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Fallece un voluntario de la vacuna de AstraZeneca y Oxford contra el coronavirus por causas que aún se investigan

No está claro que exista un vínculo entre su muerte y el fármaco, que se encuentra en la etapa final. En Estados Unidos, reportes indican que los estudios serán reanudados luego de que la FDA los pausara por otro incidente.

Un voluntario en las pruebas de la vacuna contra el coronavirus de AstraZeneca y la Universidad de Oxford falleció en Brasil, aunque aún no queda claro aún si la muerte está relacionada con el proceso de desarrollo del medicamento.

La agencia de vigilancia sanitaria de Brasil, Anvisa, dijo en un comunicado que el deceso sucedió el 19 de octubre y que se realizará una investigación.

Hasta el momento se desconoce si el voluntario de las pruebas tuvo alguna reacción adversa a la vacuna o si el fallecimiento fue por otra causa. Puede que la persona incluso haya estado recibiendo un placebo, usado en pruebas clínicas para contrastar los resultados de quienes sí están siendo inyectados con la fórmula.

Bloomberg reporta que una fuente que conoce el caso dice que el fallecimiento no se debió a la vacuna en sí.

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"Con base en regulaciones nacionales e internacionales, los datos sobre los voluntarios de pruebas clínicas deben ser mantenidos en secreto por principios de confidencialidad, dignidad humana y protección de los participantes", señaló Anvisa.

La agencia brasileña recalcó que el Comité Internacional de Evaluación y Seguridad, que monitorea los estudios sobre vacunas en todo el mundo, "sugirió continuar con las pruebas" en Brasil, en lo que se determina si hay vínculo entre la muerte y la inyección.

Ilustración fotográfica del proceso para desarrollar una vacuna contra el coronavirus.
Ilustración fotográfica del proceso para desarrollar una vacuna contra el coronavirus.Reuters /

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La vacuna de AstraZeneca y la Universidad de Oxford es de las pocas que están en una etapa muy avanzada de desarrollo: las pruebas están en fase 3, que consta de inyectarla a miles de personas para estudiar efectos adversos.

Algunas vacunas ya aprobadas para su uso en ciertos países, como dos inoculaciones desarrolladas en Rusia, fueron avaladas sin contar con esa fase de análisis.

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Hace unas semanas, las pruebas clínicas de AstraZeneca y Oxford fueron puestas en pausa en todo el mundo cuando otro voluntario, en los estudios realizados en el Reino Unido, desarrolló lesiones tipo mielitis transversa, que surgen cuando hay inflamación en la médula espinal.

La autoridad sanitaria europea después indicó que era seguro retomar los estudios, que reanudaron en el Reino Unido y en Brasil. Sin embargo, en Estados Unidos continúan en pausa las pruebas de esa vacuna contra el COVID-19, aunque reportes indican que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, en inglés) ya dio el visto bueno para que reinicien.

Una fuente de la agencia de noticias Reuters con conocimiento del tema que habló bajo la condición del anonimato confirmó que las autoridades estadounidenses permitirían que los estudios continuaran, después de evaluar la lesión del participante.

Expertos que lideran el desarrollo de la vacuna de Oxford y AstraZeneca anunciaron este martes que se reanudarán los estudios en Estados Unidos “dentro de muy poco”, probablemente esta semana.

Una de las doctoras que dirige los estudios, Ann Falsey, experta en enfermedades contagiosas de la Escuela de Medicina de la Universidad de Rochester, dijo que la FDA y la junta médica que supervisa la seguridad del medicamento están en pláticas para reanudar las pruebas.

Con información de NBC News, Bloomberg, Folha de São Paulo, Politico y Reuters