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Una enfermera embarazada sin vacunar rezó por un milagro tras enfermar de COVID-19. Este fue su último mensaje antes de morir

Haley Richardson renunció a inmunizarse porque estaba preocupada por cómo afectaría a su bebé, pero lo realmente peligroso es el coronavirus, advierten los médicos. En su último mensaje, la mujer apeló al “Dios de los milagros”.
/ Source: Telemundo

Por Minyvonne Burke - NBC News

Una enfermera embarazada quiso esperar a vacunarse contra el COVID-19 porque le preocupaba cómo afectaría a su bebé. Ahora, su marido está tratando de generar conciencia en la población después de que el coronavirus se cobrara la vida de su esposa y de la niña que llevaba en su vientre.

"No es fácil", dijo Jordan Richardson a la estación WKRG de Mobile, Alabama. "Ella sencillamente amaba a todo el mundo", expresó.

Haley Mulkey Richardson, de Theodore, en Alabama, murió a causa del coronavirus el 20 de agosto, dos días después de que falleciera su beba.

 

 

Jordan Richardson dijo que la niña debía nacer en noviembre y que planeaban llamarla Ryleigh Beth. Su hija mayor, Katie, tiene 2 años.

"Estaba entusiasmado. Ya tengo una niña y todo el mundo me preguntaba cuando intentábamos tener otro hijo: '¿Quieres un niño? ¿Quieres un niño?' Y yo les dije: 'No, quiero otra niña", explicó. "La quiero muchísimo y me emocioné mucho cuando supe que era lo que íbamos a tener", contó. 

Haley Richardson, de 32 años, contrajo el virus a finales de julio y fue hospitalizada a principios de agosto cuando sus síntomas empezaron a empeorar, dijo su marido. Al final, debió ser ingresada en la unidad de cuidados intensivos, donde falleció.

 

 

El hombre dijo que su esposa quería esperar para vacunarse contra el coronavirus porque no estaba segura de cómo afectaría a su embarazo.

"Nos preocupaba que pudiera haber complicaciones por eso para tener un bebé y una vez que ella quedara embarazada, por lo que no se vacunó”, explicó.

Poco antes de su muerte, la mujer publicó un mensaje en la red social Facebook sobre su hija por nacer y dijo que rezaba por un milagro.

 

La enfermera embarazada Haley Mulkey Richardson y su beba por nacer murieron debido a complicaciones causadas por el COVID-19.
La enfermera embarazada Haley Mulkey Richardson y su beba por nacer murieron debido a complicaciones causadas por el COVID-19. Via GoFundMe / _

 

"Aquí, en la oscuridad, a altas horas de la madrugada, es tan fácil pretender que todo esto fue sólo una pesadilla o que sólo estoy aquí en esta cama en un hospital debido a mis propios problemas con el coronavirus. Y no porque algo está mal con mi dulce niña a quien creía estaba protegiendo en mi propio vientre", escribió.

"Conozco el pronóstico y conozco la realidad. Y aunque una parte de mí empiece a tomar conciencia de lo que está pasando, otra sigue creyendo que Dios sigue siendo el Dios de los milagros y que tiene el control por encima de todo. Espero y rezo por los milagros, pero dicho esto también rezo para que se haga su voluntad. Si alguna vez ha habido un momento para pedir que algo ya no esté en mis manos y quede en cambio en las suyas, es ahora", dijo. 

A principios de este mes, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) instaron a todas las embarazadas a vacunarse, ya que en los hospitales de los puntos más críticos de contagio de Estados Unidos se observó un número preocupante de futuras madres no vacunadas gravemente enfermas de COVID-19.

[Un doctor detalla por qué están recomendando tanto que las embarazadas se vacunen]

 

 

Según datos de los CDC, las embarazadas que no se han vacunado corren un mayor riesgo de enfermar gravemente de coronavirus y tener complicaciones en el embarazo.

“Las vacunas son seguras y eficaces, y nunca ha sido más urgente aumentar el número de personas vacunadas, ya que nos enfrentamos a la variante delta, altamente contagiosa, y vemos los graves efectos del COVID-19 entre las personas embarazadas no vacunadas", dijo Rochelle Walensky, directora de los CDC, en un comunicado.

Richardson, por su parte, indicó que si su esposa hubiera sabido del trágico final posible, habría "defendido" la vacuna.