Medio centenar de asociaciones de profesionales de la salud, que representan a millones de trabajadores, pidieron este lunes que la vacunación contra el coronavirus sea obligatoria para médicos y enfermeros.
La ciudad de Nueva York así lo ordenó la semana pasada, y este lunes amplió el mandato a todos sus empleados municipales. California lo ha ordenado a sus empleados estatales y los profesionales sanitarios este lunes, y el Departamento de Asuntos de Veteranos también a sus empleados de salud, pese a que la Casa Blanca sembró dudas sobre la legalidad de un mandato similar a nivel federal.
"Debido al reciente aumento del COVID-19 y a la disponibilidad de vacunas seguras y efectivas, nuestras organizaciones y sociedades de atención médica abogan por que todos los empleadores médicos y de atención a largo plazo exijan que sus trabajadores reciban la vacuna contra el COVID-19", escribieron los grupos sanitarios en un comunicado conjunto.
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Entre los que firman está la Asociación Médica Nacional Hispana (NHMA por sus siglas en inglés), la Asociación Médica Nacional, y la Academia Americana de Pediatras, entre más de 50 organizaciones.
"Es el cumplimiento lógico del compromiso ético de todos los trabajadores de la salud de poner primero a los pacientes, así como a los residentes de los centros de atención a largo plazo, y tomar todas las medidas necesarias para garantizar su salud y bienestar", dicen en la carta.
Comienza en Nueva York
La ciudad de Nueva York anunció este lunes que requerirá a todos sus trabajadores municipales que estén vacunados o se tomen pruebas semanales de COVID-19 a partir de mediados de septiembre.
El alcalde, Bill de Blasio, anunció la semana pasada esta medida para los trabajadores de salud, pero ahora la ha extendido al resto de empleados de la ciudad debido al aumento de contagios por la variante delta.

El número de vacunas que se administran a diario en la ciudad se ha reducido a menos de 18,000, desde un pico de más de 100,000 a principios de abril, según reporta la agencia de noticias The Associated Press. Aproximadamente el 65% de los adultos de la ciudad están completamente vacunados.
El primer departamento federal exige vacunas a sus empleados de salud
El Departamento de Veteranos emitió además un mandato de vacunación para los trabajadores de la salud, una rareza para un departamento federal, según reporta el diario The New York Times.
Estos trabajadores que brindan atención directa al paciente tienen ocho semanas para vacunarse contra el coronavirus o enfrentarían sanciones, incluyendo ser posiblemente despedidos.
Debido a la rápida propagación de la variante delta, altamente contagiosa, y a que hay aún un número significativo de personas no vacunadas, los nuevos casos de COVID-19, las hospitalizaciones y las muertes están aumentando una vez más en todo Estados Unidos.
Sigue California
A Nueva York lo sigue de cerca, al otro lado del país, California, donde los empleados estatales y sanitarios pronto deberán mostrar pruebas de que han sido vacunados, y los que no deberán someteres a pruebas con regularidad, anunciaron las autoridades el lunes según reporta el diario Los Angeles Times.
La nueva guía no es un mandato, como los que se han anunciado para los trabajadores municipales en algunas áreas del estado, pero elimina efectivamente el “sistema de honor”, en el que los empleados daban simplemente su palabra de que estaban vacunados.
Los empleados estatales que no estén vacunados o que se nieguen a proporcionar una prueba de vacunación recibirán pruebas de diágnostico al menos una vez a la semana, según el Departamento de Recursos Humanos de California.
Los trabajadores de salud que aún no se vacunan
La carta asegura que la vacunación es la manera principal de superar la pandemia y evitar el regreso de medidas estrictas como las cuarentenas y confinamientos.
Sólo el 49% de la población se ha vacunado completamente contra el coronavirus, según los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), y muchos trabajadores de la salud siguen sin inmunizarse pese a que han tenido acceso prioritario a las vacunas desde que están disponibles en diciembre.
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Más del 38% del personal de los asilos de ancianos no estaba completamente vacunado al 11 de julio, a pesar de atender a pacientes con alto riesgo de contraer el virus, reporta el diario The Washington Post según datos recopilados por los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid y analizados por LeadingAge, que representa a proveedores de cuidado de ancianos.
Un análisis de la página WebMD y Medscape Medical News estimó que alrededor del 25% de los trabajadores en hospitales que tuvieron contacto con pacientes no se habían vacunado, según cifras de finales de mayo.
El comunicado conjunto indica que requerir que los trabajadores sanitarios se vacunen “es especialmente necesario para proteger a las personas vulnerables, incluidos los niños no vacunados y los inmunodeprimidos”.
Los firmantes reconocen que “algunos trabajadores no pueden ser vacunados por razones médicas identificadas y deberían estar exentos de un mandato”, pero añaden que “constituyen una pequeña minoría de todos los trabajadores”.
Con información de The Washington Post y NBC News.