Por Mirna Alsharif — NBC News
Un adolescente de 14 años recibió el domingo un balazo mortal en la espalda disparado presuntamente por el dueño de una tienda en Carolina del Sur que le acusó falsamente de robar y salió armado en su busca, según denunció el sheriff del condado de Richland, Leon Lott. “No robó nada en una tienda”, dijo, "no hay ninguna prueba".
Rick Chow, de 58 años, fue detenido el lunes y acusado de asesinato por la muerte de Cyrus Carmack-Belton. El joven entró en su tienda de conveniencia en Columbia alrededor de las 8 de la tarde. En un momento dado, el dueño y su hijo empezaron a discutir con el adolescente, agregó el sheriff, que no explicó el motivo; después, Carmack-Belton salió de la tienda y echó a correr.
El propietario, armado con una pistola, y su hijo persiguieron al joven hasta un complejo de apartamentos cercano, dijo Lott.
El hijo de Chow dijo que Carmack-Belton tenía un arma, y fue entonces cuando su padre le disparó por la espalda, dijo el sheriff.
La policía halló una pistola junto al cuerpo del joven, pero el sheriff dijo que no había pruebas de que apuntara contra Chow o su hijo.
La bala causó hemorragia y daños significativos en el corazón de Carmack-Belton, dijo la forense del condado de Richland, Naida Rutherford. Fue llevado a un hospital, donde fue declarado muerto.
“No tiene sentido”, dijo el sheriff, “hay una familia de luto, una comunidad de luto por un niño de 14 años que fue baleado”.
El sheriff agregó que, incluso si Carmack-Belton hubiera robado algo de la tienda, eso no había justificado que lo balearan.
La investigación determinó que el tiroteo “no fue motivado por prejuicios” raciales, según un informe del departamento del sheriff. Carmack-Belton era negro. Chow y su hijo son asiáticos.
Según un informe policial, el lunes se congregó una multitud en el exterior de la tienda para protestar. A las 9:43 de la noche irrumpieron con violencia varias personas y se llevaron artículos de las estanterías.
Las imágenes de los daños muestran el nombre de Carmack-Belton pintado con spray en la tienda, así como cristales rotos y basura. En el exterior de la tienda se habían pegado carteles en los que se leía “Ningún niño merece morir por culpa del agua” y “CIÉRRENLA”.
En el interior, los bastidores fueron derribados. Chow estaba bajo custodia el martes en el Centro de Detención Alvin S. Glenn, según el Departamento del Sheriff. Un abogado de Chow no respondió inmediatamente a las solicitudes de comentarios.