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La ceniza de la erupción del volcán de Tonga sobrevuela países a miles de millas y el tsunami afecta a 80,000 personas

Varias islas siguen incomunicadas mientras aviones de reconocimiento intentan evaluar los daños provocados por la mayor erupción en el Pacífico en décadas.

Australia y Nueva Zelanda enviaron este lunes aviones de vigilancia a Tonga para evaluar los daños provocados por una erupción volcánica que cubrió de ceniza el país y lo aisló del resto del mundo, y provocó un tsunami que llegó hasta la costa de California.

El ministro australiano para el Pacífico, Zed Seselja, aseguró que los informes iniciales sugieren que no hay víctimas por la erupción y el tsunami del sábado, pero que la policía australiana que ha rastreado las playas informó de daños significativos y “casas derrumbadas”.

“Sabemos que hay algunos daños significativos, y sabemos que algunos de estos están en los centros turísticos”, dijo en una entrevista en una emisora de radio local, y agregó que el aeropuerto de Tonga parecía estar en condiciones relativamente buenas.

Los vuelos de vigilancia evalúan la situación en las islas exteriores, donde las comunicaciones están completamente cortadas.

Erupción en el volcán submarino Hunga Tonga-Hunga Ha'apai, frente a Tonga, el 14 de enero de 2022.
Erupción en el volcán submarino Hunga Tonga-Hunga Ha'apai, frente a Tonga, el 14 de enero de 2022. TONGA GEOLOGICAL SERVICES / via REUTERS

El jefe adjunto de la misión de Tonga en Australia, Curtis Tu’ihalangingie, pidió paciencia mientras el Gobierno decide sus prioridades de ayuda.

A la región le preocupa el riesgo de que las entregas de ayuda propaguen el COVID-19 a la isla, que está ahora libre del virus

“No queremos traer otra ola, un tsunami de COVID-10”, dijo a la agencia de noticias Reuters en una llamada telefónica.

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“Cuando la gente ve una explosión tan grande quiere ayudar”, aseguró, pero añadió que los diplomáticos de Tonga también están preocupados por algunos esfuerzos de recaudación de fondos privados e instaron al público a esperar hasta que se anunciara un fondo de ayuda para el desastre.

Cualquier ayuda que se envíe a Tonga tendrá que pasar por un periodo de cuarentena, y es probable que no se permita el desembarco de personal extranjero en los aviones, aseguró.

La erupción del volcán Hunga-Tonga-Hunga-Ha’apai provocó un tsunami en las costas de Tonga y cortó las líneas telefónicas y de Internet de toda la isla.

La comunicación internacional se ha visto gravemente obstaculizada por los daños sufridos por un cable submarino, cuyo restablecimiento podría llevar más de una semana. Australia y Nueva Zelanda  apoyaron la ayuda con las llamadas por satélite.

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Las redes telefónicas de Tonga se han restablecido, pero las cenizas están suponiendo un problema sanitario, al contaminar el agua potable. “La mayoría de la gente no es consciente de que la ceniza es tóxica y tienen que llevar una máscara”, aseguró Tu’ihalangingie.

Hunga Tonga-Hunga Ha'apai underwater volcano eruption
Imagen de la erupción tomada por Himawari-8, un satélite meteorológico japonés operado por la Agencia Meteorológica de JapónNOAA/SSEC/CIMSS / NOAA/SSEC/CIMSS via REUTERS

El complejo turístico de la playa de Ha’atafu, en la península de Hihifo, a 13 millas al oeste de la capital, Nuku’alofa, quedó “completamente aniquilado”, dijeron sus propietarios en Facebook.

La familia que gestiona el complejo turístico había corrido por sus vidas a través de la maleza para escapar del tsunami, dijo. “Toda la costa occidental ha quedado completamente destruida junto con el pueblo de Kanukupolu”, informó el complejo turístico.

Entre los desaparecidos está Angela Glover, una británica que fue arrastrada por una ola cuando ella y su marido, James, propietario del Happy Sailor Tattoo en Nuku’alofa, habían ido a buscar a sus perros.

El marido consiguió agarrarse a un árbol, pero su esposa, que dirige un refugio de rescate de perros, y sus mascotas fueron arrastradas por la corriente, informó la cadena estatal neozelandesa TVNZ.

La Cruz Roja dijo que estaba movilizando su red para responder a lo que considera la peor erupción volcánica en el Pacífico en décadas.

Katie Greenwood, jefa de la delegación del Pacífico de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, dijo a Reuters que hasta 80,000 personas podrían haberse visto afectadas por el tsunami.

Hunga-Tonga-Hunga-Ha’apai ha entrado en erupción regularmente en las últimas décadas, pero el impacto de la erupción del sábado se sintió en lugares tan lejanos como Fiyi, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Japón, donde dos personas se ahogaron en una playa del norte del país debido a las altas olas provocadas por el tsunami.

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Más de un día después de la erupción, países a miles de millas al oeste tienen nubes de ceniza volcánica sobre ellos, dijo el experto neozelandés WeatherWatch.

Los primeros datos sugieren que la erupción fue la mayor explosión desde el Monte Pinatubo en Filipinas hace 30 años, dijo el vulcanólogo neozelandés Shane Cronin a Radio Nueva Zelanda.

“Es una erupción que se ve mejor desde el espacio”, dijo Cronin.