Por Patrick Smith — NBC News
Rusia afirmó este jueves que Estados Unidos estaba detrás de un supuesto ataque con drones contra el Kremlin que, según dijo, era un intento ucraniano de asesinar al líder ruso, Vladimir Putin.
La acusación, hecha sin citar pruebas, se produce menos de 24 horas después de que Moscú dijera que había frustrado un ataque nocturno con drones contra el edificio que actúa como corazón del gobierno del país y residencia de Putin, algo que Kiev negó rotundamente.
Tres funcionarios estadounidenses declararon el miércoles a NBC News que Estados Unidos no tenía conocimiento previo de ningún ataque. Pero el jueves, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, fue más allá y afirmó que Washington había sido el autor intelectual del incidente.
“Somos muy conscientes de que las decisiones sobre este nivel de ataques terroristas no se toman en Kiev, sino en Washington”, declaró en su sesión informativa diaria con los periodistas. “Kiev sólo hace lo que se le dice que haga”, añadió.
Peskov tachó de “absolutamente ridículos” los intentos estadounidenses y ucranianos de “desautorizar” el incidente del dron”.
Una investigación rusa sobre el incidente está en curso, aseguró, y añadió que hay “múltiples opciones de respuesta” que el país podría tomar, sin especificar cuáles son. El Consejo de Seguridad de Rusia, presidido por Putin, tiene previsto reunirse el viernes.
"No estamos atacando a Putin"
“Estamos luchando en nuestro propio territorio, defendiendo nuestros pueblos y ciudades”, declaró el miércoles el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, en una conferencia de prensa en Finlandia. “No tenemos armas suficientes ni siquiera para esto. Por eso no las utilizamos en otros lugares. Tenemos un déficit. No podemos utilizarlo todo y en todas partes”, agregó.
“No estamos atacando a Putin ni a Moscú”, enfatizó.
Rusia ha acusado con frecuencia a Estados Unidos de tomar decisiones clave para Ucrania durante la guerra. Putin, sus funcionarios y los medios de comunicación estatales han dicho en repetidas ocasiones que Rusia está en guerra con toda la alianza de la OTAN. La expansión de la OTAN en Europa central y oriental fue uno de los pretextos para la invasión rusa.
Estados Unidos ha proporcionado a Ucrania más de 77,000 millones de dólares en ayuda militar y humanitaria, pero ha tratado de garantizar que sus armas no se utilizaran en ataques en suelo ruso.
Washington anunció el miércoles otros 2,600 millones de dólares en financiación, incluidos 500 millones en armamento para el campo de batalla, como artillería, munición para tanques, morteros, cohetes y camiones cisterna de combustible.
La noticia se produce en vísperas de una contraofensiva ucraniana en la que el Ejército de Kiev tratará de recuperar los territorios capturados por las fuerzas rusas. Una oleada de incidentes recientes ha provocado explosiones en lugares de ambos países, mientras las dos partes parecen preparar el terreno para la lucha que se avecina.