El boxeador Félix Verdejo, que se entregó este domingo a las autoridades puertorriqueñas tras la muerte de su amante, Keishla Rodríguez, permanecerá preso y sin fianza, según decidió la jueza Camille Vélez Rivé.
"Debido a la naturaleza y las circunstancias que rodean este caso, señor Verdejo, usted permanecerá detenido sin fianza", le indicó la magistrada al hombre, de 27 años, que compareció este lunes de manera virtual desde la cárcel federal de Guaynabo.
Verdejo se enfrenta a cargos por el presunto secuestro que resultó en la muerte de la joven, carjacking [incautación ilegal de un automóvil] con el mismo desenlace, y de matar intencionalmente a un menor por nacer, puesto que Rodríguez estaba embarazada. Según le explicó este lunes la jueza, puede recibir una condena máxima de cadena perpetua o incluso pena de muerte.
Verdejo, apodado El Diamante, se entregó a agentes federales el domingo en la noche para enfrentar cargos apenas horas después que las autoridades confirmaron que el cadáver de la mujer de 27 años hallada en una laguna correspondía a Rodríguez.
Una denuncia penal presentada por el FBI acusa a Verdejo de golpear a Keishla Rodríguez en el rostro e inyectarla con una jeringa con una sustancia no identificada adquirida en un complejo público de viviendas.
La acusación señala que posteriormente Verdejo ató a la víctima de pies y manos y le amarró un bloque pesado antes de arrojarla hacia una laguna de la capital de la isla desde un puente el jueves a las 8:30 de la mañana. Después el boxeador le disparó al cuerpo desde el puente, según la denuncia.
El documento asegura que un testigo, el cual no fue identificado, ayudó a Verdejo a secuestrar y asesinar a Rodríguez.
El cuerpo de la mujer fue hallado el sábado en la laguna, un par de días después que se reportara su desaparición. La víctima fue identificada el domingo gracias a sus registros dentales, informó el Instituto de Ciencias Forenses de Puerto Rico.
Verdejo y sus abogados se negaron previamente a comentar, y la policía señaló que en un principio el boxeador se negó a cooperar y a responder preguntas.
La familia de Rodríguez indicó que ella estaba esperando un hijo de Verdejo. Keila Ortiz, madre de la víctima, dijo a los reporteros que su hija le había llamado por teléfono antes de su desaparición el jueves y le dijo que Verdejo iba a ir a su casa para ver los resultados de una prueba de embarazo.
"Yo le dije: 'Ten cuidado'. Porque él ya la había amenazado de que no lo tuviera", ya que ello, dijo, afectaría su carrera y a su familia, sostuvo Ortiz Rivera en entrevista con Wapa Televisión.
Verdejo está casado pero conocía a Rodríguez desde la escuela secundaria y habían permanecido en contacto, según dijeron los padres de la víctima. Reportaron su desaparición después que no se presentara a su trabajo en una clínica veterinaria.
Verdejo (27-2, 17 nocauts) representó a Puerto Rico en los Juegos Olímpicos de 2012, el mismo año en que pasó a ser profesional en la división de peso ligero. Su carrera se vio afectada temporalmente luego de sufrir un accidente de motocicleta en 2016 que lo mandó al hospital.
Este feminicidio ha generado indignación en Puerto Rico, donde recientemente se encontró el cuerpo calcinado de otra mujer tras presentar una denuncia por violencia doméstica que fue desestimada por un juez. Un magistrado de la Corte Suprema anunció una investigación de ese fallo.
Cientos de personas se reunieron el domingo en un puente que atraviesa la laguna en que se encontró el cuerpo de Rodríguez para exigir justicia para ella y otras mujeres asesinadas. Algunos de los asistentes arrojaron flores al agua.
El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, dijo este domingo que reitera su "compromiso con la lucha contra la violencia de género y con continuar poniendo la acción y los recursos donde está la palabra", a la vez que reveló que la Junta de Supervisión Fiscal redujo la asignación para la lucha contra la violencia contra mujeres.
"Es crucial que mantengamos este nivel actual de atención al crimen de violencia de género que tanta pérdida, consternación y angustia le trae a nuestra sociedad. No debe caber duda de que estamos en un estado de emergencia por violencia de género", indicó en un comunicado.
Con información de Efe, AP y El Nuevo Día.