Por Jamie Knodel - NBC News
Varios periodistas de alto perfil que fueron suspendidos de Twitter el jueves por la noche fueron reincorporados a primera hora del sábado.
“El pueblo ha hablado”, tuiteó Elon Musk.
Los usuarios de Twitter votaron en una encuesta publicada por Musk para restablecer las cuentas, que fueron cortadas sin previo aviso. El nuevo propietario de la plataforma de medios sociales ha utilizado recientemente las encuestas de Twitter para varias decisiones de alto perfil, incluida la reincorporación de la cuenta del expresidente Donald Trump.
Las cuentas de Ryan Mac, del diario The New York Times, Donie O’Sullivan, de la cadena CNN, Drew Harwell, del periódico The Washington Post, Matt Binder, de Mashable, Micah Lee, de The Intercept, Steve Herman, de Voice of America, y los periodistas independientes Aaron Rupar, Keith Olbermann y Tony Webster fueron suspendidas el jueves por la noche.
“Matt Binder ha vuelto”, tuiteó el periodista de Mashable a primera hora del sábado.
La cuenta de Olbermann estaba suspendida el sábado por la mañana.
Musk había dicho que las suspensiones durarían siete días, pero a primera hora del sábado dijo que “las cuentas que monitorizaban mi ubicación tendrán su suspensión levantada ahora".
Ha acusado a los periodistas de compartir información privada sobre su paradero, que describió como “básicamente coordenadas de asesinato”. NBC News, cadena hermana de Noticias Telemundo, no pudo verificar esa acusación.
“Si haces doxxing [acto de revelar intencional y públicamente información personal sobre un individuo u organización], te suspenden. Fin de la historia. Eso es todo”, declaró Musk el jueves por la noche en un debate de audio en Twitter Space, explicando su última política a más de 30,000 oyentes.
Se refería al último cambio de normas de Twitter sobre las cuentas que rastrean jets privados, incluida una propiedad de Musk, que se introdujo el miércoles.
Varios de los reporteros suspendidos habían estado escribiendo sobre la nueva política y los motivos de Musk para imponerla, que tenían que ver con sus acusaciones sobre un incidente de acoso que, según dijo, afectó a su familia el martes por la noche en Los Ángeles.
Musk tuiteó el miércoles que el coche en el que viajaba uno de sus hijos fue seguido e impedido el paso por un conductor que, según él, se subió al capó del vehículo en el que viajaba su hijo.
El Departamento de Policía de Los Ángeles dijo el jueves que no se había presentado ningún informe policial. Otros departamentos policiales también cubren partes del área metropolitana de Los Ángeles.
Musk dijo: “Cualquier cuenta que practique doxxing sobre la localización en tiempo real de cualquier persona será suspendida, ya que es una violación de la seguridad física. Esto incluye la publicación de enlaces a sitios con información de ubicación en tiempo real".
“Publicar ubicaciones a las que alguien viajó con un poco de retraso no es un problema de seguridad, así que está bien”, añadió Musk.
Las cuentas que fueron suspendidas, sin embargo, no tuitearon sobre la ubicación en tiempo real del coche en el que Musk dijo que estaba su hijo. Una de las cuentas bloqueadas, “@elonjet”, había tuiteado anteriormente datos de vuelo que mostraban la ubicación del avión privado de Musk. Algunos de los periodistas vetados habían tuiteado previamente enlaces a la cuenta y a otros perfiles gestionados por su creador, Jack Sweeney, cuya cuenta personal de Twitter también fue suspendida.
Los datos de vuelo incluyen dónde aterriza un avión, pero no rastrean a sus ocupantes fuera del propio avión, por lo que no podrían utilizarse para rastrear la ubicación en tiempo real de Musk o sus hijos si no estuvieran a bordo o cerca del avión.
La cuenta de Mastodon, una plataforma que ha surgido como uno de los principales competidores de Twitter, también fue suspendida el jueves, y los enlaces a Mastodon y otras redes autónomas y descentralizadas fueron bloqueados como enlaces “inseguros” que ya no se podían tuitear.
Las suspensiones del jueves fueron duramente criticadas por expertos en libertad de expresión, y los animadores de Musk y algunos influencers conservadores se unieron a la condena de la medida.
Musk se había comprometido a dirigir Twitter como un absolutista de la libertad de expresión, y desde que asumió el control ha restablecido cuentas asociadas con el movimiento QAnon y otros grupos de extrema derecha, pero ha prohibido otras.
También ha expulsado de la empresa a quienes critican sus políticas.