El presidente, Donald Trump, se reunió este jueves en la Casa Blanca, en Washington D.C., con familiares de la soldado Vanessa Guillén, quien según las autoridades fue brutalmente asesinada dentro de la base militar de Fort Hood, Texas, el 23 de abril.
"No queríamos que este caso fuera ignorado, lo que puede pasar", dijo Trump, quien describió a la soldado como una "persona espectacular", "amada y respetada por todos".
Los familiares de la soldado latina de 20 años solicitaron la intervención del presidente para ayudar a esclarecer el asesinato e impulsar una ley que proteja a las víctimas de acoso sexual dentro del Ejército, además de exigir el cierre de la cuestionada base militar de la que desapareció la joven el pasado 22 de abril.
“Es una historia increíble. Una historia terrible”, dijo Trump a los familiares de Vanessa en la Oficina Oval. En el encuentro estuvieron presentes sus hermanas Mayra y Guadalupe, y la abogada de la familia, Natalie Khawam.

“Vamos a investigarlo con mucho poder. Ya hemos comenzado, como ustedes saben, y vamos a llegar al fondo del asunto. Tal vez las cosas resulten de modo que se pueda ayudar a otras personas en una situación similar a la de Vanessa. Estaremos constantemente en contacto con ustedes”, prometió.
La madre de Vanessa, Gloria Guillén, ha denunciado en repetidas ocasiones que su hija era víctima de acoso sexual por parte de uno de los soldados de Fort Hood. La abogada de la familia asegura que no presentó una denuncia formal contra esa persona por temor a represalias.
Vanessa había reportado un incidente de acoso sexual anteriormente, pero en esa ocasión el Ejército desestimó el caso alegando que no había pruebas suficientes. Ahora, el secretario del Ejército Ryan McCarthy ha ordenado que se investigue el ambiente en la cadena de mando en la base militar.
"Yo quiero que usted me ayude a que se haga justicia con mi niña", le dijo Gloria Guillén a Trump. "Yo sé que usted tiene hijos y que sabe lo que es amar a un hijo".
Trump informó a la familia que ha ordenado la intervención del FBI y del Departamento de Justicia. También aseguró que “la gente de Fort Hood, donde sucedió (el asesinato), están muy involucrados”.
“Miren, lo bueno es que él se ha ido. Digo, en lo que a mí respecta, lo bueno es que se ha ido. Ahora, vamos a investigar qué sucedió”, dijo el presidente, en referencia al soldado Aaron David Robinson, quienes las autoridades señalan como el sospechoso de golpear a la joven latina con un martillo hasta matarla.
Pero la madre de Vanessa ha sido enfática en que su búsqueda de justicia va más allá de Robinson, quien se suicidó en su casa el 1 de julio, antes de que los investigadores pudieran interrogarlo.
“Si el presidente de la nación quiere hacer historia junto con mi hija, entonces van a pasar estas tres cosas que estoy pidiendo”, dijo Gloria Guillén durante un emotivo discurso en Washington D.C., antes de la reunión con Trump. “Que me entregue a los responsables, que cierre esa base del demonio y que pase el Bill (la ley) y se limpie toda la maldita corrupción que existe en el Ejército.”
La familia está impulsando un proyecto de ley, conocido como #YoSoyVanessaGuillen, para que las denuncias de acoso y agresión sexual en el Ejército no tengan que pasar por la cadena de mando dentro del Ejército, sino que sean investigadas por una institución independiente, según ha explicado la abogada Khawam, quien ayudó a redactar la propuesta.
Los legisladores Markwayne Mullin, republicano por Oklahoma, y Tulsi Gabbard, demócrata por Hawai, patrocinan este proyecto de ley, que se originó tras un movimiento en redes sociales en contra del abuso sexual en el Ejército.
La jurista dijo al presidente durante la reunión que no existen suficientes protecciones para las víctimas de abuso sexual en el Ejército, pues persiste el temor a represalias.
Cuando se le preguntó si apoyaría la ley que está impulsando la familia, el mandatario respondió: “Vamos a evaluar eso con mucha fuerza”.
Vanessa Guillén no ha tenido un funeral porque sus familiares todavía están esperando que les entreguen sus restos, le dijo Khawam a Trump, quien se ofreció a pagar los gastos del servicio de despedida.
[Honores militares para la soldado Vanessa Guillén en la base donde fue brutalmente asesinada]
“Si puedo ayudarlos con el funeral financieramente, los ayudaré. Los ayudaré”, ofreció el mandatario.

Hasta el momento, las autoridades solo han detenido a una persona en conexión con el asesinato de Vanessa. Se trata de Cecily Ann Aguilar, de 22 años, y expareja del sospechoso principal Robinson. Está acusada de conspirar para manipular evidencia.
La investigación asegura que Aguilar colaboró con el soldado, desmembrando el cadáver con un arma parecida a un machete y enterrándolo en tres agujeros separados junto al río León, en las cercanías de Fort Hood.
Si es hallada culpable, Aguilar enfrenta una condena de hasta 20 años en prisión y una multa de hasta 250,000 dólares.