Por Daysia Tolentino - NBC News
Elon Musk ha tenido un fin de semana difícil.
Perdió una encuesta en Twitter en la que consultó si debía seguir siendo consejero delegado de la red social. Se enfrentó al creciente descontento de los accionistas de Tesla. Y consiguió alienar a algunos de sus más fervientes seguidores.
Incluso en medio del difícil comienzo de su mandato como propietario de la compañía, hubo una serie de acontecimientos que destacaron.
“Sigo pensando que Elon es un tipo inteligente”, escribió Paul Graham, un destacado inversor de capital riesgo y fundador de la aceleradora de startups Y Combinator, en un post en Hacker News. “Todavía puede salvar la situación. Es el tipo de persona a la que sería un grave error descartar. Y espero que lo haga. Estaría encantado de volver a usar Twitter con regularidad”, añadió.
Graham fue una de las voces más conocidas y afines a Musk que dijeron que ya estaban hartos en respuesta al anuncio de Twitter de que prohibiría la promoción de cuentas en otras plataformas. Graham, que en general había apoyado la adquisición de Musk, tiene más de 1.6 millones de seguidores en Twitter.
En un tuit en el que anunciaba su marcha, Graham dirigía a sus seguidores a su página web personal para encontrar su perfil de Mastodon. Fue suspendido, pero su cuenta ha sido restablecida.
“Esto se va a poner muy, muy interesante”, tuiteó el inversor tecnológico Alexis Ohanian, cofundador de Reddit, sobre la suspensión de Graham.
Twitter no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
Musk ya había perdido cierto apoyo después de suspender las cuentas de varios periodistas de alto perfil a finales de la semana pasada. La medida provocó críticas generalizadas — incluso de algunos influencers conservadores. Muchas personas de alto perfil ya han abandonado Twitter.
Pero la prohibición de Musk de compartir enlaces y su posterior encuesta en la que se preguntaba si debía dimitir han sido aprovechadas por algunos que le habían dado la bienvenida o habían acariciado la idea de que podría mejorar Twitter.
Jimmy Donaldson, un popular creador de contenido más conocido como MrBeast en YouTube, donde tiene 121 millones de suscriptores, se había comprometido públicamente con Musk sobre ideas para convertir la plataforma en un destino para los creadores.
Pero el domingo por la noche, incluso Donaldson sugería que Musk debería hacerse a un lado. En respuesta a la encuesta de Musk en Twitter sobre si debería dimitir, Donaldson respondió: “Si vas a seguir haciendo cosas como esta, sí”, incluyendo un emoji de vómito y una captura de pantalla de la norma de prohibición de enlaces de Twitter, que ya ha rescindido.
Donaldson no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
Musk reincorporó el sábado a un puñado de periodistas vetados tras realizar una encuesta en Twitter en la que preguntaba a los usuarios si debía mantener la prohibición. Tras las reacciones en contra, la compañía también revocó rápidamente su decisión de prohibir a los usuarios la promoción de enlaces a cuentas de Facebook, Instagram, Mastodon, Truth Social, Tribel, Nostr y Post.
Pero parecía que el daño ya estaba hecho. Aaron Levie, consejero delegado de la empresa de almacenamiento en la nube Box, había calificado de “triste” la prohibición de los enlaces en un tuit.
[El nuevo programa de verificación Twitter será relanzado tras el fiasco del primer intento de Musk]
Levie tuiteó a Musk: “Si los usuarios no saben si va a haber un cambio de política en cualquier momento que pueda poner en riesgo su alcance y audiencia, no confiarán en el servicio para usarlo a escala. Eso es un riesgo enorme a largo plazo”.
Musk tuiteó una disculpa sobre el cambio de política el domingo por la tarde. Escribió: “En el futuro, habrá una votación para los cambios de política importantes. Mis disculpas. No volverá a ocurrir”.
Pero después de todo esto, algunos usuarios se muestran escépticos de que Twitter sea una plataforma en la que quieran permanecer. Los acontecimientos del fin de semana fueron sólo el último de una serie de problemas crecientes que han marcado un tumultuoso mandato para Musk.
Musk cerró el acuerdo de 44,000 millones de dólares para hacerse con Twitter el 27 de octubre. Posteriormente, despidió a parte de la empresa. Con sus cambios de política ha alienado a usuarios marginados y a absolutistas de la libertad de expresión. A medida que las condiciones en Twitter se han ido tensando, los usuarios han buscado alternativas.
Algunos incluso se preguntan si podrían hacerlo mejor.
“¿Debería yo dirigir Twitter?”, escribió Snoop Dogg en una encuesta en Twitter el domingo. Hasta el lunes por la tarde, la respuesta abrumadora era afirmativa.
La cuenta de Twitter de Musk, habitualmente activa, estuvo relativamente tranquila el lunes después de haber tuiteado docenas de veces durante el fin de semana. Entre sus últimos tuits del domingo por la noche había una respuesta a Lex Fridman, un tecnólogo y podcaster que se ofreció a tomar las riendas como consejero delegado de forma gratuita.
Musk respondió con una advertencia: “Te tiene que gustar mucho el dolor. Una pega: tienes que invertir los ahorros de toda tu vida en Twitter y lleva en la vía rápida hacia la quiebra desde mayo. ¿Aún quieres el trabajo?”.