Por Matthew Daly - The Associated Press
El Gobierno de Joe Biden presentó este lunes un paquete de medidas para mitigar los efectos del calor extremo, luego de un verano sofocante plagado por la sequía y los incendios forestales.
Los departamentos de Trabajo y de Salud, junto con otras agencias federales, han preparado medidas para reducir los padecimientos por las altas temperaturas y para salvaguardar la salud pública.
“Mucha gente ni se entera de que el calor extremo es una amenaza real hasta que es demasiado tarde”
Gina McCarthy, Asesora de la Casa Blanca
Gina McCarthy, asesora presidencial para temas climáticos, calificó el calor extremo de “asesino sigiloso” que afecta de forma desproporcionada a los pobres, los ancianos y a los miembros de minorías étnicas. Si bien no es un fenómeno tan visible como un incendio forestal o un huracán, “el calor extremo es una amenaza significativa y real que tiene consecuencias letales”, declaró McCarthy.
Como parte de este plan, el Departamento del Trabajo tomará medidas para proteger a personas que trabajan al aire libre, como trabajadores agrícolas, de la construcción y mensajeros, así como los que laboran en espacios cerrados como fábricas, almacenes y cocinas.
Los campesinos y los albañiles son los más vulnerables a la insolación y otras afecciones relacionadas con el calor, indicó la Casa Blanca, aunque otros trabajadores que carecen de maneras de controlar las temperaturas en su ambiente también corren peligro.
“Ocurre demasiado que heridas y problemas de salud provocados por el calor no son reportados, o son clasificados erróneamente, especialmente en sectores que emplean a personas vulnerables o indocumentadas”, expresó la Casa Blanca.
El anuncio surge en momentos en que el presidente, Joe Biden, negocia con líderes mundiales para tomar los próximos pasos contra el cambio climático.
En junio, una ola de calor agravada por el cambio climático golpeó la región noreste de Estados Unidos, causando cientos de muertes y entradas a las salas de emergencia.
En Louisiana, un apagón afectó a más de un millón de personas, incluyendo la ciudad entera de Nueva Orleans, tras el impacto del huracán Ida el 29 de agosto. Por lo menos 12 de las 28 muertes ocasionadas por Ida en Luisiana fueron ocasionadas por las altas temperaturas, según las autoridades locales.