Por Rose Horowitch - NBC News
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó una ley el lunes que permite la pena de muerte para los violadores de niños, lo que podría provocar una potencial batalla legal en la Corte Suprema del país.
La medida, que se convertirá en ley el 1 de octubre, convierte en un delito capital la agresión sexual contra un menor de menos de 12 años.
DeSantis, un probable candidato republicano para las elecciones de 2024, ha tratado de enviar un mensaje de ley y orden mientras trata de llevar las políticas de Florida a una audiencia nacional. En una declaración para anunciar la firma de la medida, DeSantis tocó sus "políticas de ser duro con el delito".
"Creemos que en el peor de los peores casos, el único castigo apropiado es el máximo castigo", indicó DeSantis en una conferencia de prensa en Titusville, el lunes, desde un podio que llevaba el lema "ley y orden".
La legislación, que pasó con abrumador apoyo en la Cámara de Florida y el Senado, es el segundo cambio a la pena de muerte en el estado en meses recientes. En abril, DeSantis firmó una ley que redujo el número de jurados necesarios para recomendar la pena de muerte de 12 a ocho.
La ley firmada el lunes va en contra de una decisión de Corte Suprema de 2008, que impide que los estados impongan la pena de muerte por violación de un menor si la víctima no muere. En ese momento, una coalición de trabajadores sociales y organizaciones que se se oponen a la violencia sexual apoyaron el fallo de la corte, y argumentaron que convertir el abuso sexual de niños un delito capital iba a dejar a las víctimas más renuentes de nombrar a sus victimarios e incrementar los incentivos para los que violadores de niños mataran a sus víctimas.
En una declaración, DeSantis dijo que está preparado "para llevar esta ley hasta la Corte Suprema de Estados Unidos", y acusó a los precedentes judiciales de "injustamente" proteger a los violadores de niños contra la pena de muerte.