duro, “temiendo que el señor Rovito hubiera grabado nefastamente a sus hijos pequeños usando el cuarto de baño”, según detalló el departamento de policía.
Las autoridades dijeron que realizaron un análisis forense de los dispositivos y encontraron cientos de fotos de abusos sexuales y múltiples vídeos. Garnero dijo el miércoles que el departamento de policía todavía está revisando los dispositivos de la residencia de Ryan Rovito.
La policía ha dicho que los vídeos obtenidos de la cámara “mostraban a niños y adultos usando el baño que no parecían saber que estaban siendo grabados".
Rovito fue detenido el 16 de marzo, durante un control de tráfico, por cargos relacionados con el delito de posesión de pornografía infantil y la grabación subrepticia de una persona identificable que estaba desnuda.
El día de su detención pagó una fianza de 25,000 dólares.
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Si es declarado culpable, Rovito podría enfrentarse a penas de entre 16 meses y ocho años de prisión y también podría ser condenado a libertad condicional y obligado a registrarse como delincuente sexual de por vida en lugar de enfrentarse a penas de prisión.
Rovito también podría enfrentarse a una pena de hasta un año en la cárcel del condado por el cargo de grabación subrepticia, que es un delito menor según la ley de California. Pero Garnero añadió que “ese escenario es poco probable ya que Rovito no tiene antecedentes penales”.
Deberá comparecer ante el tribunal el 21 de abril, según Garnero.
"Tenemos que proteger a nuestros hijos"
Victoria Rovito solicitó, y le fue concedida, una orden de alejamiento temporal contra su marido al día siguiente de su detención, según consta en documentos judiciales.
Está centrada en reconstruir el futuro de su familia: “Siento que nos han destrozado la vida”, aseguró.
Una campaña de GoFundMe, plataforma de financiación colectiva, creada por una amiga indica que el dinero recaudado se destinará a gastos de manutención y honorarios legales: “Por hacer lo correcto, al final se ha quedado con muchas necesidades”, expone.
Mientras tanto, Rovito espera que, al compartir su historia, pueda mostrar a otros cómo proteger a sus hijos en casos de abuso sexual infantil.
“Una vez que me di cuenta de lo que estaba pasando, no quise que le ocurriera a nadie más, y ése fue el factor que me impulsó”, contó.
Víctimas jóvenes
Alrededor del 25% de las niñas y uno de cada 13 niños estadounidenses sufren abusos sexuales, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés). En más del 90% de los casos, los agresores son conocidos y gozan de la confianza de los niños y sus familias, según datos del mismo organismo.
“Puede tratarse de un miembro de la familia, de la familia ampliada, de un entrenador o de un médico, alguien que no levante sospechas por estar cerca del niño”, indicó Scott Berkowitz, presidente y fundador de la Red Nacional contra la Violación, el Abuso y el Incesto, una organización contra la violencia sexual más conocida como RAINN.
Berkowitz señaló que es crucial enseñar a los niños a alertar a los adultos de confianza si sufren abusos sexuales. Los adultos deben adoptar un enfoque de “seguridad ante todo”, alejando a los menores de la proximidad de los agresores, prestando atención a sus necesidades psicológicas y alertando a las autoridades pertinentes si existe esa opción.
Victoria Rovito está de acuerdo: “Tenemos que proteger a nuestros hijos. No pueden protegerse a sí mismos”, afirmó.
Si usted o alguien que conoce ha sido agredido sexualmente, llame a la Línea Nacional de Denuncia de Agresiones Sexuales al 1-800-656-4673. Esta línea, gestionada por la Red Nacional contra la Violación, el Abuso y el Incesto (RAINN), puede ponerle en contacto con el centro local de crisis por violación. También puedes acceder al servicio de chat en línea de RAINN en https://www.rainn.org/get-help. Los chats confidenciales están disponibles en inglés y en español.