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La Corte Suprema refuerza el derecho al aborto al anular una ley que habría cerrado casi todas las clínicas de Louisiana

El alto tribunal enfría así las esperanzas de republicanos de limitar este derecho, consagrado en 1973, ahora que la mayoría de magistrados son conservadores.

La Corte Suprema ha anulado este lunes la ley aprobada en 2014 por el estado de Louisiana para regular las clínicas de aborto, reafirmando así este derecho frente a la ofensiva legal lanzada por el Partido Republicano.

Se trata del primer dictamen en este sentido durante el mandato de Donald Trump, que ha auspiciado esos ataques contra el aborto en un momento en el que, por la mayoría conservadora en la Corte Suprema, se pudo pensar en derogar o recortar este derecho pese a estar reconocido por el máximo tribunal desde 1973.

El presidente de la Corte, John Roberts, se ha unido en el voto a los cuatro magistrados progresistas para derrotar las tesis de los cuatro conservadores por 5-4, aunque no ha respaldado los argumentos de los progresistas.

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Roberts es también conservador, pero ha votado con los progresistas en diversas ocasiones; recientemente, facilitó el dictamen histórico contra la discriminación laboral de las personas LGBTQ; y también la anulación de la decisión de Trump de acabar con el programa DACA, que protege de la deportación a los migrantes llegados al país de forma ilegal cuando eran niños de la manos de sus padres.

La ley anulada este lunes requería a los doctores que realicen abortos tener el permiso de algún hospital cercano para admitir y tratar a pacientes en ese centro; ese cambio habría obligado a cerrar todas menos una de las clínicas de aborto en funcionamiento en Louisiana. Sólo dos de los cinco doctores que realizan abortos en ese estado cumplen ese requisito, según el diario The New York Times.

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Los defensores de la ley aseguraron que eso protegía a las mujeres, puesto que aseguraba la competencia profesional de los doctores. Sus opositores denunciaron que raramente una mujer requiere hospitalización por un aborto, y en cualquier caso podrían acudir a cualquier centro médico en caso de necesitarlo aunque el doctor que realizara la interrupción del embarazo no trabajara allí.

Un juez federal de Baton Rouge anuló la ley en 2017, asegurando que obstaculizaba el derecho al aborto, pero su decisión fue recurrida ante la Corte Suprema. El alto tribunal ya había eliminado en 2016 una ley similar en Texas, y ahora ha hecho lo mismo, asegurando que va en contra de su dictamen histórico a favor del aborto de 1973, conocido como Roe v. Wade.

“Es resultado en este caso está supeditado a nuestra decisión de hace cuatro años invalidando una ley casi idéntica en Texas”, ha dictaminado Roberts, en dos ocasiones anteriores sí se pronunció a favor de restringir el derecho al aborto.

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