Por Erik Ortiz - NBC News
Abigail Zwerner, la maestra de Virginia que fue seriamente herida cuando, según la policía, un estudiante de 6 años le disparó intencionalmente durante una clase, confesó que su recuperación ha sido agotadora.
Zwerner, quien habló por primera vez públicamente durante una entrevista que será transmitida en el programa TODAY, dijo que enfrenta "obstáculos y retos" después de las múltiples operaciones tras recibir disparos en su mano izquierda y la parte superior del pecho. Las citas para su terapia la han dejado física y mentalmente exhausta, confesó a Savannah Guthrie, copresentadora de TODAY.
"Algunos días no son tan buenos y no puedo salir de la cama. Otros son mejores, cuando puedo levantarme e ir a las citas", explicó Zwerner, de 25 años, quien tiene la mano izquierda vendada después de una cuarta operación para reparar un hueso severamente dañado.
Las cicatrices físicas están sanando, indicó, incluyendo una herida en el lado de su cuerpo donde los doctores insertaron un tubo, porque su pulmón había colapsado.
Cuatro cirugías en una mano
Zwerner ha tenido cuatro operaciones en su mano izquierda.
"Pero, tras haber pasado por lo que he pasado, trato de estar optimista", dijo la maestra de primer grado en la Escuela Primaria Richneck, en Newport News. "Trato de tener una actitud positiva sobre lo que pasó y hacia dónde mi futuro se encamina".
La maestra ha sido elogiada por la manera en que enfrentó los disparos, tras los cuales escoltó a sus 20 estudiantes hacia un lugar seguro. La educadora estuvo hospitalizada por dos semanas.
Zwerner explicó en la entrevista el lunes que todavía no ha recuperado todas las funciones en su mano izquierda, lo que hace las tareas más simples, como cerrar el puño, abrir una botella de agua o vestirse, extremadamente difíciles. Comentó que los doctores todavía no están seguros si podrá usar su mano del todo nuevamente.
"La terapia física no es solo físicamente agotadora sino también mentalmente extenuante. Se supone que esté moviendo los dedos cada hora, durante una hora", explicó. "Debo moverlos para que la sangre fluya y recupere el movimiento de la mano".
Una posibe demanda
El tiroteo del 6 de enero provocó preocupación por posibles fallas de seguridad en la escuela, que incluye los grados de preescolar a quinto, y se encuentra en un distrito educacional marcado por otros incidentes de violencia con armas de fuego en colegios durante los pasados 18 meses.
La firma de abogados que representa a Zwerner planea presentar una demanda en dos semanas en relación con el caso.
"Les puedo decir que hubo fallas en múltiples niveles en este caso, y hubo adultos en posiciones de autoridad que pudieron haber prevenido esta tragedia y no lo hicieron", afirmó su abogada Diane Toscano.
Toscano comentó que el niño que disparó contra Zwerner había tenido un patrón de problemas de conducta en su interacción con el personal de la escuela y otros estudiantes.
"Hubo fallas en múltiples niveles en este caso, y hubo adultos en posiciones de autoridad que pudieron haber prevenido esta tragedia"
De acuerdo con un aviso anunciando la futura demanda, entregado al consejo escolar de Newport News el 24 de enero, el menor fue suspendido un día de escuela por romper el teléfono móvil de Zwerner. Retornó al día siguiente con una pistola Taurus 9mm con la que disparó contra la maestra en la clase, mientras esta se encontraba en una mesa de lectura.
Tres maestros habían acudido a la administración de la escuela para hablar sobre el comportamiento del niño y sus sospechas de que tenía un arma, añadió Toscano.
Una fuente cercana al caso le informó a NBC News que Zwerner le había enviado un texto a un ser querido antes del incidente en el que le decía que el niño estaba armado y que el personal de la escuela no hacía nada.
La familia del alumno
Después del incidente, la familia del menor indicó en una declaración que el arma estaba "segura" en la casa y que "siempre habían estado comprometidos con la tenencia responsable de armas y su mantenimiento lejos de las manos de los niños".
La familia también indicó que el niño tenía una discapacidad severa y, después de tiroteo, estaba recibiendo, por orden de la corte, el "tratamiento que necesita" en un centro médico de detención para menores.
La policía indicó que la madre del niño compró el arma legalmente, pero no ha especificado cómo el niño tuvo acceso a ella o si estaba guardada de manera segura, como la familia afirma.
Howard Gwynn, el fiscal local, dijo a NBC News este mes que aunque el niño puede ser desde el punto de vista teórico acusado criminalmente bajo la ley de Virginia, no presentará cargos contra el menor.
"Nuestro objetivo no es solamente hacer esto tan rápido como sea posible", explicó Gwynn. "Cuando analicemos todos los hechos, acusaremos a la persona o personas que creamos, más allá de toda duda, que cometieron un delito".
James Ellenson, un abogado de la familia, afirmó en un email el lunes que "daban la bienvenida a la decisión del fiscal y continuaban rezando por la recuperación completa de Zwerner".
Un pico de violencia armada en escuelas
La violencia con armas de fuego en las escuelas ha aumentado en Estados Unidos y llegó a su cifra más alta en dos décadas durante el año escolar 2020-2021, de acuerdo con un reporte federal de junio de 2022. Aún así, es poco común que un menor sea el atacante en esos casos.
"Este es el tiroteo número 17 en una escuela provocado por alguien menor de 10 años", señaló David Riedman, fundador de la Base de Datos de Tiroteos en las Escuelas K-12, que analiza los actos violentos con armas de fuego en los recintos estudiantiles desde 1970.
"Es raro que un menor de 6 años sea el que hale el gatillo", amplió Riedman, quien hizo los comentarios a NBC News después del ataque de enero.