Arturo Vaquero volvió a su tierra natal en Ahuehuetitla, en el estado mexicano de Puebla, hace semanas con motivo de la fiesta patronal. Ahí lo sorprendió la cuarentena impuesta por la pandemia de COVID-19, y no puede regresar a Estados Unidos, su tierra de acogida. Ahora su vida está en pausa a la espera de poder volver.
Desde entonces, su familia quedó partida en dos. Una parte se quedó en Estados Unidos y la otra en este municipio de cerca de 2,000 habitantes.
Más de una veintena de migrantes originarios de esta comunidad han fallecido en Estados Unidos debido al nuevo coronavirus.
“Se murieron tres compadres, un cuñado y mucha gente conocida de nosotros. Mucha, mucha gente. Es algo increíble, no creíamos que murieran. Pero ni modo, así es la vida”, cuenta Arturo Vaquero, uno de los migrantes atrapados que se resguarda por miedo a contagiarse, a Víctor Silva, corresponsal de Noticias Telemundo.
Como su familiar Arturo, Baltazar Vaquero quedó atrapado en este municipio de la sierra de Acatlán, en el suroeste de Puebla. Teme por su salud, pues sabe que las personas diabéticas y con la presión arterial alta corren mayores riesgos de enfermar. Enfermedades que él justamente padece.
“Ya los quiero ver, ya me quiero ir”, dice a su hija a través de una videollamada una mujer de la familia Vaquero, que también está atrapada allí.
“Muy pronto, ma, muy pronto”, le responde la hija desde el otro lado del teléfono. “Cuídense, no salgan, protéjanse”, les advierte.
Puebla es el quinto estado de México con más fallecimientos reportados hasta la fecha, 1,406, y más de 11,000 casos positivos.
En México hay más de 238,000 casos confirmados y más de 29,000 muertes.
Sin migrantes, esta comunidad se queda sin dinero. “Han bajado las remesas porque son ellos los que traen para que aquí nuestro municipio sobreviva”, asegura Evolí Morán Bravo, de la organización Apoyo al migrante.
De acuerdo con las autoridades municipales, más del 90% de la población de Ahuehuetitla ha emigrado a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades.
[Resultado que sorprende a los economistas: las remesas a México aumentaron en mayo]
Como esta familia, cientos de mexicanos que viven y trabajan en el país vecino se quedaron varados en su tierra natal por el cierre de las fronteras. Algunos están de visita, otros perdieron el empleo, otros enfermaron de coronavirus.
A la espera de volver a Estados Unidos, Ahuehuetitla se ha convertido en el refugio de estos mexicanos que esperan pronto regresar a su otro hogar.
Puebla es el tercer estado en México con mayor número de inmigrantes en Estados Unidos: aproximadamente 56,000 poblanos viven en este país, de los cuales la mayoría reside en Nueva York, de acuerdo con el Anuario de Migración y Remesas 2020.
Hasta la fecha, cerca de 1,200 mexicanos han fallecido en Estados Unidos a causa de este virus, de los cuales 700 son de origen poblano; el 58%. En Nueva York se ha registrado por el momento la muerte de unos 349 poblanos.
El pasado 27 de junio el Consulado de México en Nueva York inició el proceso de repatriación de cenizas. Unas 272 urnas con cenizas de migrantes que fallecieron por COVID-19, principalmente en el estado de Nueva York, fueron registradas ante el consulado para que regresen a Puebla.
Con el rebrote de casos en Estados Unidos, el panorama se complica para las familias migrantes.
La pandemia de COVID-19 impacta de forma desproporcionada a la comunidad latina, cuyos miembros tienen cuatro veces más posibilidades de contagiarse que los anglosajones. La mayoría de las personas latinas se dedica a tareas esenciales y siente temor de infectarse.
Los latinos representan el 18% de la población del país, pero el porcentaje de nuevos enfermos de COVID-19 que pertenecen a este grupo asciende al 34%, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Editado por Gabriela Martínez, a partir del reporte Víctor Silva y con información de Milenio.
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